sábado, 27 de septiembre de 2008

LA CRISIS ECONOMICA Y FINANCIERA DE EEUU



10 CLAVES NUEVO ORDEN,EN EL SISTEMA FINANCIERO MUNDIAL

(Por Víctor Herrero/ Nueva York)

Las últimas dos semanas confirmaron que el mundo vive la peor crisis financiera desde la Gran Depresión. Según los expertos, los principales cambios que sufrirán los mercados serán nuevos modelos de negocios en los bancos, mayores regulaciones y un aumento del financiamiento local.

En una señal de que el bajón inmobiliario -que originó la debacle en EE.UU.- podría estar cerca de terminar, varios fondos soberanos invertirían millones de dólares en bienes raíces durante los próximos años.


1. FALTA DE LIQUIDEZ ACOTADA A PAISES DESARROLLADOS

Una gran diferencia entre la actual crisis financiera y los últimos episodios que se habían registrado en el mundo es que ésta tiene su epicentro en Estados Unidos y no en mercados emergentes.

Según el economista de Merrill Lynch, Felipe Illanes, la crisis de liquidez (credit crunch) está acotado a las economías desarrolladas, y aunque tarde o temprano se sentirán los efectos en el resto del mundo, serán amortiguados por las enormes reservas de los países emergentes, que en muchos casos son exportadores de materias primas.


2. 'UP GRADE' A LATINOAMERICA

La emisión de deuda y acciones latinoamericanas debería cobrar más relevancia en los próximos meses, según actores del mercado local, en la medida que operaciones que iban a realizarse en Europa y EE.UU. se hagan en la región, donde la liquidez ha aumentado con fuerza en los últimos años.


3. MAS Y MAS REGULACION

Las clasificadoras de riesgo Moody's y Standard&Poor's ya están adecuando sus modelos de evaluación de riesgo a las mayores regulaciones que enfrentará la industria financiera mundial.

En medio de un fuerte debate por el rol que cumplieron estas agencias en el origen de la crisis -le asignaron la nota máxima a papeles estructurados que mezclaban hipotecas "prime" con "subprime"- la FED aumentó su supervisión sobre los bancos de inversión, que hasta ahora no estaban bajo su ámbito de regulación.

Además, en Wall Street esperan que cualquier plan de rescate que salga del Congreso venga acompañado de un fuerte aumento en el rol regulatorio del gobierno, para evitar nuevos errores al medir riesgos, y los ataques especulativos que ha sufrido el mercado en las últimas semanas.


4. NUEVO MAPA BANCARIO

La desaparición de varios bancos de inversión en EE.UU. cambió el mapa mundial de la banca.

Según un ranking elaborado por Reuters -después de la caída de Lehman Brothers y el rescate de AIG-, el banco más grande del mundo es el chino ICBC, con un valor de mercado de unos US$210.000 millones. Bank of America -hasta hace dos meses en cuarto lugar- pasó a la segunda posición tras adquirir Merrill Lynch, quedando con una capitalización de US$198.000 millones.



Citigroup, que hace un año era el más grande del mundo, ahora está en la posición número 9, con una capitalización de US$98.000 millones. El Banco Santander se consolida en el octavo lugar, con US$101.000 millones.


5. OTRO MODELO DE NEGOCIO PARA LA BANCA EUROPEA

El plan de salvataje que se negocia en el Congreso de EE.UU. incluye la compra de activos "tóxicos" de entidades extranjeras que operen en ese país, lo que a juicio de los analistas cambiaría el modelo de negocios de bancos como Deutsche Bank, HSBC, UBS, Barclays o el BBVA, que ahora tendrán que atenerse a las nuevas regulaciones sobre sus operaciones en EE.UU. y que explican una buena parte de su volumen de negocios.

El economista de Merrill Lynch, David Rosemberg, explica que en el viejo continente la economía real ya está al borde de la recesión y los mercados financieros empiezan a afectarse. "Los mayores contagios los hemos visto en Inglaterra e Islandia, cuyos bancos estaban muy expuestos a los activos riesgosos en EE.UU.", señala.


6. FONDOS SOBERANOS A LA CAZA DE BIENES RAICES

Los fondos soberanos de países como China, Dubai, Libia, Singapur, Corea del Sur, Kuwait y Noruega fueron agresivos compradores de paquetes accionarios de bancos estadounidenses cuando empezó la crisis "subprime" a fines de 2007.

Según la consultora inmobiliaria CB Richard Ellis, ahora los ojos de estos fondos -se calcula que manejan US$12 trillones- están puestos en miles de propiedades que han bajado de precio en los últimos 12 meses.

CB proyecta que la inversión en bienes raíces subirá del 4% al 7% de la cartera de los fondos soberanos mundiales hasta el año 2015.


7. PETROLEO SEGUIRIA CARO

El analista de commodities de Merrill Lynch, Francisco Blanch, afirma que "gran parte de la liquidez generada en los últimos años se invirtió en el boom inmobiliario y muy poco en energía. Eso generó dos problemas: la crisis "subprime" y una escasa oferta de materias primas, lo que derivó en inflación".

El experto señala que los fundamentos del mercado anticipan una baja en los precios de las materias primas por la menor demanda. Pero alerta que es posible que esto no ocurra pronto, porque -a diferencia de lo que ocurre con otros mercados- gran parte de los países donde iría la inversión en exploración para aumentar los suministros están cerrados a la inversión extranjera.


8. FIN A LOS SUELDOS MILLONARIOS

Hasta ahora, los CEO ganaban compensaciones multimillonarias por asumir altos riesgos, con jugosas ganancias. En este momento, los analistas asumen que el negocio de los bancos será más austero -estará basado en la inversión de los depósitos de clientes- y que eso limitará los "premios" a los ejecutivos en la Gran Manzana.


9. APUESTA POR ACCIONES PUNTUALES

Por ahora las recomendaciones de los analistas son mantenerse refugiado en instrumentos de renta fija y alejado de las acciones, debido a que se avecinan al menos dos años de menor crecimiento mundial. Esto, pese a que los corredores de bolsa aseguran que existen oportunidades puntuales para comprar papeles que están en mínimos históricos y que no tienen mucho espacio para seguir cayendo.

Prueba de ello es que varios fondos de inversión privados en EE.UU. han anunciado la compra de paquetes de acciones, mientras empresas como Microsoft y Hewlett Packard están recomprando paquetes de sus propios títulos.


10. VENTAS CORTAS EN EL BANQUILLO

La venta corta de acciones -una operación donde se arriendan papeles pagando una comisión y se venden apostando a que el precio bajará- fue suspendida en Estados Unidos y Europa. Aunque en Chile este tipo de operaciones es escaso, algunos corredores señalan que su prohibición en el exterior inhibirá el crecimiento de las transacciones más complejas.

Ocho pasos para entender las turbulencias que remecen a EE.UU.
El problema que hoy ha escalado a magnitudes impensadas encuentra sus orígenes en la última década, cuando comenzaron a entregarse créditos hipotecarios con gran facilidad.



¿CUAL ES EL ORIGEN DE LA CRISIS?

Durante gran parte de esta década, la tasa de interés de Estados Unidos estuvo históricamente baja. Obtener capital era barato. Con tanto dinero en mano, los bancos y las firmas financieras salieron en busca de inversiones cada vez más arriesgadas.
Un ámbito en el cual canalizaron ese dinero fresco fue el de las hipotecas, en especial las de alto riesgo, también llamadas subprime. De pronto, millones de personas sin o con un mal historial de crédito accedieron a generosas hipotecas por sus viviendas, o a préstamos inmobiliarios baratos. Al mismo tiempo, Wall Street reunía miles de estas hipotecas, las convertía en exóticos instrumentos financieros (llamados derivados, ya que "derivan" del valor subyacente de un activo, en este caso las hipotecas), los que después vendían a inversionistas de todo el mundo.
Todo iba bien, hasta que la Reserva Federal (Fed) comenzó a subir las tasas de interés a partir de 2004. Muchas hipotecas eran a tasa variable y pronto aumentaron los impagos.



¿Cuál es la relación entre la crisis subprime y la crisis del crédito?
Con el alza de los impagos los derivados de las hipotecas comenzaron a perder valor a pasos vertiginosos. Todos los tenedores de estos instrumentos trataron de deshacerse de estos valores al mismo tiempo, hundiendo aún más su precio. Así se produjo la situación de que sólo había vendedores, pero ningún comprador. Con miles de millones de activos hipotecarios "podridos" en sus balances, las firmas se vieron obligadas a asumir pérdidas gigantescas.


Esto, a su vez, generó otro efecto: privados de capital, los bancos no estaban dispuestos a prestar dinero. Pero al mismo tiempo necesitaban acceder a más capital para sanear sus libros. Esto llevó a que el mercado de crédito se enfriara, obligando a la Fed a inyectar dinero barato al sistema para evitar una crisis de liquidez.



¿POR QUE SE HABLA TANTO DE LA CDS?

Desde el inicio de la crisis, uno de los derivados más populares es el credit default swaps (CDS), una suerte de seguro contra el impago de una deuda (sea hipotecaria o el bono de una empresa o país). El mercado global de CDS asciende hoy a unos US$ 60 billones (esto es 60 millones de millones).
Estos valores sólo se transan entre jugadores financieros, por lo que apenas están regulados. Muchos acusan a algunos de sus participantes de especular con los CDS al apostar a impagos, desestabilizando aún más la delicada situación financiera.

¿POR QUE QUEBRO EL MODELO DE LA WALL STREET?

Estas firmas participaron alegremente de la fiesta hipotecaria. Pero cuando tuvieron que asumir pérdidas multimillonarias por la crisis subprime, su base de capital se esfumó. A diferencia de los bancos comerciales, las firmas de Wall Street no tenían depositantes, una fuente de capital a la cual podrían haber recurrido en caso de emergencia. Además, como estaban menos reguladas que los bancos tradicionales, podían asumir un nivel de deuda frente a capital mucho mayor. Lehman Brothers, por ejemplo, tenía 30 veces más deuda que capital.



¿QUIEN TIENEN LA CULPA DEL ACTUAL CRISIS?

Todos culpan a todos. Algunos apuntan a la Fed por permitir que el dinero fuera tan barato durante tanto tiempo. Otros culpan a los barones de Wall Street y su avaricia. Otros afirman que faltó una supervisión más estricta de las autoridades.
¿En qué consiste el paquete de rescate?



El Departamento del Tesoro quiere disponer de US$ 700 mil millones para adquirir los activos "podridos" de las instituciones financieras. A diferencia de la deuda subordinada chilena de inicios de los años 80, cuando el gobierno inyectó dinero a los bancos para evitar una corrida, Washington apuesta a que la liquidez retornará si retira esos activos.


Pero muchos ven en ello un rescate del sistema financiero sin que sus protagonistas tengan que pagar la cuenta. Es probable que un plan final incluya que el dinero se parcele en cuotas, que se establezca una entidad que supervise las compras del secretario del Tesoro, Henry Paulson, y, tal vez, se estipule que las firmas que se beneficien de ello impongan límites a las remuneraciones de sus ejecutivos.



¿VA A FUNCIONAR EL PLAN?

Nadie sabe. No existe un antecedente de esta envergadura para saber si resultará. Además, Paulson, ha sido bastante errático durante la crisis. Muchos creen que de haber intervenido con mayor certeza antes, la cuenta final para los contribuyentes hubiera sido menor. Pero al juzgar por la reacción de las bolsas, el mercado parece apostar a que el plan funcionará.

¿SE A VECINA UNA ERA DE MAS REGULACION?

Esa época ya comenzó, ya que parece existir un consenso político en que la falta de regulación fue una de las causas de la crisis. El superintendente de valores y seguros, Christopher Cox, ha pedido autoridad para supervisar el mercado de los derivados. Algunos piensan que de esta crisis nacerá una agencia gubernamental que tendrá amplios poderes regulatorios sobre los mercados financieros.

EEUU:CONTINUAN INTENSAS CONBERZACION PARA LOGRAR EL ACUERDO SOBRE PLAN DE RESCATE FINANCIERO

(Por Reuters)

George W. Bush dijo que el plan de salvataje costaría "mucho menos" de US$700 mil millones, debido a que el precio de los activos que el Gobierno comprará subiría con el paso del tiempo.

El Congreso de Estados Unidos se embarcó el fin de semana en una misión para alcanzar un acuerdo en torno al propuesto plan de rescate antes de que los mercados bursátiles abran el lunes, en un intento por terminar con la mayor crisis financiera del país desde la Gran Depresión.
Los negociadores trabajaron durante toda la noche del viernes y parte de la mañana del sábado, mientras que buena parte del país hizo una pausa para observar el primer debate entre los candidatos presidenciales, el demócrata Barack Obama y el republicano John McCain.
En tanto, el senador demócrata Harry Reid dijo el sábado que los negociadores han logrado avances significativos en torno a la propuesta, haciéndose eco del optimismo manifestado por el presidente George W. Bush.
Además, el senador republicano Mitch McConnell dijo que el objetivo es lograr un acuerdo el domingo y votarlo el lunes.



PLAN COSTARÍA MENOS

El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, intentó reducir las preocupaciones en torno al plan de rescate por US$700 mil millones, y dijo que el costo final del proyecto sería mucho menor debido a que el precio de los activos que el Gobierno comprará subiría con el paso del tiempo.
"Varios de los activos que el Gobierno compraría posiblemente aumentarían su valor con el tiempo. Esto significa que el Gobierno será capaz de recuperar gran parte, sino todo, el gasto original", señaló Bush en su discurso de radio de todos los sábados.
El presidente de Estados Unidos reiteró también sus advertencias en torno al fracaso del sistema financiero, y agregó que ello pondría a la economía estadounidense en camino hacia una "profunda y dolorosa recesión".
Bush señaló que confía en que la legislación que se negocia con el Congreso durante el fin de semana sea aprobada "muy pronto", y agregó que existe "amplio acuerdo" en los puntos más importantes.
"Debemos liberalizar el flujo del crédito a los consumidores y las empresas al reducir el riesgo que representan los activos riesgosos", indicó el mandatario.
"Debemos asegurar que los contribuyentes estén protegidos y que los ejecutivos (de firmas) colapsadas no reciban una ola de dólares de sus impuestos, y que exista una junta bipartita para supervisar estos esfuerzos", agregó.



BUSH:PLAN DE RESCATE FINANCIERO SERA APROBADO

(Por EFE)

El Mandatario estadounidense y el primer ministro británico, Gordon Brown, concordaron en la viabilidad de la medida.

El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, aseguró hoy que el plan de rescate del sistema financiero de su país se acabará aprobando y una vez salga adelante podrá calmar las turbulencias en los mercados.
En declaraciones junto al primer ministro británico, Gordon Brown, con quien hoy se reunió en el Despacho Oval, Bush afirmó que "le he dicho que el plan es lo suficientemente grande como para marcar la diferencia y creo que acabará siendo aprobado".
El Congreso y la Casa Blanca intentan llegar a un acuerdo sobre el plan de rescate, valorado en 700.000 millones de dólares, presentado por el Tesoro.
La Casa Blanca afirmó que la aprobación es urgente para hacer frente a las turbulencias en el sistema financiero.
El jueves, los legisladores llegaron a un principio de acuerdo aunque el consenso saltó por los aires en una reunión por la tarde en la Casa Blanca entre Bush, los candidatos presidenciales Barack Obama y John McCain y una delegación del Congreso.
Brown afirmó que su país apoya el plan de rescate y consideró que es "lo correcto" para hacer frente a los problemas en el sistema financiero.
"Seguiremos apoyando a la Administración en todo lo que está haciendo para tratar de reestabilizar los mercados financieros", aseguró el primer ministro británico.
Ambos mandatarios trataron también sobre asuntos como el comercio y la necesidad del éxito de la ronda de Doha, así como de la situación en Irak y Afganistán, donde Estados Unidos y el Reino Unido tienen desplegadas tropas.


CONGRESO DE EEUU BUSCARA CERRAR ACUERDO POR RESCATE FINANCIERO DURANTE EL FIN DE SEMANA

(Por Reuters)

La Presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, dijo que los legisladores trabajarán durante el fin de semana en lograr el acuerdo del plan de rescate.

La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, dijo que los legisladores trabajarán durante el fin de semana en lograr el acuerdo del plan de rescate.
También afirmó que los recortes tributarios a ganancias de capital no están entre las propuestas republicanas que serían aceptables en este proyecto.
El representante Barney Frank sostuvo que el Tesoro norteamericano ha acordado realizar el desembolso de fondos del plan en tramos, y agregó que también acordó limitar el pago a ejecutivos, como garantía para los contribuyentes. Dijo que espera que el acuerdo se logre antes de que los mercados asiáticos abran el lunes.
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, dijo que el plan de rescate financiero será lo suficientemente amplio como para "hacer la diferencia" en el sistema financiero y se mostró confiado en que será aprobado.
En tanto, el primer ministro de Inglaterra, Gordon Brown, apoyó el plan de salvataje y los esfuerzos del gobierno norteamericano por "restabilizar" los mercados financieros.



SECRETARIO DEL TESORO IMPLORO DE RODILLAS APOYAR PLAN DE RESCATE DE BUSH

(Por La Tercera.com)

En un acto desesperado, Henry Paulson pidió a la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, que salve el proyecto.

En medio de las intensas negociaciones y tiras y aflojas entre demócratas y republicanos para aprobar el plan de rescate financiero en Estados Unidos, el secretario del Tesoro, Henry Paulson, (cargo equivalente al ministro de Hacienda en Chile) imploró de rodillas a la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, que salve el proyecto clave de salvataje a Wall Street.
Según relata hoy un artículo del periódico norteamericano New York Times, ayer jueves en la noche -luego que la reunión entre demócratas, repúblicanos y el Presidente de Estados Unidos, George Bush, concluyera sin éxito-, Paulson en un acto desesperado en el salón Roosevelt de la Casa Blanca, se arrodilla y le dice a Pelosi: "No lo arruines", en referencia al plan de salvataje que a esa hora no tenía apoyo político.



"No sabía que eras católico", contestó irónicamente Pelosi en referencia a su acto de arrodillarse, según afirmó al periódico alguien que presenció la escena. "No soy yo quien lo está tirando por tierra, son los republicanos", continuó la parlamentaria, a lo que Paulson contestó: "Lo sé, lo sé", en medio de un suspiro.
Muchos analistas han situado a Nacy Pelosi como una de las mujeres más poderosas de Estados Unidos. En estos momentos existen intentos desesperados del gobierno norteamericano por consensuar un plan de rescate en el mundo político.



EX PRESIDENTE DE LA FED PIDE RAPIDA APROBACION DE PLAN DE RESCATE FINANCIERO

(Por Reuters)

Junto al ex secretario del Tesoro, George Shultz, Alan Greenspan señaló que una acción inmediata evitaría una contracción económica.

Presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Alan Greenspan y el ex secretario del Tesoro, George Shultz, instaron a los legisladores estadounidenses a aprobar rápidamente el paquete de rescate financiero, para favorecer a la economía.
"Llamamos urgentemente a una acción inmediata, extensiva, que mantendría las funciones de los mercados crediticias y evitaría una contracción económica seria", dijeron ambos en una carta publicada el viernes en el sitio de internet del Wall Street Journal.



"La experiencia pasada en crisis financieras demuestra que la actividad económica general se contrae pronto depures de la crisis, a menos que acciones correctivas rápidas alivien la crisis", dijo.
En varias ocasiones en los años 1960, 1970 y 1980 Shultz se desempeñó como secretario de Trabajo, del Tesoro y de Estado mientras que Greenspan fue presidente del banco central estadounidense de 1987 al 2006.

EEUU:SENADO ACUERDA FINANCIAR PRESTAMOS DE US$25 MIL MILLONES PARA INSDUSTRIA AUTOMOTRIZ

(Por Reuters)

La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó el proyecto de ley previamente esta semana y ahora éste se dirige a la Casa Blanca, para que lo promulgue el presidente George W. Bush.

El Senado de Estados Unidos acordó el sábado financiar un paquete de préstamos de US$25 mil millones para ayudar a los atribulados fabricantes de automóviles, como parte de un gigantesco proyecto de ley de gastos que mantendrá al Gobierno funcionando hasta el 6 de marzo del 2009.
La ley de gastos de más de US$630.000 millones, que fue aprobada con 78 votos a favor y 12 en contra, es necesaria para mantener al Gobierno operando luego de que el año fiscal expire el 30 de septiembre.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó el proyecto de ley previamente esta semana y ahora éste se dirige a la Casa Blanca, para que lo promulgue el presidente George W. Bush.

FMI advierte que economía global enfrenta una larga y duradera desaceleración
El director gerente del Fondo Monetario Internacional, Dominique StraussKahn, acogió positivamente las medidas tomadas por Estados Unidos para estabilizar su sistema bancario.

El director gerente del Fondo Monetario Internacional, Dominique StraussKahn, acogió positivamente las medidas tomadas por Estados Unidos para estabilizar su sistema bancario, y advirtió que la economía global enfrenta una larga y duradera desaceleración debido a la crisis financiera.
En una entrevista con el periódico francés Journal du Dimanche, el líder del FMI señaló que el plan de rescate estadounidense debería pavimentar el camino para las medidas que se tomen a nivel internacional a fin de superar las turbulencias en los mercados.


CHINA:DERRUMBE DE HIPOTECAS SUBPRIME EN EEUU,CAUSO CRISIS MUNDIAL

(Por EFE)

El derrumbe de las hipotecas de alto riesgo es la causa de la crisis económica y financiera en la que está inmersa la economía mundial, afirmó el primer ministro chino, Wen Jiabao.

El derrumbe de las hipotecas subprime (de alto riesgo) ocurrido en Estados Unidos es la causa de la crisis económica y financiera en la que está inmersa la economía mundial, afirmó hoy el primer ministro chino, Wen Jiabao.
En su intervención en el Foro Económico Mundial que se desarrolla estos días en la ciudad china de Tianjin (norte), Wen achacó el frenazo de la economía mundial a este hecho y explicó que los objetivos ahora deben ser recuperar la confianza y estrechar la cooperación internacional.
"La confianza de la gente, de los economistas y de los líderes es básica. Ahora la confianza es más valiosa que la divisa o el oro", enfatizó el jefe del ejecutivo chino.


Wen pidió "proactividad" a todos los agentes implicados y expuso que China debe "mantener el impulso económico y evitar los altibajos" para contribuir a la estabilidad mundial.
Sin embargo, reiteró la postura de Pekín de no modificar su política macroeconómica (la revalorización del yuan es una medida largamente reclamada en Europa y EEUU), que seguirá siendo "cautelosa y prudente" ante la volatilidad mundial.
"China tiene que continuar con un crecimiento económico progresivo, rápido y a largo plazo", apuntó.
El primer ministro expuso que un balance equilibrado entre crecimiento económico, mantenimiento de los precios y creación de empleo es el camino a seguir.
No obstante, reconoció que la economía se enfrenta a dificultades importantes para seguir creciendo al mismo ritmo (11,9% en 2007). "Ya dije que 2008 sería el año más complicado para la economía china", explicó.
Entre las circunstancias adversas que debe afrontar el país, Wen citó la mala coyuntura mundial, la volatilidad financiera y el aumento de los precios, que, sin embargo, compensó con condiciones favorables como el potencial del país, la urbanización y la industrialización.

Cuando se cumplen 30 años de la reforma económica que abrió China al mundo, Wen aprovechó para alabar la labor hecha por el Gobierno en estos años.
"En 1978, China representaba el 1% del PIB mundial y treinta años después, ya suma casi el 5%", señaló, e invitó al pueblo chino a seguir ahondando en las reformas para lograr "una sociedad armoniosa", término acuñado por el presidente Hu Jintao.

LA CRISIS FINANCIERA A DESATADO PROTESTAS EN WALL STREET

Las acciones en Wall Street experimentaron un repunte ante la esperanza de que los legisladores aprueben el paquete financiero de ayuda al sistema bancario, antes de que se reanuden las operaciones de la bolsa el lunes.
Pero son los mercados de dinero, donde los bancos se prestan entre sí a diario, los que están causando una verdadera preocupación. Allí las cosas están casi paralizadas.
La Reserva Federal ha inyectado cantidades sin precedentes de dinero en efectivo al sistema.
Ahora es la única fuente de financiamiento a corto plazo para los bancos estadounidenses que normalmente se prestan entre sí o reciben dinero de otros inversionistas. Ahora todo el mundo está acaparando dinero en efectivo.
Este mercado ha sido descrito como el latido del corazón de la banca, el flujo de dinero que permite que se le hagan préstamos tanto a los negocios como a los individuos.
El colapso de Washington Mutual, el mayor fracaso bancario estadounidense, da a los mercados una visión de lo que puede pasar.



Si un acuerdo sobre el plan de rescate no se logra para aliviar a las compañías financieras de sus mañas deudas, más bancos estadounidenses quedarán fuera del mercado.
Hay cierta tranquilidad por el hecho de que Washington Mutual fue rescatado por JP Morgan Chase.
Pero incluso ese poderoso banco tiene recursos limitados y no puede siempre ser llamado por las autoridades federales como un comprador de última instancia.
El momento fundamental para los mercados financieros estadounidenses llegó a mediados de la semana pasada cuando muchos ciudadanos de a pie retiraron cantidades gigantescas de fondos mutuales, que son usados como cuentas de ahorros y considerados tan buenos como efectivo.


Eso asustó a las autoridades que se encontraron contemplando el abismo de una completa paralización del sistema financiero.
Más retiradas enormes del mercado de fondos de dinero llegaron este jueves cuando se estancaron las conversaciones en Washington. No fue un buen augurio.
La rapidez es ahora esencial.
Si no se alcanza un acuerdo antes de que termine el fin de semana los precios de las acciones podrían sufrir una prolongada caída.
Los mercados de crédito siguen atascados y sólo los bancos centrales están suministrando préstamos a corto plazo y la demanda de financiamiento de emergencia ha sido abrumadora.
Aquí en Wall Street la sensación de crisis inminente es palpable. Se está acabando



¿NUEVO ORDEN FINANCIERO INTERNACIONAL?

(David Cuen BBC Mundo)

El remezón que sacudió a los mercados todavía se siente en las plazas financieras. Esta semana hemos visto a bancos quebrados, nuevas fusiones y rescates de emergencia por parte del gobierno de Estados Unidos.
De las cinco grandes entidades de inversión independientes que habitaban en Wall Street sólo dos se mantienen en pie, aunque tambaleándose: Morgan Stanley y Goldman Sachs. Lehman Brothers sucumbió dando paso a la crisis financiera de esta semana y Merrill Lynch fue adquirido por Bank of America.
Entonces ¿qué está pasando? El problema se viene arrastrando desde hace varios meses cuando se dieron los primeros avisos de la crisis crediticia en Estados Unidos.
Los analistas parecen sugerir que la crisis financiera internacional fue provocada en buena medida por falta de supervisión bancaria al sistema financiero, sobre todo en Estados Unidos, donde se han permitido concesiones de crédito de alto riesgo que después ha sido imposible cobrar.
Y en este vendaval sobresalen dos problemas.
Entre el riesgo y la especulación
Por un lado se encuentra el manejo del crédito por parte de la banca de inversión y su falta de liquidez para financiarse ante las embestidas de los mercados.
Y lo más curioso es que estas instituciones estrellas de la globalización han tenido que ser rescatadas por la banca tradicional, que cuenta con liquidez gracias a su amplia base de clientes depositantes algo de lo que carecen, por su naturaleza, los bancos de inversión. El segundo problema se encuentra en el mercado de valores. Estados Unidos y el Reino Unido anunciaron que pondrán restricciones a la práctica bursátil conocida como "venta al descubierto".


Se trata de una extendida práctica en la que los corredores de bolsa venden acciones que no poseen, que toman prestadas, para luego recomprarlas a un precio inferior, es decir, especulan con el precio del mercado.
Y son varios los bancos que acusan a estos corredores de haber puesto en problemas sus finanzas.
¿Entonces estamos frente a una mayor regulación bancaria a expensas del libre mercado?
"Sí. A mí me parece que esa regulación es absolutamente necesaria. La salida de la crisis pasa por la mayor transparencia en los estados contables de las instituciones financieras. Quizá no debemos hablar tanto de una mayor regulación como de una mejor supervisión. Una mayor transparencia que permita conocer cuál es la situación de los balances del sistema bancario", afirma a BBC Mundo Rafael Pampillón, del Instituto de Empresa de Madrid, en España.
Contagiados
La opinión es compartida por Federico Steinberg, investigador del Real Instituto Elcano.


Los recientes sucesos van a requerir una reforma profunda del sistema financiero internacional. Hemos visto sufrir a las instituciones más novedosas como los bancos de inversión que se creía que eran invulnerables y magos de las finanzas", dice Steinberg.
"Pero que tomaban elevadas posiciones de riesgo, sin contar con acceso a una ventanilla en el banco central o depósitos de clientes. Por eso su caída ha quebrado el sistema en una medida muy importante."
Steinberg dice además a BBC Mundo que la lección es que el mundo no está aislado. "No hay mercados solitarios, existe un gran contagio. Otra lección es que la regulación era insuficiente y daba lugar a incentivos erróneas".
Y se refiere también a las medidas de la Reserva Federal estadounidense -que atrajeron críticas de intervencionismo en los mercados- y las califica como necesarias: "situaciones extraordinarias, requieren medidas extraordinarias".



Quizá aún no hayamos visto lo último de la tormenta, pero una de las conclusiones es que estamos frente a un nuevo orden financiero internacional que requiere mayor regulación.
Y aunque los gobiernos no quieren usar ese término, no cabe duda de que a partir de ahora insistirán en una mayor supervisión y transparencia en los mercados financieros pues el presupuesto no alcanzará para rescatar a los bancos que fallen ya sea por sus errores o por la libre especulación del mercado.

"LAS PERSPECTIVAS DE LA CRISIS SON MALAS"

(Por BBC Mundo)

Leopoldo Abadía, jubilado de 75 años y ex profesor del Instituto de Estudios Superiores de Empresa IESE en España, decidió un día hacer inventario de todas las noticias que encontraba en los medios sobre la crisis financiera que se desató de manera global hace un año.
Así fue atando cabos y escribió La crisis Ninja", una explicación "sencilla" de un problema que a muchos resulta difícil de entender.
Su artículo se extendió en internet como la pólvora y su blog recibió en sólo tres meses cerca de 300.000 visitas.
BBC Mundo contó con el profesor Abadía para aclararle a nuestros lectores sus dudas sobre la actual crisis hipotecaria.

Se cumple un año desde que se internacionalizó la crisis crediticia que se había desatado en Estados Unidos. ¿Por qué aún nos cuesta tanto entenderla?
Porque nadie se ha ocupado de unificar las determinadas noticias que circulan por ahí. ¿Por qué no se ha entendido? Por qué se ha hablado en un lenguaje mas técnico que el de la calle.

¿Podría darnos una explicación de la crisis para "principiantes"?

Todo el mundo partía de la base de que quien tiene una casa que vale 100 al año siguiente le valdrá 110.
En este contexto, los bancos, cuya misión es vender dinero, cobraban intereses muy bajos y pensaron que si pudieran subir los intereses y dar muchos créditos harían negocio.
Así nacieron los créditos que yo llamo "ninja, préstamos otorgados a señores sin empleo, sin ingresos fijos ni propiedades, las comúnmente conocidas "subprime".
Este señor sin ingresos fijos de golpe podía obtener dinero para comprarse la casa de sus sueños e incluso le daban un "extra" al darle una cifra superior al valor de la casa confiando en que en un tiempo la propiedad valdría más.
Este tipo se ve con una pedazo de casa, muebles, un coche y se va de vacaciones, y sus amigos, también "ninjas", al enterarse se van a buscar dinero al banco. Así que los bancos empiezan a otorgar gran cantidad de este tipo de hipotecas.
Pero al final dan tantas que se les acaba el dinero, tienen que buscar más y se les ocurre lo que se llama "titularización". Es decir, los bancos empiezan a hacer "paquetes" de hipotecas.
Imagina que tienes 1.000 hipotecas, pues haces 10 paquetes de 100 que incluyen hipotecas buenas, malas, regulares, luego se las vendes a otros bancos.
Este banco ya tiene más dinero para dar más hipotecas, y el segundo banco hace más paquetitos y los vende fuera.
Por lo tanto, bancos de todo el mundo tienen paquetes de hipotecas basadas en que el "ninja" pagará y que el precio de las casas seguirá subiendo.


Ellos piensan "si ese señor no paga la hipoteca la vendo y me quedo con dinero". Y un ahorrista en la otra punta del globo que no sabe nada de esto compra "fondos de inversión" que contienen estos paquetes llenos de "porquería".
De repente, el precio de las casas en EE.UU. baja. Hay una explicación que se me ocurre y es que los "ninjas" empezaron a dejar de pagar hipotecas y que los bancos, al quedarse con las casas, las empezaron a vender como pudieron, contribuyendo a bajar los precios.. Pero la explicación real no la se.
¿Qué provoca todo esto? Todos los bancos del mundo están llenos de hipotecas "ninja" y ninguno sabe la cantidad de porquería que tiene.
Los bancos empiezan a desconfiar los unos de los otros a la hora de prestarse dinero y sólo se prestan dinero a intereses muy altos, por lo que suben los tipos de interés y por lo tanto los recibos de las hipotecas.
Así que una crisis lejana llegó de repente a mi casa. La gente tiene menos dinero y en vez de irse a cenar fuera se comen unas pizzas en casa o deciden no cambiarse de domicilio, las empresas venden menos y les es más difícil conseguir créditos, por lo que despiden personal reduciendo aún más el consumo.
Si a eso sumamos el aumento de los precios del petróleo, las materias primas y derivados, y finalmente de los alimentos, todo esto hace que lo que pasó con aquél ninja en Estados Unidos, nos afecte a todos.
Si desde hace varios años se hablaba de la crisis hipotecaria en Estados Unidos ¿Por qué no se ha hecho nada para remediarlo?
Muchísima gente de mucha categoría ya lo sabía. ¿Por qué se han callado? No lo sé.
Y en cuanto a los entes reguladores, han mirado a otro lado, y tampoco sé la razón. Pero creo que todo esto tiene que ver con un problema ético en la banca.
¿Cómo regular el mercado financiero y el de las hipotecas para lograr un equilibrio entre la libertad de mercado y el poder del Estado?
Volvemos al tema de la ética, donde ha habido un problema muy grave. Los bonos que se daban en el mercado norteamericano estaban ligados a las ventas.
El banco que sea que inventó las hipotecas "ninja" propició que mucha gente saliera a la calle a venderlas cobrando buenos bonos. En este caso creo que el Estado no intervino a través de los entes reguladores.
Yo soy partidario de la iniciativa privada y cuanto menos se meta el Estado mejor.

Pero el Estado debe intervenir en determinados asuntos, y el gobierno estadounidene lo ha hecho sólo al final salvando a los bancos.
El Estado creó las entidades reguladoras pero no se encargó de que éstas cumplieran su función, lo que ha facilitado que estos instrumentos financieros no los haya entendido nadie.
Cuando Bush dijo que Wall Street estaba de resaca me pregunté: ¿Y cuando se pase? ¿Van a seguir creando estos instrumentos financieros que no entiende nadie?
Se ha creado una especie de bola de nieve ininteligible.
¿Hay algún aspecto positivo de la crisis?
Sí, todos aquellos países que pueden comprar más barato y vender más caro. Por ejemplo, ha habido empresas inmobiliarias que aprovechando los bajos precios compran inmuebles en Estados Unidos aprovechándose de la fuerza del euro en este caso.
¿Cuál es su recomendación para que un trabajador promedio pueda obtener más beneficios de su dinero?
El único consejo que puedo darle es que hay que leer algún periódico que otro. Pero también entender perfectamente en qué se invierte. Antes de invertir su dinero, vaya al banco, pregunte las ofertas que tiene y nunca invierta si no las entiende perfectamente bien.
Sólo es necesario hacer preguntas muy simples, como ¿dónde está mi dinero? ¿cuánto me paga al mes en intereses?, pero que se lo digan en dinero cantante y sonante, no en porcentajes. Es posible que el empleado del banco no sepa contestarle.
¿Reducir o aumentar los tipos de interés?
Hay dos posiciones y creo que las dos tienen razón. La Reserva Federal de EE.UU. tiene como misión controlar el crecimiento, el BCE controlar la inflación.
Por eso cuando el Banco Central Europeo (BCE) dice que sube los intereses lo hace bien porque Europa sigue creciendo, a menos ritmo, pero lo que se está disparando es la inflación.


Por su parte, la Reserva Federal evita que el país entre en recesión incentivando crecimiento dando dinero barato. Así que en uno u otro sentido ambas son válidas.
Y finalmente, ¿Cuáles son las perspectivas? ¿Hemos pasado lo peor?
Tengo la sensación de que no. Las perspectivas son malas, porque todavía nadie sabe la dimensión de la crisis. Hace unos meses el Fondo Monetario Internacional decía que la dimensión de la crisis estaba entre US$ 100.000 y US$ 500.000 millones, aquí hay un gran margen de diferencia.
Esto quiere decir que la suma de la "porquería" que tienen estos bancos aún es vaga. Cada día aparecen noticias de tal banco que presenta grandes pérdidas, lo que quiere decir que le han ido venciendo esas hipotecas y no se han ido pagando.
Mientras no se sepa la cantidad exacta no se puede predecir nada. Yo creo que esto va a durar mucho, así que no nos tenemos que hacer a la idea de que esto terminará antes de un año y medio.



IMPACTO EN AMERICA LATINA

(Por BBC Mundo)

Los mercados bursátiles de América Latina han sido escenario de nerviosismo este lunes, tras las noticias del colapso del banco Lehman Brothers y de la consecuente turbulencia financiera en Estados Unidos.
Los principales mercados de la región registraron pérdidas similares a la de sus contrapartes en otras en el resto del mundo.
La peor pérdida la sufrió este lunes el índice Ibovespa de Sao Paulo, Brasil, con una caída de más del 7,5%.
Mientras que el índice Merval de Buenos Aires, Argentina, perdió más del 5% de su valor.
En la Ciudad de México hubo un descenso menos dramático, donde el mercado de valores retrocedió un 3,8%, mientras que en Lima, Perú, fue del 2,5%.
El índice de Santiago de Chile fue el menos afectado por la turbulencia financiera, con una pérdida de poco más de 0,5%.
Impacto limitado
Sin embargo, estos datos no deben engañar, afirman analistas consultados por BBC Mundo: la región se encuentra en un momento económico que permitirá que la crisis financiera estadounidense no afecte a las economías de América Latina.
Habrá sí un impacto en las filiales en la región de Lehman Brothers o de la recién vendida Merrill Lynch -que hace poco anunció una reestructuración de su creciente presencia en la región-, no obstante, como explica Peter West, de Poalim Asset Management en Londres, este será limitado a inversionistas y no tendrá un efecto generalizado.

"Habrá inversionistas en América Latina que tendrán acciones o bonos de Lehman Brothers que han perdido valor", explica West.
"Ellos sufrirán pérdidas, pero pertenecen al sector de la sociedad que mejor puede absorber pérdidas financieras", agrega.
En sentido macroeconómico, las perspectivas son totalmente distintas.
Sin contagio
"El contagio vía financiero de la cesación de pagos de Lehman Brothers o de las intervenciones recientes de la Reserva Federal no debería modificar sustancialmente la percepción general de que las economías emergentes como las de América Latina tienen bastante solidez", opina Federico Steinberg, economista del Real Instituto Elcano de Madrid.
"Las fortalezas intrínsecas de los mercados emergentes hacen que las expectativas sean razonablemente positivas", dice Steinberg.

Esto se debe, como le explica West a BBC Mundo, a que los bancos de los mercados emergentes no están particularmente expuestos al mercado hipotecario y de créditos de bajo riesgo estadounidense, como sí lo están, por ejemplo, las economías europeas.
Al depender más de los actualmente altos precios de los commodities que de la especulación financiera sobre los mercados de créditos, podría decirse que las economías de la región están "protegidas" ante a una crisis financiera que algunos analistas califican de inédita.
Eso no quita, sin embargo, que esa fuerte dependencia de los precios de los commodities pueda transformarse en una trampa si estos precios descienden culpa de una desaceleración del mercado estadounidense, advierte West.
En este caso, economías como la mexicana -cuyas exportaciones a Estados Unidos son un factor clave de su balanza comercial y donde las remesas de los inmigrantes juegan un importante papel- tienen una mayor exposición a esa desaceleración y por ello, podrían verse más afectadas.
Ese posible impacto en el crecimiento de algunos países -afirma Alfredo Coutiño, analista de Moodyseconomy.com- no será detectable hasta finales de año.
Protección.

Pero aún en este escenario, explica Coutiño, América Latina se encuentra en una posición favorable. "Hay una diversificación del comercio de América Latina con el mundo", asegura. "En los últimos años, países como Brasil, Argentina, Chile e incluso México han hecho esfuerzos para alejarse un tanto de Estados Unidos y profundizar sus lazos con Europa y Asia".
"Y mientras Asia -especialmente China e India- continúe creciendo, eso le permitirá a América Latina contrarrestar una posible desaceleración de EE.UU."
Todo esto permite a los analistas creer que el crecimiento que ha logrado América Latina en los últimos años, con una relativa estabilidad de precios y con disciplina fiscal y monetaria, le permitirá navegar las aguas de una tormenta financiera con relativa seguridad.
Y así, los mercados emergentes, tanto de América Latina como de Asia, parecen estar transformándose en el pilar más firme de la economía global.
"A lo que estamos asistiendo es a un reequilibro del poder y la influencia en la economía mundial a favor de los países emergentes", dice Steinberg.
"El peso que tienen en la economía mundial es más fuerte y significativo que hace años, y se encuentran en posición más sólida que Estados Unidos y la Unión Europea. Y estos cambios están aquí para quedarse", concluye.


¿FIN DEL MECARDO LIBRE EN EEUU?

(Por Vladimir Hernández,BBC Mundo)

Milton Friedman, uno de los mayores defensores del mercado libre en la historia, debe estar revolcándose en su tumba.
La crisis financiera que sacude a los mercados de Estados Unidos y Europa desde el año pasado, cuya última víctima fue uno de los bancos históricos, Lehman Brothers, podría significar el inicio de una ola de intervencionismo estatal en el corazón del capitalismo en el mundo.
Ya se dieron los primeros pasos, con la nacionalización de Freddie Mac y Fanny Mae las dos principales hipotecarias estadounidenses. Algo impensable cuando Friedman recorría con libertad los pasillos de la Casa Blanca.
El secretario del Tesoro de EE.UU., Henry Paulson, admite que "mucho de lo que estamos enfrentando son consecuencias de cosas que se hicieron por muchos años".
"Los mercados financieros están atravesando por un momento difícil, mientras trabajamos en arreglar algunos de los excesos que se cometieron en el pasado", aseguró.

"Actualmente vivimos en una nueva era de socialismo, donde se socializa el riesgo y se privatizan las ganancias", indicó a la BBC Benjamin Barber, profesor de ciencias políticas de las universidades de Princeton y Harvard.
"A Lehman Brothers lo dejarán caerse pero si se lleva a otros entonces el gobierno intervendrá y eso significa que mis impuestos se usarán para salvar a banqueros que tomaron decisiones arriesgadas y equivocadas".
"Hemos vivido 30 años de neoliberalismo en el mercado, que significa déjenos ganar y ayúdenos cuando nos va mal", agregó.
Tanto el mea culpa de las autoridades como la inquietud del público estadounidense no ha pasado desapercibida para los candidatos presidenciales estadounidenses.
Horas después de que Wall Street registrase su mayor caída desde el 11 de septiembre de 2001 (y el sexto más alto en su historia), tanto el republicano John McCain como el demócrata Barack Obama revelaban una posición favorable a mayores controles sobre el mercado de capitales en el país. Y ambos tuvieron agrias palabras para los gobiernos anteriores de dejar que la banca hiciese lo que quisiera.
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McCain indicó que de ganar las elecciones iniciaría una reforma regulatoria del mercado de capitales en los primeros 100 días de su presidencia y dijo que "pondremos fin a que Wall Street se maneje como un casino".

Obama, en tanto, ofreció "nuevos marcos regulatorios", pues a su juicio "esta es la crisis financiera más grave desde la Depresión (en los años treinta)".
"No culpo a John McCain de estos problemas, pero sí a su filosofía económica, la misma de los últimos ocho años, que dice que debemos darle más a los que acumulan la riqueza para que de alguna forma estos llegue en gotas al resto", apuntó Obama.
El sentimiento que parece haber en los mercados financieros lo resumió claramente Derek Scott, ex asesor económico del ex primer ministro británico Tony Blair.
"Actualmente las bases del capitalismo liberal están sumamente golpeadas y deterioradas. Ahora seguramente regresaremos a un período de mayor control gubernamental", aseveró.
Complejidad regulatoria
Sin embargo, un mayor control sobre lo que hacen las instituciones bancarias o las casa de bolsa no parece tarea sencilla. La principal traba es la complejidad de los instrumentos financieros que existen, principalmente los llamados derivados.
Warren Buffet, el llamado hombre más rico del mundo y ahora filántropo retirado, los llamó en 2002 "armas financieras de destrucción masiva".
En términos muy simples, los economistas dicen que la crisis crediticia que devengó en la quiebra o desaparición de varios bancos comenzó en el sector hipotecario estadounidense.

El modus operandi fue acumular hipotecas con diferente grado de riesgo, convertirlos o empaquetar dicho préstamos en papeles comerciales (como acciones) que luego serían vendidas a otras instituciones en el mercado.
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Es decir, el banco invirtió en unos bonos cuya garantía de pago eran unos créditos riesgosos negociados por otra entidad bancaria.
La complejidad era tal que muchos actores del mismo mercado no tenían ni idea en dónde exactamente tenían colocado su dinero.
Enfrentando "consecuencias"
"La desregulación que se hizo en los últimos 15 años, incluyendo el gobierno de Bill Clinton del cual fui parte, creó una atmósfera de casino en la que cualquier banco podía hacer dinero sin importar sus niveles de deuda y sin siquiera saber qué tipo de papeles compraban", señaló Robert Reich, ex asesor de la Casa Blanca y actual profesor de la Universidad de Berkeley.
"Una vez le pregunté a un directivo de una institución bancaria qué tipo de inversiones tenía y me dijo 'ni idea'. Esta crisis iba a pasar tarde o temprano", explicó Reich a la BBC.

¿Quién es el responsable?

Hace algo más de 12 meses la crisis dejó de ser un fantasma o un pronóstico agorero para convertirse en realidad.
Cuando los acreedores -muchos de los cuales se reconoce no fueron adecuadamente supervisados- empezaron a tener problemas de pago, fueron aquellos al final de la cadena quienes pagaron las consecuencias. Y como dice la teoría bancaria, cuando el banco ya no emite confianza, no tiene nada que buscar.
Según la teoría de Friedman en estas circunstancias el mercado se corregirá a si mismo, con la llamada "mano invisible" que profetizó en el siglo XVIII el filósofo escocés Adam Smith, el llamado "padre de la economía moderna". Cualquier distorsión, según Friedman, era simple y llanamente culpa del gobierno por no dejar respirar al mercado.
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No obstante, ahora hay una suerte de consenso tanto en Europa y Estados Unidos en que existe una necesidad de ponerle coto a las principales plazas financieras. Tal y como sucedió tras la debacle de los años '30 en EE.UU. cuando justamente se considera que ocurrió la última ola intervencionista en el país, para lidiar con los efectos de la llamada "Depresión".

"Las instituciones financieras y los entes reguladores tuvieron error fundamental en esta crisis. Pusieron el precio del mercado en el corazón de la regulación del sistema. Pero el precio del mercado no puede protegerse de sus propias fallas. Y los reguladores no se dan cuenta de esto cuando está todo bien, sino cuando surgen los problemas. Es entonces cuando se descubre que los bancos exitosos realmente eran bancos muy riesgosos", aseveró a la BBC Avinash Persaud, de la firma de análisis financiero Intelligence Capital.
A la hora de buscar culpables de toda esta situación, muchos analistas apuntan el dedo a la presunta avaricia de los banqueros de arriesgar más (recursos del público) en busca de mayores ganancias.
Pero según le dijo a la BBC George Magnus, economista en jefe del Banco Suizo UBS, "en este tipo de crisis se suele buscar villanos en todas partes. Los bancos son los agentes de la especulación, pero no la causa. Hay que señalar a los gobiernos que desmantelaron los marcos regulatorios décadas atrás".
"Se puede culpar a los bancos y poner en vigencia nuevas normas, pero también hay que revisar la falta de supervisión de los mercados en el pasado", aseguró Magnus.
El debate de lograr un nuevo marco regulatorio en Estados Unidos pudiera estar dando ya sus inicios, en lo que sería un importante cambio ideológico en las altas esferas de tomas de decisiones del país.
No obstante, mientras tanto, aún no se sabe si la crisis financiera ya se cobró a su última víctima o banco, o si aún quedan implicaciones por venir


LA POLITICA TRAS EL RESCATE

(Por Steven Schifferes BBC,Washington)

El dramático plan de US$700 mil millones de la Casa Blanca para rescatar a Wall Street es la principal historia en Estados Unidos, y el más reciente tema sobre el que están forzados a hablar los candidatos a la presidencia.
El efecto inmediato que ha tenido es beneficiar a la campaña de Barack Obama, a quien el público percibe -por un estrecho margen- como alguien más competente para manejar la economía.
Los índices de Obama comenzaron a subir en la encuestas a mediados de la semana pasada, y el promedio de los últimos sondeos le dan una ventaja de 2,7% sobre el senador John McCain, de acuerdo con el sitio RealClearPolitics.
Pero a pesar de que los votantes son cada vez más pesimistas sobre la economía, también están muy divididos y cada vez se muestran más cínicos, sobre lo sabio de un plan de rescate que totaliza US$1 billón para rescatar a Wall Street, cuyos excesos muchos culpan por la crisis.
Y el senador McCain, cuyo instinto ha sido rechazar rescates gubernamentales, podría aún beneficiarse del creciente escepticismo respecto a entregarle al Departamento del Tesoro un cheque en blanco para comprar activos devaluados de Wall Street.
Además ha comenzado a hablar abiertamente sobre la "avaricia" de los banqueros, utilizando un lenguaje más severo que el de Obama, lo que también podría darle un empujón.

DESCONTENTO POPULAR

La comprensión de que el plan de rescate no está cayendo tan bien en la calle como en Wall Street está incitando a los líderes del Congreso a presionar por más concesiones a cambio de un acuerdo sobre el paquete de la administración Bush.
Entre las propuestas que circulan en el Capitolio, el que está ganando más adeptos es el de limitar los bonos ejecutivos.
Algunos demócratas también quieren que el gobierno tenga una participación en la posesión de cualquier empresa que sea rescatada, y otros quieren que las leyes de bancarrota sean debilitadas significativamente para darle a los jueces la discreción para permitir a las familias que enfrentan una ejecución hipotecaria a permanecer en sus hogares.

PESIMISMO

La crisis económica ha llevado a los electores a tener una de las perspectivas más pesimistas en tiempos recientes. Más del 80% del público cree que la economía empeorará, con un 30% afirmando que EE.UU. está enfrentando no sólo una recesión, sino una depresión como la de 1930, según una encuesta reciente de Gallup.
La deteriorada economía es el motivo por el cual casi el 90% del público afirma que el país está encaminado en dirección incorrecta, de acuerdo con el Centro de Investigaciones Pew.
Hasta el momento las medidas del gobierno no han logrado frenar la crisis, ni inspirar confianza.
Sólo uno de cada cuatro electores (28%) apoyan el plan de rescate de US$700 mil millones, mientras que el 37% se opone y el resto está indeciso, según un nuevo sondeo de Rasmussen Research, realizado durante el fin de semana.
Incluso menos personas -uno de cada siete- apoyaban el anterior plan de US$85 mil millones para rescatar a la gigante aseguradora AIG.
Parte del motivo es una profunda desconfianza de la efectividad del gobierno. La mayoría de los votantes afirma que cualquier acción del gobierno federal en la crisis económica probablemente empeore las cosas, en vez de mejorarlas.
Los electores independientes, que están siendo cortejados por ambas campañas presidenciales, son los más escépticos respecto a la posibilidad de un rescate.
Otra gran línea de división es la que existe entre quienes tienen valores y acciones (cerca de dos tercios de los votantes), quienes por poco margen apoyan el rescate, y aquellos que no los tienen, que están fuertemente en contra.
Uno de los motivos por el escepticismo respecto al plan de ayuda es que la mayoría de las personas no se han visto aún personalmente afectados por la crisis.
A pesar del pesimismo, son más los que creen que sus finanzas personales mejorarán el año próximo, que los que afirman que empeorarán.

DOS CAMINOS

Los dos candidatos, cuyas campañas se han visto golpeadas por la crisis, han tomado caminos cada vez más divergentes respecto a un rescate, aunque ambos se han movido con cautela, para evitar ser acusados de bloquear la ayuda.

El senador Obama le ha dado a los planes una cautelosa bienvenida, pidiendo acción urgente al Congreso, pero insistiendo que la gente común, y no sólo los banqueros de Wall Street, se vean beneficiados.
También ha urgido al Congreso y al gobierno a que aprueben otro plan de estímulo económico para impulsar a la economía con más gasto gubernamental.
El senador McCain, quien al principio se opuso al plan de rescate de AIG sólo para apoyarlo al día siguiente, ha pedido más supervisión legislativa de cualquier operación de rescate que lleve el Tesoro estadounidense.
El lunes afirmó que "cuando hablamos de US$1 billón de dinero del contribuyente, 'Confía en mí' simplemente no es suficiente".
Además de atacar a Washington -e implícitamente criticar al secretario del Tesoro republicano Hank Paulson- McCain también habló duramente contra los bonos de Wall Street.

"No podemos permitir que los contribuyentes estén pagando la cuenta por los abultados 'paracaídas de oro' como los que vemos en la bancarrota de Lehman Brothers", dijo a una muchedumbre de trabajadores en lunes en Scranton, Pensilvania.

Obama, que ha sido más moderado en sus críticas hacia Wall Street, ha buscado atacar a McCain por cambiar de opinión, acusándolo de ser un fuerte defensor de la liberalización durante toda su carrera en el Senado, hasta que cambió de opinión la semana pasada.
"Está tratando de compensar por 26 años, en 26 horas, por lo rápido que está cambiando de opinión", señaló Obama en Green Bay, Wisconsin.
Daño a largo plazo
Hasta el momento los candidatos se han mostrado reacios a admitir que un rescate masivo limitaría mucho sus opciones cuando asuman el cargo.
Ambos están recomendando reducciones impositivas que podrían costar entre US$2 billones y US$4 billones durante ocho años de presidencia, según análisis independiente del Centro de Políticas Impositivas.
Sus planes de salud podrían costar otro billón, agregó el Centro.
Obama asegura que podrá pagar por estos planes, aumentado los impuestos a los más ricos -aquellos que ganen más de US$250.000 al año- mientras que McCain afirma que podrá encontrar suficientes ahorros en el presupuesto federal para pagar por sus cortes impositivos.

Pero con un rescate de un tamaño casi equivalente al gasto anual del gobierno (excluyendo la seguridad social y el sistema de salud Medicare) esas aseveraciones suenan cada vez menos creíbles.
James Horney del Centro para la Prioridades Presupuestarias y de Políticas, de tendencia izquierdista, admite que el creciente tamaño del déficit federal -que podría duplicarse de US$600.000 millones a US$900.000 millones durante el primer año del nuevo presidente- hará muy difícil poder aprobar cualquier programa de gasto nuevo.
El viernes, ambos candidatos discutirán sobre política externa, durante el primer debate presidencial.
Pero con sólo 8% del público considerando en este momento que la guerra en Irak es el tema más importante que enfrenta el país -mientras que un 48% afirma que es la economía (según el último sondeo del New York Times y CBS)- el último debate, sobre políticas internas, a mediados de octubre podría ser el más crucial.

A FAVOR Y ENCONTRA DEL RESCATE

(Por Redacción BBC Mundo)

Mientras el Congreso estadounidense debate el plan de la Casa Blanca para aliviar la crisis del sector financiero, defensores y detractores de la propuesta también intentan hacer escuchar sus puntos de vista puertas afuera.
La mayoría coincide en la gravedad de la situación: se está probablemente ante la mayor crisis financiera del país desde la Gran Depresión.
Pero mientras unos pregonan que socorrer a entidades que prestaron dinero irresponsablemente es enviar el mensaje equivocado al mercado, otros sostienen que no hacerlo implica arriesgarse a un colapso generalizado del sistema financiero.

Para unos debiera ser el mercado el que depure el sistema con un mínimo de intervención estatal y sin que los contribuyentes deban pagar la cuenta de su bolsillo.
Para los otros, sólo una decidida acción de la Reserva Federal y del gobierno puede restablecer la confianza quebrada en el sistema y evitar el colapso económico.
Economistas por el "no"
La propuesta original presentada al Congreso por el secretario del Tesoro, Henry Paulson, se basa en un paquete de rescate por US$700.000 millones.
En ella el gobierno asumiría los préstamos de alto riesgo en poder de los bancos en problema, restaurando su cartera crediticia y sacando del "rojo" a las entidades.
También se estima que incluirá restricciones a los sueldos de los ejecutivos y mecanismos más agresivos de supervisión por parte de los entes reguladores. Pero no hay muchos más detalles que estos sobre el plan de Paulson.
Y muy probablemente la propuesta sufra profundas modificaciones si quiere superar las objeciones de los legisladores, a pesar del urgente llamado a aprobarla que hizo el presidente George Bush el lunes pasado.

Por lo pronto, no es buena señal para el gobierno que el republicano Richard Shelby, miembro de la Comisión de Bancos del Senado, sistemáticamente se remita en cada entrevista a una carta abierta que ya lleva cinco páginas de firmas de economistas que se oponen al plan.
La iniciativa es liderada por Paola Sapienza, una profesora de Finanzas de la Northwestern University, y ya cuenta con la adhesión de unos 180 colegas (y creciendo) de todo el país.
Los firmantes señalan "tres fallas fatales" en la propuesta gubernamental.
Según estos economistas, el plan "es injusto" pues subsidia a los inversores a costa de los contribuyentes, "es ambiguo" en cuanto a la misión y las competencias del organismo regulador que propone y "carece de visión de largo plazo" al debilitar el mecanismo de funcionamiento de los mercados en aras de superar disrupciones de corto plazo.

"NO ES UN REGALO"

En cambio, para Sebastián Edwards, profesor de Economía de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), la propuesta contempla las medidas adecuadas y no necesariamente tiene que resultar costosa para los contribuyentes.
"Este paquete no implica un regalo" a los bancos, dijo a BBC Mundo "sino una transacción comercial que puede salir para uno u otro lado... inclusive el gobierno hasta podría ganar dinero con la venta de los títulos" cuando se estabilice la economía.

Según Edwards, la crisis se inició con la burbuja inmobiliaria, cuando "se entregaron hipotecas a gente que luego no las pudo pagar".
El economista explica que de allí surgieron complejos títulos financieros cuyo valor se desconoce con certeza y eso sembró dudas sobre la capacidad de honrarlos por parte de las entidades que los poseían.
Como consecuencia nadie quiere hacer negocios con nadie por temor a que la contraparte quiebre y no le pueda pagar.
"Lo que busca el paquete es remover estos títulos 'tóxicos' de modo que el ciclo del crédito, que es esencial para una economía, vuelva a funcionar", afirmó.
Asumir los errores.

Mark Witte, economista de la Northwestern University, es uno de los firmantes de la carta abierta en oposición al plan.
Según dijo a BBC Mundo no resulta razonable que "los dólares de quienes pagan impuestos terminen yendo a estos bancos a compensar a gente que asumió riesgos desproporcionados" para aumentar sus ganancias.
Cuando una firma se coloca en riesgo de bancarrota -explica- debe recortar los beneficios de sus ejecutivos que la llevaron a esa situación, asumir ajustes o incluso liquidarse. Cuando reciben una ayuda excepcional, como esta, desaparecen los incentivos para las correcciones.

Witte está preocupado además por la falta de "transparencia y mecanismos de supervisión" que se desprenden del proyecto oficial.
"La Reserva Federal siempre está advirtiendo que esto es importante en el sistema financiero, y poner ahora toda esta cantidad de dinero en manos del Tesoro, sin un control claro, no me parece que sea la manera en que deban hacerse las cosas", aseguró.

APRENDER DEL PASADO

"Lo que hay que hacer ahora es evitar males mayores", dijo a BBC Mundo Isaac Cohen, ex funcionario del Banco Mundial y ex director de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
"Es cierto que hubo decisiones irresponsables, que hubo ligereza en mantener una política monetaria de bajas tasas de interés y actitudes de consumo irracionales... pero dejar ahora que esta crisis se extienda y afecte a toda la economía no es tolerable".
Cohen señala que "ya un gobierno dejó caer la economía esperando que el mercado limpiara todo eso y así caímos en la Gran Depresión".
También recuerda que Ben Bernanke, el presidente de la Reserva Federal, es "una de las autoridades en el país" en el estudio de ese período, por lo que "debe saber a lo que nos exponemos".

"NUESTRA ECONOMIA ESTA EN PELIGRO"

(Por BBC Mundo)

Uno de las advertencia más fuertes sobre el estado de la economía de Estados Unidos llegó a través de una alocución televisada de George W. Bush, quien, al defender el plan de rescate financiero presentado al congreso, dijo que toda la economía está en peligro.
El presidente estadounidense inició su discurso para televisión calificando la situación como una "severa crisis financiera".
Bush dijo que, como republicano, creía profundamente en la libre empresa sin la interferencia del gobierno, pero que había quedado evidente que el mercado no estaba funcionando.
Por eso afirmó que una medida decisiva por parte del gobierno es esencial para reiniciar el flujo de crédito y recuperar la economía.

Participe: ¿Está usted preparado?

"Con la situación volviéndose más precaria cada día, enfrentaba la siguiente opción: intervenir con una medida dramática del gobierno o dar un paso atrás y permitir que las acciones irresponsables de unos socaven la seguridad financiera de todos", señaló.
Recalcó, sin embargo, que el plan de rescate no contempla preservar el bienestar de ninguna empresa o industria individual, está dirigido a preservar la economía estadounidense en general.
Hablan los ciudadanos
Bush advirtió que las circunstancias por las cuales pasa la nación no son normales. Apuntó a la falta de confianza y el riesgo de que importantes sectores de la economía se paralicen.
Escenario angustioso
Igualmente, presagió que si no se adoptan las medidas inmediatamente Estados Unidos podría deslizarse en un pánico financiero, generando un escenario angustioso.
"Más bancos podrían quebrar - inclusive algunos en sus comunidades - la bolsa caería aún más reduciendo el valor de las jubilaciones, el valor de sus casas se desplomaría, habría más ejecuciones hipotecarías, si es dueño de una empresa o finca sería más difícil lograr crédito, no podría conseguir préstamos para comprar un auto o enviar sus hijos a la universidad", aseveró.
"Empresas cerrarían y miles perderían su empleo. Últimamente nuestra nación pasaría por una larga y penosa recesión", recalcó y añadió: "No podemos permitir que esto suceda".
"Toda nuestra economía está en peligro", señaló Bush para intentar dibujar lo que él considera es una gravísima situación.
En un intento por ampliar el apoyo político a su plan, Bush informó que había invitado a ambos candidatos presidenciales, John McCain y Barack Obama, a la Casa Blanca para sostener conversaciones con otros miembros del Congreso.
Ambos candidatos habían emitido un comunicado conjunto para pedir que todos los partidos deberían cooperar para evitar la catástrofe.



Lea: Comunicado conjunto de Obama y McCain
El republicano McCain anunció además que suspendió su campaña para contribuir en el Congreso hacia la resolución del problema financiero y sugirió que el primer debate presidencial programado para el viernes se pospusiera.
Por su parte, Obama insistió en que el debate debería seguir adelante porque el pueblo quiere escuchar las ideas que tienen los candidatos para resolver la crisis.
El gobierno de Bush, a través de su secretario del Tesoro y el director de la Reserva Federal, pide al Congreso la aprobación de un desembolso de US$700.000 millones.

"MEJOR SISTEMA"

Aunque hay temores entre los legisladores de cómo tomará el pueblo estadounidense el gasto fiscal para invertir en los bancos fracasados, se rumora que están tratando de llegar a un consenso.
En su discurso Bush dijo entender las dificultades que tendrían aprobando la legislación, pero advirtió que no hacerlo ahora costaría más si se deja para más tarde.
El presidente reiteró al final que, a pesar de los altibajos y algunas irregularidades, el capitalismo democrático era el mejor y más resistente sistema económico.


NEGOCIOS HISPANOS:TRIPE PELIGRO

(Por BBC Mundo USA,José Baig)

El descalabro financiero, los operativos contra los inmigrantes en sus centros de trabajo y la crisis hipotecaria son los principales factores que afectan a los más de 2 millones y medio de pequeños y medianos negocios hispanos que hay en Estados Unidos.
Así se lo dijo a BBC Mundo David Ferreira, vicepresidente de la Cámara Hispana de Comercio de Estados Unidos, desde la Asamblea Anual de esa organización, que se realiza este fin de semana en Sacramento, California.
El directivo empresarial calificó de "sumamente irresponsable" el hecho de que los funcionarios de inmigración en algunas ocasiones hayan hecho redadas en lugares a los que los trabajadores acuden para recibir información sobre salud y leyes laborales.
La crisis afecta también a los pequeños empresarios latinos porque "usan más la tarjeta de crédito y rehipotecan sus casas para financiar sus negocios", según Ferreira.

"CRECIENDO Y TRIUNFANDO"

A pesar de los problemas actuales de la economía y los desafíos que plantea el tema migratorio, los negocios administrados por latinos "están creciendo y triunfando", según David Lizarraga, otro de los directivos de la Cámara.
Según Lizarraga, los negocios hispanos "la influencia y el impacto de los pequeños negocios latinos en distintos sectores de la industria es más fuerte que nunca".
Las cifras de la propia Cámara muestran que hay dos millones y medio de pequeñas empresas hispanas que generan, en conjunto, US$400.000 millones al año.
En California y otros estados, las leyes obligan a que el 25% de los contratos con el gobierno se le encarguen a pequeñas y medianas empresas y eso ha significado un impulso importante a muchas empresarios latinos en el país.
Esperando por el "rescate"
Lo directivos empresariales hispanos reunidos en Sacramento confían en que el plan de rescate del sistema financiero propuesto por el gobierno de George Bush sea aprobado por el Congreso.
Para Ferreira, es importante para los empresarios hispanos que este plan se apruebe "para que la plata de Wall Street comience a fluir aguas abajo y se reactive la economía".

Aparte de esperar respuestas del gobierno en el ámbito financiero, Ferreira le dijo a BBC Mundo que también le han pedido al gobierno federal "en numerosas ocasiones" que las redadas contra los inmigrantes tienen un efecto devastador en las comunidades y no resuelven el problema de fondo.
"Lo que necesitamos es una reforma integral de las leyes de inmigración y darle un trato más justo a estas personas, que son parte muy valiosa de nuestra fuerza laboral", dijo Ferreira.


La crisis azota a otros dos gigantes bancarios de EEUU y de Europa

(Por IDOYA NOAIN / NUEVA YORK)

1. • JP Morgan se hará cargo de Washington Mutual, un grupo hipotecario al borde de la insolvencia
2. • La belga Fortis venderá patrimonio por valor de 10.000 millones para cortar el desplome bursátil

A la vez que los políticos estadounidenses, republicanos y demócratas, estudian milimétricamente cómo sellar un plan de rescate para el sistema financiero que no perjudique sus respectivos intereses electorales, la crisis en los mercados no cesa y se cobra nuevas víctimas. Dos más. El castillo de naipes del capitalismo occidental se desmorona peligrosamente a ambos lados del Atlántico.
Estados Unidos se despertó ayer con la mayor quiebra financiera en decenios, la de la hipotecaria Washington Mutual. La noticia quedó amortiguada por el rosario de desastres de los últimos meses.
El banco central (la Reserva Federal, Fed por sus siglas en inglés) promovió, y consiguió después, la venta urgente de un grupo financiero con 5.400 sucursales extendidas por todo el país. Con sede en Seattle, 119 años de historia y activos evaluados en más de 210.000 millones de euros, había perdido el 95% de su valor bursátil desde enero. JP Morgan, el banco de inversión que adquirió hace unos meses otra institución en quiebra, el Bear Stearns, se ha hecho con la hipotecaria a precio de saldo: pagará apenas 1.300 millones.

CAMBIA EL MAPA DE LA BANCA

La operación dibuja la silueta de un nuevo esquema bancario en Estados Unidos. JP Morgan será el líder por depósitos de la banca comercial gracias a sus arriesgadas compras de los últimos tres meses. También consolida su liderazgo el Bank of America, que también se ha hecho con Merrill Lynch --reforzando así su negocio de banca de inversión-- y con la hipotecaria Countrywide Financial. Además se había fortalecido meses atrás con la compra de LaSalle, la filial de Chicago de ABN Amro.
Washington Mutual es otro martillazo en el mismo clavo. Llega tras la quiebra de Lehman Brothers; las ventas de Merril Lynch y Bear Stearns, y la nacionalización de aseguradoras como AIG o Fannie Mae y Freddie Mac, del ámbito hipotecario.

EFECTO MARIPOSA

Como si de un efecto mariposa se tratara, en Europa los ecos de la crisis financiera estadounidense causan más que ruido. Uno de los principales grupos aseguradores y financieros del continente, el belga-holandés Fortis, anunció ayer la venta de activos por valor de 10.000 millones para hacer frente a sus problemas de liquidez. Aun así, el mercado desconfía: bajó un 20% en bolsa y acumula un descenso del 71% en lo que va de año.
Las autoridades belgas anunciaron horas antes que no le abandonarán a su suerte. El gigante participó hace apenas unos meses en la compra y troceamiento de ABN Amro, operación en la que también concursaron el banco Santander y el Royal Bank of Scotland. Los problemas de Fortis vienen precisamente de la difícil digestión de aquella compra.

QUIEBRA IMPOSIBLE

Pese a esta importante operación, el director general, Herman Verwilst, insistió ayer en que la entidad sigue siendo "solvente" y que tienen posibles compradores. "No es posible que Fortis vaya a la quiebra. No hay la más mínima probabilidad de que tengamos un problema de este tipo", insistió. No le sirvieron sus esfuerzos. A última hora de anoche, los accionistas le destituyeron y nombraron a Filip Dierckx como sustituto. El motivo fue el descontento con la gestión.
Los 10 activos en venta son de las divisiones de banca y seguros. Los ingresos servirán para financiar la compra del banco holandés ABN Amro, por el que pagó 24.000 millones. "Compradores potenciales nos han manifestado un interés concreto por cada uno de los expedientes y ya han sido firmados acuerdos de confidencialidad", indicaron ayer desde el banco. Según anunció el hasta ayer responsable de la división bancaria, Filip Dierckx, esperan tener noticias felices sobre la venta antes de finales de año.
Para asegurar la tranquilidad de los inversores, Dierckx subrayó que el banco es objeto de una "estricta supervisión" por parte de la comisión bancaria de Bélgica y Holanda. Al igual que en Estados Unidos, fue necesario que el Gobierno a través de su primer ministro, Yves Leterme, y del responsable de Finanzas, Didier Reynders, lo confirmaran. "Seguimos día a día la banca nacional y las operaciones del mercado, la evolución internacional y las consecuencias en Bélgica", dijo el jefe de Gobierno. Reynders aprovechó también la comparecencia pública para pedir transparencia a todos los bancos y garantizar a los clientes que no se les dejará en dificultades. Según Fortis, "menos del 3% de los clientes han abandonado el banco desde la crisis".
Otro gigante bancario europeo, el británico HSBC, se sumó ayer al reguero de malas noticias al anunciar un recorte de plantilla de 1.100 empleados --500 de ellos en la sede central de Londres-- para reducir gastos. El día anterior había sido el turno del también británico Bradford & Bingley, que despidió a 370 trabajadores.

La incertidumbre económica multiplica las crisis de ansiedad

(Por ÀNGELS GALLARO,BARCELONA)

1. • Numerosas personas por ahora sin problemas de trabajo sufren ataques de pánico
2. • El malestar psíquico se podría suavizar en Navidad, pero empeoraría en enero

Arrastrados por la frase "¡la que se nos viene encima!", comentario común en estos días, un creciente sector de la población española que mantiene su trabajo y cobra cada mes está sufriendo incipientes ataques de pánico que le lleva a pedir apoyo psicoló-
gico. Esas crisis son más perceptibles desde hace un mes, pero tienen su origen en el estrés contenido que los ciudadanos almacenan desde la pasada primavera, ha constatado en su consulta el psicólogo Andrés Cascio, profesor de la facultad de Empresariales de la Universitat de Barcelona. "El malestar quedó mitigado, o taponado, con las vacaciones de agosto", añade.
"El estrés, la ansiedad, el nerviosismo extremo, los dolores de cabeza, el insomnio y los trastornos gástricos que ahora se han disparado ya estaban antes del verano, pero el regreso ha supuesto un shock importante para muchísimas personas", explica Cascio. La percepción más fuerte y generalizada en estos momentos es el miedo. "Miedo a que se desestabilice su empresa --prosigue--, o a que lo hagan los mercados financieros españoles, aunque en realidad no esté pasando nada de eso".
Algo sí está sucediendo. En el sector catalán de la gran banca, por ejemplo, están reduciendo o suprimiendo las periódicas selecciones de personal que daban acceso a nuevos puestos de trabajo, relatan los psicó-
logos de empresa. "Los contratos de seis meses en periodo de prueba acaban, por sistema, sin que entre nadie --explica Ricard Cayuela, psicólogo asesor empresarial--. Los empleados lo perciben y existe una gran preocupación. Aunque aún no tengan ningún problema económico, restringen sus gastos: compran menos, no viajan".
Las crisis personales causadas por la situación económica todavía no son perceptibles en los servicios psiquiátricos de los hospitales, pero se las ve venir. "Aún no lo notamos, pero calculo que en las próximas semanas atenderemos a personas con ansiedad intensa y depresión de causa externa --afirma el doctor Enric Álvarez, jefe del área de Psiquiatría del Hospital de Sant Pau de Barcelona--. Perder el trabajo o el dinero son dos potentes estresores".

ILUSIÓN DE ABUNDANCIA

El fenómeno, en efecto, no es consecuencia de problemas íntimos que coinciden en el tiempo, sino de un malestar psicológico de ámbito social que está penetrando en la mente de ciudadanos en todo tipo de circunstancias, estén en paro laboral o trabajando. "Es algo general: muchas personas, muchas, están dándose cuenta ahora de que han vivido bajo la ilusión de una abundancia económica que no se sustentaba en la realidad --reflexiona Begoña Odriozola, psicóloga clínica--. Era una omnipotencia psicológica apoyada en unos mensajes de bonanza económica que eran falsos para mucha gente".
Esa sensación de poder, prosigue Odriozola, ha llevado a pensar, a un amplio sector de la sociedad española, que el despido laboral era un imposible. "Se ha vivido bajo el convencimiento de que las burbujas empresariales o financieras solo explotan en otros países --prosigue--. Socialmente, hemos estirado más el brazo que la manga y se ha fomentado un individualismo que ahora se está traduciendo en debilidad y soledad para muchas personas".

LLEGAN LAS FIESTAS

El máximo pico de cierres y despidos ya se está produciendo, sostiene el psicólogo Andrés Cascio. "Habrá más en octubre pero en noviembre y diciembre se percibirá un alivio --prosigue--. La llegada de la Navidad alegrará algo el gasto y el consumo interno, y, en general, existirá la sensación de que vuelve la calma. El bajón importante en la economía puede llegar en enero. En pleno invierno. Volverán los síndromes ansiosos".
El personal en máximo peligro económico, y psicológico, explican, es el que se sitúa en los dos extremos de las compañías: los altos directivos de empresa y los empleados de baja preparación. "Quienes están entre esos dos extremos, los profesionales que forman el grueso medio de las empresas, son los que menos tienen que temer la crisis --asegura Cascio--. Es la franja de empleados más difícil de suprimir".


La crisis da valor al actual Estado del bienestar
Los expertos defienden el modelo europeo de cobertura y protección social


(Por XAVIER SALVADOR / SALVADOR SABRIÀ BARCELONA)

"EEUU cambiará el ultraliberalismo del mercado por más regulación. Es una oportunidad de la Unión Europea para revalidar su modelo social, que ahora estaba poco valorado entre nosotros. Había demasiada admiración del modelo estadounidense". Es la reflexión de Eugenio Recio, profesor honorario de Esade, cuyo espíritu comparten diferentes expertos sobre las secuelas que la crisis tendrá para el Estado de bienestar.
Recio defiende el Estado providencia, el colchón sobre el que la sociedad soporta los cambios de ciclo económico y da cobertura a los estratos sociales damnificados en etapas de dificultades. "Hemos visto a dónde ha llegado el modelo americano. La economía social de mercado de la UE es perfectamente exportable", defiende el académico.
Nadie se atreve a dudar de que la crisis financiera repercutirá en la organización política y económica de las grandes potencias. Pondrá en solfa algunos preceptos del capitalismo angloamericano. Pero además abrirá una reflexión, un debate que casi parecía enterrado por la potencia del liberalismo estadounidense: ¿qué papel debe jugar el Estado en la organización de la economía?
"El capitalismo que hemos vivido es un sistema en el que hay de todo menos capital, lo que lo hace muy sensible a las crisis. Por fortuna, en España hay más base. Pero tenemos que poner sentido común, volver un poco atrás. Vamos hacia sociedades que ahorren un poco más, que trabajen más, a la recuperación de valores calvinistas. Ni el Estado puede ocuparse de todo, ni tampoco el mercado, solo el sentido común", sostiene Eduard Berenguer, catedrático de teoría económica de la Universitat de Barcelona.

CALENDARIO DE SOLUCIONES

Lo sucedido en las finanzas internacionales provocará restricciones. "En un año se arreglará la crisis financiera; en tres, la económica; y en cinco, la inmobiliaria", vaticina Berenguer, no sin recordar que España es prisionera del capital exterior que recibe, además de otros factores: "Aquí la gente vivía para aparentar. Ahora se generarán muchas frustraciones".
El coste de la protección social en Europa suscita una profunda discusión teórica. "En España no generamos riqueza para dar niveles de cobertura como los de la llamada cuarta pata, la dependencia. Se deben revisar cosas. Hay grandes ineficiencias, por ejemplo en la educación", sostiene Enric Llarch, economista y director de la revista Paradigmes.
"En una situación así, cualquier gobierno está tentado de adelgazar el Estado del bienestar. Pero será diferente cómo se abordará ese tema en Suecia, Francia o Alemania. En España, Zapatero ha insistido mucho en que lo mantendrá, pero la tendencia dependerá de cada país. En algunos, irremisiblemente, intentarán frenarlo", advierte Recio.
José García Montalvo, profesor en la UPF, da por hecho que habrá una regulación más clara de los mercados, aunque sin incrementar el papel del Estado. "Puntualmente sí que habrá más Estado, porque interviene para solucionar problemas. Después se retirará y quedará solo el incremento de la regulación". Es pesimista sobre el mantenimiento de los servicios públicos y las prestaciones al ritmo que propone el Gobierno porque las mismas dificultades de acceso al crédito del sector privado las tendrá la Administración española para financiar el déficit público.
Jordi Sánchez, profesor de Ciencia Política, da por hecho que los ciudadanos serán más conservadores en sus gastos y valorarán más la aportación del Estado. Recuerda que en tiempos de Reagan y Thatcher predominó la teoría liberal que reduce el papel del Estado, al que se le atribuía parte de las crisis por su presunta ineficacia. Ahora, el Estado no solo no es causa, sino que actúa como salvador del sistema.

El motín republicano amaina y el Congreso retoma el plan de Bush

(Por IDOYA NOAI,NUEVA YORK)

1. • El presidente da por hecho que "habrá acuerdo" entre los dos grupos políticos
2. • Los conservadores quieren que los bancos aseguren activos hipotecarios

El tren político que descarriló el jueves estrepitosamente en Capitol Hill y dejó a los mercados, las instituciones financieras y el Gobierno de Estados Unidos esperando un día más un acuerdo sobre el plan de rescate ante la crisis volvió ayer a ponerse en marcha. Los congresistas republicanos más conservadores, que el jueves frustraron el avance de un "pacto de mínimos" alcanzado por representantes de los dos partidos en las dos cámaras, volvieron a las negociaciones. Y ya incluso antes de que lo hicieran, el presidente, George Bush, lo bendijo. "Se va a conseguir un paquete de medidas. Hay desacuerdos sobre aspectos del plan --reconoció-- pero no hay desacuerdo sobre que hay que hacer algo sustancial".
Sus palabras trataban de inyectar optimismo y lanzar, asimismo, un mensaje directo y público a los rebeldes de su propio partido (con los que también habló en privado ayer). Sonaban, sin embargo, algo precipitadas. Porque aunque desde por la mañana se desarrollaron negociaciones entre los republicanos del Senado, demócratas de las dos cámaras y representantes de la Administración liderados por el secretario del Tesoro, Henry Paulson, no hubo en esas discusiones hasta cerca de las tres de la tarde (21.00 horas en España) ningún representante de los republicanos de la Casa de Representantes.

IDEA RECHAZADA POR PAULSON

Ese es el grupo que mayoritariamente se resiste a la propuesta de Bush. Y aunque enviaron a la negociación a Roy Blunt, lo hicieron con algunas propuestas que parecen encaminadas al disentimiento. Una de ellas, según un plan alternativo que empezaron a hacer circular ya el jueves, propone que, en vez de que el gobierno compre a firmas en problemas deuda tóxica con los 700.000 millones de dólares públicos, las instituciones financieras compren seguros para los activos relacionados con las hipotecas pagando una prima.
La idea había sido rechazada como inviable por el Tesoro y por numerosos expertos. No estaba claro, además, el papel que debería jugar el Gobierno en el plan, al que los republicanos también añaden unas reducciones temporales de impuestos para ayudar a las empresas a "liberar capital para sus operaciones".
Los demócratas, que atribuyeron a maniobras electoralistas de McCain la fallida reunión de la Casa Blanca del jueves, se mostraban convencidos de que se puede lograr un pacto rápido. Su líder en el Senado, Harry Reid, y el presidente del Comité Bancario del Senado, Christopher Dodd, aseguraron que podría haber un borrador finalizado a lo largo del día, que podría votarse en la Cámara Baja el sábado y en el Senado el domingo. Reconocían también que trabajarán "el tiempo que sea necesario", dejando la puerta abierta a alargar la sesión de las cámaras y no iniciar el lunes el receso previsto por las elecciones.

EE.UU: todos los caminos conducen a la depresión

(CNBC.com)

Salvatajes financieros empujarán a Estados Unidos a la depresión

El resultado final de la ralentización económica mundial puede ser los Estados Unidos anunciando la quiebra nacional porque el Gobierno no puede permitirse los salvatajes que prometió y el mercado no salvará al Gobierno, dijo Martin Hennecke, gerente senior de clientes privados en Tyche, a CNBC el jueves.
"Esperamos una depresión en los Estados Unidos. Esperamos una depresión, muy posiblemente, también en Europa," Hennecke dijo en "Worldwide Exchange."
El costo estimado de 300 millones de dólares del salvataje para Fannie/Freddie probablemente será considerado como una pérdida que el Gobierno tendrá que tomar, por lo tanto, pasándola a los contribuyentes, explicó.
"Ya tenemos 3 billones de dólares de deuda, al menos en lo respecta al Gobierno de los Estados Unidos. Estas cifras de deuda a través de la economía estadounidense están aumentando muy fuertemente."
"Cuando el Gobierno no pueda pasar más la "enorme deuda" de los Estados Unidos a los contribuyentes, volteará hacia los tenedores de dólares estadounidenses, llevando a una eventual caída de la moneda", dijo Hennecke.
"Definitivamente, (el dólar) no es un lugar seguro en donde invertir, ya que la inflación real está más cercana al 10 u 11 por ciento que los números dados por el Gobierno de los Estados Unidos," dijo Hennecke en "Wolrdwide Exchange".
Los inversores deberían evitar la exposición en deuda y permanecer lejos del apalancamiento en cualquier inversión o activo, incluyendo propiedades, aconsejó Hennecke, agregando que "los bancos han estado demasiado altamente apalancados en el pasado, los hogares privados, todo el mundo. "

Las colocaciones de Hennecke están principalmente basadas en Asia, especialmente en el mercado chino ya que el Gobierno del país tiene una gran cantidad de efectivo y la macroeconomía está fundamentalmente fuerte.
También sugirió invertir en oro, a pesar de la caída reciente en el precio.

Lehman Bros: hacia el Nuevo Orden Financiero

( Por William Patalon III)

Comentario. Después que el gobierno saliera al rescate de los gigantes hipotecarios Freddie Mac y Fanny Mae (a instancias principalmente de China), habría llegado el momento de cerrar la canilla para evitar un brote inflacionario y el riesgo moral. Sólo restaría ahora ver cómo el sistema financiero estadounidense (y junto con él los bonos del Tesoro y el mismo dólar) soportan la arremetida de la segunda y más potente segunda parte del huracán, ya que la aparente tranquilidad vivida hasta ahora en el ojo de ese huracán parece estar cerrándose. Los crecientes números rojos de la macroeconomía apuntarán, tarde o temprano, hacia la confianza. La Reserva Federal puede imprimir billetes pero nunca confianza.
Con la adquisición de Merrill, la quiebra para Lehman, Wall Street juega a “hagamos un trato”

En uno de sus tramos más salvajes y raros que nunca, Wall Street entró a un fin de semana aguardando un salvamento gubernamental de Lehman Brothers Holdings Inc. y terminó con Merrill Lynch & Co. Inc. acordando venderse al Banco de América Corp. por casi $ 50 mil millones – y con Lehman anunciando que buscará la quiebra en un intento por evitar una liquidación total después de que no pudo encontrar un comprador.



Y esta versión de la vida real del juego show “Hagamos un trato,” está lejos de haber terminado: como el alguna vez gran boxeador profesional que busca las cuerdas después de quedar tambaleando por un golpe en la barbilla, el gigante de los seguros American International Group está tratando de evitat caer a la lona. Los líderes de AIG rogaron a la Reserva Federal de Estados Unidos una cuerda de salvamento de 40 mil millones de dólares – sin los cuales el gigante del seguro probablemente no durará una semana, informó el New York Times .
Hay conjeturas incluso sobre que el maltrecho Washington Mutual Inc. – la mayor entidad de ahorro y préstamo de la nación – puede que consiga ser empujado hacia abajo por esta resaca financiera.



“Las placas tectónicas debajo del sistema financiero mundial se están desplazando y va a haber un nuevo orden mundial financiero que nacerá de esto,” contó a Bloomberg News Peter Kenny, director gerente de Knight Capital Group Inc., la empresa de corretaje con base en Nueva Jersey que controla 4 billones de dólares en transacciones accionarias por año. “Es un proceso feo y doloroso”.
Con los líderes de Wall Street apiñados en reuniones con el aliento de la administración Bush, los tejes y manejes del "cuarto-down" (1) culminaron un fin de semana de furiosas y constantes negociaciones que demuestran un punto muy crítico – la crisis créditicia no se terminó.
De hecho, puede que realmente se esté poniendo peor.
Muchos expertos ahora se preocupan de que el sector financiero de EE.UU. se enfrenta a “una crisis de confianza”, un potencialmente devastador impasse psicológico del cual no hay fácil escapatoria. Las movidas sorprendentes y generalizadas, que permanentemente remoldean al sector financiero de EE.UU., son el último capítulo de una crisis financiera que ha producido cientos de miles de millones de dólares en pérdidas – aparentemente debido a malos préstamos inmobiliarios, informó The Times .
“Por Dios. He estado en los negocios 35 años, y estos son los acontecimientos más extraordinarios que jamás he visto,” dijo Peter G. Peterson, co-fundador de la empresa de capital privado Blackstone Group LP, que fuera Jefe de Lehman en los '70 y Secretario de Comercio en la administración de Nixon – y cuya nueva fundación está patrocinando el documental IOUSA , que advierte sobre la inminente crisis de deuda del Gobierno de EE.UU.

En una movida que refleja el paso dado por el fondo de cobertura (hedge) Long-Term Capital Management hace 10 años esta semana, 10 grandes bancos crearán un fondo de emergencia de 70 a 100 mil millones de dólares que las instituciones financieras pueden utilizar para protegerse de las consecuencias del colapso de Lehman. Y la Fed amplió el programa de préstamos de emergencia que creó para los bancos de Wall Street, una movida sobre la que The Times y otros medios de comunicación concluyen que aumentará lo que cada contribuyente estadounidense deberá como resultado de esta crisis.
Pero aún queda por verse si la venta de Merrill Lynch, la “desaparición controlada” de Lehman y la intervención en el destino de otros gigantes claves financieros de EE.UU. serán suficientes para impedir que la más amplia economía estadounidense sea arrastrada hacia una recesión estanflacionaria.
Y Entonces Hubo Dos
Las cinco empresas de valores de Nueva York que dominaban Wall Street se han reducido a dos: Goldman Sachs Group Inc. y Morgan Stanley. Ambas empresas informarán una disminución de ganancias para el tercer trimestre – pero a diferencia de Merrill Lynch y Lehman, Goldman y Morgan Stanley se han mantenido rentables a lo largo del año.
“Tengo buena opinión de Morgan Stanley y Goldman Sachs, por lo que espero que salgan de esto,” dijo Roger Altman – CEO del banco de inversión Evercore Partners Inc. y ex Sub-Secretario del Tesoro – durante una entrevista en CNBC. “Pero sobre si hemos visto lo último de esta crisis, creo que la respuesta es claramente: ‘No.’ Y exactamente a dónde va a partir de aquí y cómo se desarrolla, estoy inseguro. ”

Pero ¿cómo llegó tan lejos?

Las convulsiones del sector financiero que comenzaron en el verano de 2007 (hemisferio norte) ya han eliminado a The Bear Stearns Cos., que en marzo fue forzado a una venta con descuento apoyada por el Gobierno a manos de JP Morgan Chase & Co. El fin de semana pasado, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos tomó el control de los gigantes hipotecarios Fannie Mae y Freddie Mac – colocándolos en una curatela – después de que preocupaciones de que los bancos centrales extranjeros podrían dejar de comprar nuestros bonos forzaran realmente la mano del Gobierno.
Los funcionarios de la Fed y del Tesoro de Estados Unidos se reunieron en una sesión de emergencia al tiempo que Barclays PLC, el tercer banco más grande del Reino Unido, y el Bank of America abandonaran las conversaciones para adquirir Lehman después de fracasar en obtener garantías del Gobierno contra las pérdidas. Las empresas eran consideradas como principales candidatos a adquirir el banco de inversión de 158 años de antigüedad después que pérdidas récord borrarán 94 % de su valor accionario este año.
La primera de una serie de reuniones de fin de semana comenzó a las 18.00 horas del viernes en el edificio de la Reserva Federal en el centro de Manhattan. La Fed llamó a la sesión de emergencia. El Secretario del Tesoro de Estados Unidos Henry M. “Hank” Paulson Jr. asistió, así como ejecutivos clave de la industria bancaria.
Debido a que el banco central y el Tesoro ya habían intervenido en el matrimonio "a punta de pistola" entre Bear Stearns y JPMorgan – suscribiendo 29 mil millones de dólares en activos como parte del acuerdo – y con la curatela para Fannie y Freddie, la mayoría de los observadores esperaban que el dúo dinámico del sector financiero pusiera a trabajar su magia una vez más.
Pero no fue así.

Los informes de noticias dicen que se dijo a los banqueros que – esta vez – el Gobierno no rescataría a Lehman y que Wall Street tenía que resolver sus propios problemas. Las acciones de Lehman se hundieron la semana pasada, al tiempo que las preocupaciones acerca de su condición financiera aumentaban. Cuando las contrapartes se pusieron precavidas en hacer hacer negocios con Lehman, su capacidad para sobrevivir como una compañía independiente en esa forma no estuvo más que terminada.
Sin la red de seguridad del respaldo gubernamental, Lehman buscó un comprador, centrándose en Barclays y Bank of America. Pero Barclays abandonó las conversaciones para adquirir Lehman después de fracasar en conseguir garantías del Gobierno contra las pérdidas para el gran banco británico.
Fue allí donde las conversaciones sobre la adquisición tuvieron un giro extraño. Aunque Merrill y Lehman son ambos bancos de inversión – Merrill se centra en el negocio del corretaje mientras que Lehman presta atención a la parte institucional del mercado – ambas empresas hicieron una incursión nefasta en inversiones relacionadas con lo inmobiliario.

Comprendiendo que los inversores globales juntarían a Merrill con otras compañías en problemas mientras la crisis empeorase, el nuevo CEO John A. Thain inició conversaciones de adquisición con el CEO del Bank of América Kenneth D. Lewis, afirman los informes publicados. Una persona informada sobre las negociaciones dijo que Thain había rechazado al Bank of America cuando se acercó a Merrill anteriormente en este verano. Pero comprendiendo cómo una bancarrota de Lehman serrucharía a los mercados, Thain se dió cuenta que esta vez un acuerdo era la mejor respuesta, informó The Times .
Bank of America intercambiará 0.8595 de sus acciones por cada acción de Merrill. Eso resulta en $ 29 la acción, basado en el precio de cierre del Bank of America de $ 33.74 el viernes.
“Una fusión entre Merrill y Bank of America es una buena idea,” dijo Richard Bove, un analista en Ladenberg Thalmann & Co. en Lutz, Florida, a Bloomberg. “Si Lehman cae, el siguiente banco en ser atacado sería Merrill. Están intentando impedir ese ataque mediante la vinculación con el Bank of America.”
AIG, cierta vez el mayor asegurador del mundo, está luchando por aumentar el efectivo para evitar un decenso en su calificación crediticia que podría estropear su negocio.

Hoy temprano (lunes), Lehman presentó el pedido de quiebra más grande de la historia. La empresa de 158 años, presentó una petición del capítulo 11 ante el Tribunal de Quiebra de Estados Unidos en Manhattan, listando más de 613 mil millones de dólares en deuda.
Eso hace que la caída de Lehman sea la mayor de cualquier banco de inversión desde el colapso de Drexel Burnham Lambert hace 18 años, informó Associated Press. La crisis crediticia ha obligado a los bancos más grandes del mundo a llevar más de 510 mil millones de dólares a amortizaciones, informó Bloomberg.
Notas:
(1) En football americano : Tras Un "hail mary", que es una estrategia desesperada en la que todos los receptores corren buscando la oportunidad de atrapar el balón, cuando ya no tienen nada que perder, el "cuarto down" es la cuarta y última oportunidad que tienen, antes de cederle el balón al contrario o perder definitivamente el juego.

Lehman y AIG: comienza el descenso a los infiernos

Si la Fed nada contra la marea, terminará ahogándose

(Por Keith Fitz-Gerald, Director de Inversión)

Si hay una lección que se puede sacar de esta crisis financiera, es esta: siempre que la Reserva Federal de Estados Unidos confronta a los mercados financieros, termina como perdedor.
En semanas recientes, he escrito varios artículos sugiriendo que la crisis crediticia no terminó y detallado tres indicadores que me llevaban a esta conclusión - a pesar de lo que los políticos, los expertos y todos los otros así llamados "expertos" le quieren hacer creer a usted.
Ahora, hay un cuarto.
No debería caernos de sorpresa que hay más deuda comercial con problemas ahora que en cualquier otro punto de la historia - cerca de 184 mil millones de dólares en valores. Y ése es sólo el recuento "oficial"; sabemos que el total real es mucho mayor - sólo que no ha sido plenamente contado e informado, aún.
Históricamente, grandes niveles de deuda comprometida han precedido números récord de presentaciones de quiebra - incluyendo algunas presentaciones de quiebra corporativa más grandes de la historia. Los porcentajes de defaults (cesaciones de pagos) usualmente llegan a un máximo 12-24 meses después de que los porcentajes de títulos problemáticos llegan a sus propias cumbres. En otras palabras, tanto el nivel de deuda basura y la clasificación de valores problemáticos pueden verse como indicadores principales .

Y lo que sugieren para 2009 no es bueno.
En una era de problemas valuados en billones de dólares, unos meros 184 mil millones de dólares no suenan a demasiado, pero ese total es en realidad 11.52% mayor que los 165 mil millones de dólares en deuda con problemas informada inmediatamente después del último boom de quiebras, según el Servicio de Inversores de Moody.
El analista Christopher Garman, antiguo Jefe de estrategias de alto rendimiento en Merrill Lynch & Co. recientemente dijo a Reuters que el nivel actual de deuda con problemas sugiere que cerca de 97 mil millones de dólares en default podría estar encaminándose hacia nosotros el próximo año.
Incluso ahora, el problema es tan grave que uno de cada tres bonos basura es ahora comercializado en "niveles de insolvencia" - definidos como una tasa de interés 1.000 de puntos básicos por encima de valores comparables del Tesoro. Esto significa que el 33 % de los bonos basura que están afuera en el mercado no valen ni el papel en el que están impresos.

En un momento en que la economía estadounidense está luchando contra una crisis crediticia, altos precios de la energía, estos temas de deudas problemáticas podrían terminar estrujando los márgenes de ganancias, aumentando las tasas de defaults y drásticamente impulsando los gastos de los préstamos - con cualquiera o todos ellos pudiendo alimentar ciclos auto-repetitivos.
General Motors Corp. y la Ford Motor Co. perdieron su Investment Grande en su deuda hace años. Pero para otras empresas envueltas en los mercados de derivados y del desorden subprime, esto es un incómdo fenómeno nuevo. Y es por eso que sus dirigentes están "shockeados" al encontrar que las vías normales financieras ya no están abiertas para ellos.
No es de extrañar que haya tantos CEOs detrás de su finamente trabajados escritorios de caoba, sintiendo las olas de pánico elevándose dentro de ellos mismos mientras se dan cuenta que los mercados de bonos les están diciendo que no van a seguir por mucho tiempo más como para juntar para sus planes de jubilación de máxima garantía (Irónicamente, sin embargo, las mismas señales pueden estar diciendo a esos mismos dirigentes que es cada vez más probable que vayan a juntar para su "paracaídas de oro" [1]).

Obviamente, hay dos partes de la historia aquí.
Por un lado, el Presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos Ben S. Bernanke y el ahora Secretario del Tesoro Henry M. " Hank " Paulson Jr., han literalmente sacado todas las paradas para evitar que esto ocurriese. Evidentemente, este "Duo dinámico" cree que por salvar empresas individuales a través de su estrategia de "salvatajes para (casi) todos", salvarán toda la economía. Entonces lo que han hecho es hacer posible que las empresas que están en tan graves problemas que no pueden obtener préstamos en ningún otro lugar, sean capaces de pedir prestado al gobierno federal - y en condiciones muy favorables.
Aparentemente, esto es algo muy bueno - o, al menos, los federales querrían que creamos eso. Pero una inspección super-cercana nos sugiere que lo contrario es la verdad.
Por supuesto, en el proceso la Brigada de Salvamento de la Fed ha puesto a cada contribuyente estadounidense en el negocio de la recuperación al ritmo de 10 billones de dólares (o más) - pero esa es otra historia para otro momento. La prisa por salvar a American International Group Inc. ha resultado en un paquete de salvamento de 85 mil millones de dólares con términos tan onerosos que un analista lo comparó a una "bancarrota controlada."

Y donde hay humo hay fuego. Como los activos de Lehman Brothers Holdings Inc. y los de AIG se venden ambos en un mercado deprimido, el efecto neto será una propagación de este contagio al resto del sector de servicios financieros - que incluye a los bancos de inversión, las asociaciones de ahorro y préstamo, y fondos de cobertura (hedge) en posesión de activos similares. Eso pondrá más presión a los ya recelosos mercados.
Lamentablemente, la historia muestra que con frecuencia cuando la Fed ha confrontado a los mercados, la Fed termina como perdedor. Ese es el por qué de que hayamos sido tan vocalmente críticos de las movidas del Banco Central desde que comenzó esta crisis, indicando que sus intervenciones sin precedentes no harían más que retrasar el dolor inevitable.
Deseamos que sea cierto lo contrario.

Notas:
[1] Paracaídas de oro: indemnización en caso de despido

Posts de anticipación a esta crisis y que se remontan casi un año (para que no digan que no les avisé):

1) La preocupación de u$s 2 Billones de la Economía. del 19-11-07
La expansión del subprime continúa: un informe de Goldman Sachs dice que el impacto total de las pérdidas hipotecarias en la actividad económica podría ser enorme.por Steve RosenbushBusinessWeek.
2) La Fed, las tasas, las hipotecas y el dólar, del 24-9-07
La tentativa de Bernanke de evitar las fuerzas del libre mercado que están trayendo una recesión por demás larga (que es necesaria para purgar nuestra economía de desequilibrios insostenibles) llevará a un desastre incluso mayor. No se equivoque al respecto; si el Fed no hubiera hecho nada, o hubiera subido las tasas como yo habría preferido, la economía se habría claramente inclinado hacia una recesión severa. Sin embargo, “viniendo al rescate” con los recortes de tasas, el Fed nos asegura que experimentaremos algo mucho peor.
3) Los alarmantes paralelismos entre 1929 y 2007, de octubre 2007
4) "Va a ser mucho peor", de enero 2008
Jim Rogers cree que Bernanke y la Fed están fuera de control
5) El rescate de la Fed ha fallado, de marzo 2008
El apalancamiento (leverage) es demasiado extremo. El capital bancario está demasiado erosionado. La tracción monetaria elude a la Fed. Una purga “austríaca” está en curso.
6) LEAP: Crisis sistémica de EE.UU. de marzo 2008
El derrumbamiento de la economía real de los E.E.U.U. significa el congelamiento virtual de la maquinaria económica americana: bancarrotas privadas y públicas en gran escala, compañías y servicios públicos cerrando masivamente.
7) Derivados, una bomba-burbuja de 516 BILLONES, de marzo 2008
Ese “efecto dominó” ahora se está repitiendo ampliado muchas veces, tensando al sistema monetario, económico y político del mundo mientras el embrollo del subprime de las viviendas hace metástasis, arrastrando hacia abajo a la Bolsa de los EE.UU. y a la economía mundial junto con él.
8) Julio a Diciembre 2008: Hacia el Corazón de la Crisis, de junio 2008
El mundo se hunde hacia el corazón de la crisis sistémica mundial.



Inside Wall Street: la verdadera causa de la crisis financiera Parte 1

(Por Por Shah Gilani)

La verdadera razón de la Crisis Financiera Mundial... La Historia de la que Nadie está Hablando

(Parte 1 de una serie de tres mirando cómo los llamados derivados de "seguros contra defaults crediticios" podrían generar un derumbe de los mercados mundiales de capitales.)

¿Está usted traumatizado? ¿Se está preguntando qué es lo que realmente está ocurriendo en el mercado? La verdad es probablemente más alarmante que incluso sus peores temores. Y sin embargo, no oirá de ella en ningún otro lugar porque "ellos" no le pueden decir. "Ellos" son la Reserva Federal de Estados Unidos y el Departamento del Tesoro, y no pueden decirle a Ud. lo que realmente está ocurriendo porque no hay nada que ellos pueden hacer al respecto, excepto lo que han estado tratando de hacer - añadir liquidez.
A la tasa de cambio de ayer (miércoles), 35 billones de libras esterlinas eran equivalentes a 62 billones de dólares. De acuerdo a la Asociación Internacional de Swaps y Derivados (ISDA en inglés), u$s 62 billones es el valor teórico valor de los seguros por defaults crediticios (Credit Default Swaps - CDS en inglés) que hay afuera, en algún lugar, en el mercado.

Esta no es la primera vez que Money Morning ha advertido a los lectores acerca de los peligros de los seguros de defaults crediticios. Y no será la última.
La Génesis de un Boom de Derivados
A mediados de los '80, al llegar a Nueva York desde Chicago con una extensa experiencia en comercializar opciones y futuros (los derivados originales), me ofrecieron un trabajo en lo que entonces era Citicorp (hoy Citigroup Inc.). La oferta era para un puesto básico en el flamante grupo de swaps y derivados OTC (over-the-counter: extrabursátiles, lo que significa que no se comercializan en la bolsa). Cuando pregunté cuál era el objetivo económico de los swaps, la respuesta volvió: "para ganar dinero para el banco".
Rechazé la posición.
Solía ser que los reguladores y legisladores habían exigido medidas teóricas, empíricas y cuantitativas de la eficacia de los nuevos instrumentos negociables siendo propuestos para intercambios. ¿Cuál es su finalidad? ¿Cómo beneficiarán a los mercados de capitales y a la economía? Y, ¿qué garantías acompañarán su introducción?
Ya no más. A principios de los '90, a fin de cubrir sus riesgos en préstamos, los banqueros de JPMorgan & Co. (ahora JP Morgan Chase & Co.) idearon los seguros de defaults crediticios.

Un seguro de defaults crediticios es, esencialmente, un contrato de seguro entre un comprador de protección y un vendedor de protección cubriendo un bono o préstamo específico de una corporacióno o de un estado. Un comprador de protección paga una suma inicial y primas anuales al vendedor de protección para cubrir cualquier pérdida del valor nominal del bono o préstamo.
Normalmente, el seguro es por cinco años.
Los seguros de defaults crediticios son contratos bilaterales, significando que son contratos privados entre dos partes. Los CDSs están sujetas sólo a la garantía y al margen acordado por el contrato. Se comercializan en forma extra-bursátil, generalmente por teléfono. Están sujetos a la reventa a otra parte dispuesta a entrar en otro contrato. Más increíblemente, los CDSs están sujetos al "riesgo de la contraparte".

Si la parte que prevee la protección del seguro - una vez que ha recogido su pago inicial y las primas - no tiene el dinero para pagar al comprador asegurado en caso de una cesación de pagos (default) que afecte al bono o préstamo referenciado (piensen en los fondos de cobertura - hedge) o si la "aseguradora" va a la quiebra (Bear Stearns estuvo casi allí, y American International Group Inc. - AIG - estuvo casi allí) el comprador no está cubierto - punto. Los pagos de las primas desaparecieron, al igual que el seguro contra el default.
Los seguros de defaults crediticios son instrumentos no estandarizados. De hecho, técnicamente no son verdaderos títulos en el sentido clásico de la palabra respecto a que no son transparentes, no se negocian en ningún mercado, no están sujetos a las actuales leyes sobre títulos y no están regulados. Están, sin embargo, en riesgo - todos los 62 billones de dólares (la mejor estimación del ISDA).
Fundamentalmente, este tipo de derivado sirve un propósito real - como dispositivo de cobertura. Los reales tenedores, o acreedores, de préstamos y bonos corporativos o soberanos pendientes podrían buscar un seguro para garantizar que las deudas les sean reembolsadas. Ese es el objetivo económico del seguro.
Lo que ha ocurrido, sin embargo, es que los especuladores de riesgo que querían exposición a ciertas clases de activos, varios bonos y préstamos, o pools de valores tales como títulos respaldados por hipotecas residenciales y comerciales (sí, esos mimos títulos respaldos en hipotecas subprime sobre las que usted ha estado leyendo - MBS en inglés), pero que realmente no eran propietarios de los créditos subyacentes, ahora tenían un medio por el cual especular con ellos.

Si usted cree que la XYZ Corp. está en problemas y que no será capaz de pagar a sus tenedores de bonos, puede especular comprando, y pagando primas por, seguros de default crediticios sobre esos bonos, que le pagarán toda la cantidad nominal de los bonos si realmente entran en cesación de pagos. Si, por el contrario, cree que XYZ Corp. está yendo bastante bien, y sus bonos son tan buenos como el oro, usted puede ofrecer un seguro para un amigo especulador, quien tiene una opinión opuesta a la suya. Esto significa que esencialmente usted está especulando que los bonos no "defaultearán". Usted espera que recaudará, y conservará, todas las primas y nunca tendrá que pagar el seguro. Es pura especulación.
Los seguros de defaults crediticios no son diferentes a que yo asegure su casa, no con usted, sino con otra persona totalmente sin conección con su casa, de modo que si su casa es arrasada en el próximo huracán me pagan su valor. Estoy especulando con un evento. Estoy haciendo una apuesta.
La mala noticia es que hay peores apuestas allá afuera. Hay seguros de defaults crediticios escritos sobre valores de hipotecas subprime. Es suficientemente malo que estos pools de hipotecas subprime que los bancos, bancos de inversión, compañías de seguros, fondos de cobertura y otros compraron estaban sobre-calificados y acabaron cayendo precipitadamente de valor al tiempo que las ejecuciones de las hipotecas subyacentes en los pools aumentaban.

Lo que es aún peor, sin embargo, es que los especuladores vendieron y compraron billones de dólares en seguros sobre que estos pools defaultearían o no! Los vendedores de este seguro (AIG es un ejemplo) están siendo asesinados al tiempo que los defaults siguen aumentando sin un final en vista.
Y aquí es sólo donde comienza la historia.
La bomba de tiempo
Lo que está ocurriendo tanto en los mercados crediticios como en los bursátiles es el resultado directo de lo que se está desarrollando en el mercado de los CDS. La Fed no podía dejar que Bear Stearns entrara en quiebra porque - y sólo porque - los billones de seguros de defaults crediticios en sus libros contables serían borrados. Todos los bancos e instituciones que tenían seguros escrito por Bear no serían capaces de decir que no estaban más asegurados o cubiertos y que tendrían que amortizar miles y miles de millones de dólares en pérdidas que han estado llevando a valores más altos porque podrían decir que estaban asegurados por esas pérdidas.
El riesgo de la contraparte al que todos los socios comerciales de Bear estaban expuestos era tan vasto y profundo, que si Bear entraba en quiebra harían falta años para aclarar el riesgo y las pérdidas. Esa era una opción insostenible.
La Fed tenía que salvar a Bear Stearns.

Lo mismo le acaba de ocurrir a AIG . No se confundan, no hay nada malo con las filiales de seguros de AIG - absolutamente nada. De hecho, la Fed sólo formuló el mejor negocio en su historia al salvar a AIG y obtener patrimonio, garantías y cargar al gigante asegurador con siete puntos por sobre la tasa ofrecida interbancaria de Londres (LIBOR en inglés) sobre esos 85 mil millones de dólares!
Lo que le sucedió a AIG es simple: AIG se puso codicioso. AIG, al 30 de junio, había escrito 441 mil millones de dólares de swaps sobre bonos corporativos, y peor aún, sobre títulos respaldos en hipotecas. Mientras el valor de estas entidades aseguradas de referencia caía, AIG tuvo masivas amortizaciones y además tuvo que poner más garantías. Y cuando sus calificaciones se degradaron el lunes por la noche, la empresa tuvo que poner aún más garantías, que no tenía.
En suma, lo que ocurrió en una pequeña filial corporativa de AIG derrumbó la mayor compañía de seguros del mundo.
Pero hay más - mucho más. Estos instrumentos están provocando muchas de las amortizaciones masivas en los bancos, bancos de inversión y compañías de seguros. Saber todo lo que esto significa para los fondos de cobertura, los mercados de crédito y el mercado de valores es clave para comprender dónde podría terminar esto y cómo.

El resto de la historia será iluminada en las próximas dos cuotas. A continuación: un examen del colapso de AIG, seguido de un vistazo a cúan mal podrían ponerse las cosas, y lo que podemos hacer para corregir el problema en mano. Así que manténganse atentos.


Inside Wall Street: la verdadera causa de la crisis financiera Parte 2

(Por Shah Gilani)

La crisis crediticia y la verdadera historia detrás del colapso de AIG

(En la 2ª parte de esta investigación en tres capítulos sobre la crisis crediticia, Shah Gilani nos muestra cómo American International Group, una empresa perfectamente solvente que sobrevivió durante 89 años, fue destruida por algunas descarriadas apuestas en títulos derivados llamados “credit default swaps” - Seguros contra Defaults Crediticios, o CDS en inglés. Es una historia que no leerá en ninguna otra parte.)

No hay nada de malo en el corazón de las unidades de negocio de American internacional Group Inc. (AIG). Nada en absoluto. Lo que hizo implosionar al venerable gigante del seguro fue una acumulación de apuestas mal colocadas en CDS.
Según las mejores estimaciones de la Asociación Internacional de Swaps y Derivados (ISDA) y el Banco de Colocaciones Internacionales (BIS), a menudo referido como el banco central de los bancos centrales, el valor estimado de los CDS es de unos 62 billones de dólares o 35 billones de libras esterlinas a una tasa de cambio de u$s 1.78.
Un CDS es similar a una póliza de seguro. Es un derivado financiero que un titular de deuda puede usar para cubrirse contra la falta de pago por parte de un deudor corporativo o soberano. Pero un CDS también pueden utilizarse para especular.
Una subsidiaria de AIG escribió seguros en forma de CDS, lo que significa que ofrecía a los compradores protección asegurada contra pérdidas en deudas y préstamos de parte de los prestatarios, al tono de 447 mil millones de dólares. Pero la mezcla fue tóxica. También vendieron seguros sobre esotéricos pools de títulos respaldados con activos – valores como Obligaciones de Deuda Colateralizada (CDOs en inglés), pools de hipotecas subprime, pools de hipotecas Alt-A (alternativas a las "prime" o tipo A), pools de hipotecas prime y obligaciones de préstamo colateralizadas. La subsidiaria recaudó un montón de ingresos de primas y sus ingresos eran sólidos.
Cuando se derrumbó el mercado inmobiliario, los precios implosionados de las viviendas resultaron en crecientes ejecuciones. Los pools de hopitecas que AIG aseguró comenzaron a caer en valor. Además, la crisis crediticia comenzó a tener secuelas en los préstamos apalancados y vio crecientes pérdidas en los pools de préstamos que había asegurado. En 2007, la compañía empezó a sentir un serio calentamiento.

Desde sus humildes comienzos en China en 1919 – a través del mandato de 40 años del CEO Maurice R. “Hank” Greenberg, que finalizó ignominiosamente para Greenberg en 2006 – AIG creció agresivamente. Greenberg creció y diversificó al gigante asegurador, en última instancia acumulando un balance de un billón de dólares.
Pero no todo fue Kosher. En un esfuerzo por mitigar a los analistas y mantener el apalancamiento, la empresa entró en transacciones fingidas para afectar la apariencia en su hoja de balance de los 500 millones de dólares de reservas de préstamos perdidos, que los analistas habían estado cuestionando que anteriormente estaban disminuyendo. El resultado fue una acción ejecutiva de la SEC (Securities and Exchange Commission) en 2006, un acuerdo de 1.600 millones de dólares y la remoción de Greenberg. Greenberg todavía está disputando cargos civiles relacionados con sus acciones en la firma.
A medida que progresaba el 2007, así tambien las pérdidas en los libros de AIG y en los CDs. Una vez más, parece que AIG intentó “administrar” el problema mediante maniobras de Contabilidad. En febrero pasado, por ejemplo, AIG dijo que “su auditor había encontrado una debilidad material en su contabilidad.” No había estado valuando correctamente su pasivo en CDO y las amortizaciones relacionadas con los swaps. Las pérdidas se revelaron como excediendo los 20 mil millones de dólares a través del primer trimestre de este año. La SEC está de nuevo investigando, al igual que los fiscales penales en el Departamento de Justicia y la Fiscalía de EE.UU. en Brooklyn.
Después de amortizar activos contra ganancias en otros lugares, AIG había contabilizado pérdidas acumulativas de 18 mil millones de dólares durante los últimos tres trimestres. En febrero, AIG publicó 5.300 millones de dólares en colaterales contra contratos de CDS que había suscripto. En abril, AIG tuvo que contabilizar un adicional de 4,4 mil millones de dólares en colaterales. Cuando las agencias de calificación Standard & Poor’s, Moody's Investors Service y Fitch Ratings Inc., redujeron la calificación de la empresa el pasado lunes a la noche, desencadenó un pedido de 14 mil millones de dólares adicionales como colaterales contra los CDS de AIG.

La compañía no tenía el efectivo

De hecho, la necesidad desesperada de efectivo colateral encima de las crecientes pérdidas en los "activos" CDO almacenados en el balance de la empresa exigió una infusión masiva de capital. Eso es lo que le sucedió a AIG.
Pero una vez más, está la historia – y la historia detrás de la historia.
Hay un problema – un problema intrínsecamente sistémico – y tiene que ver con cómo las inversiones estructuradas como CDOs particionados, los valores con respaldo en hipotecas residenciales (RMBS), los valores con respaldo en hipotecas comerciales (CMBS) y los CDS sobre ellos y sobre las deudas y préstamos corporativos son realmente valuados.
Individualmente, los CDOs son difíciles de valuar. Baste con decir que la leyenda dice que para construir el flujo de pagos de una primera partición de un CDO de tres partes (el tipo más simple de CDO) le llevó a una supercomputadora de Cray Inc. 48 horas. Ahora intente y valúe el CDS sobre ellos!
Debido a que hay tantos valores individuales diferentes de CDO, y debido a que hay tantos CDS en tantos de estos CDOs, y tantos swaps de deudas y préstamos individualmente referenciados, que la única forma de valuarlos en un portfolio es la indexación.
Exactamente, hay índices y adivine qué? Puede comercializar los índices! Markit Group Ltd., de Londres, construye y administra la familia de CDX, ABX, CMBX y LCDX de índices de CDS. Investopedia tiene un pequeño tutorial decente.
He aquí el problema: si usted posee una cartera de CDOs y la única manera de valuarlos (o, al menos, de desarrollar una valuación que otros razonablemente puedan respetar), es mirarlos a través del prisma de un índice de CDS sobre ellos, usted está a merced del índice. Su cartera, sus valores no puede que no sean tan malos, pero realmente puede no saberlo basado en análisis de duración de las hipotecas y casos de ejecución hipotecaria que no puede calcular. Entonces valúa, o mark-to-market (a valor actual de mercado), contra el índice más cercano.
Aquí está el asunto. ¿Qué ocurre si otros especuladores están haciendo "short-selling" – es decir, apostando en previsión de que ese índice baje? ¿Qué ocurre si grande cobertores de cartera están haciendo short-selling del índice para cubrir la cartera que no pueden vender porque nadie la comprará – porque nadie sabe cuánto vale?
Es una locura. Y se está poniendo peor.
Qué ocurre si usted está manejando una empresa rentable que necesita pedir dinero prestado, pero los CDS (las apuestas contra su capacidad de pagar su deuda) son caros en virtud del miedo y la codicia de los especuladores, de modo que si algún banco mira en cuánto se está negociando la valuación de los CDS sobre su deuda, le dice: “Lo lamento, pero no podemos prestarle dinero porque el mercado de CDS piensa que usted es una mala apuesta.”

No consigue el préstamo. No puede construir su fábrica; no puede producir y no tiene nada para vender. El resultado: ahora realmente se está quedando fuera del negocio. ¿Es esto una profecía auto-cumplida?
Considere esto: el lunes último, mientras AIG inicialmente estaba buscando 20 mil millones de dólares en capital y realmente los tenía en la mano (en virtud de un acuerdo con los reguladores de seguros de Nueva York), los comerciantes estaban pujando en alza los CDS contra la deuda y préstamos de AIG tan denodadamente que, según las primas de seguro que los negociantes estaban realmente pagando por el default de los seguros de AIG... la compañía ya estaba muerta. ¿Auto-Cumplida?
Los CDS están creando una espiral descendente en los mercados de capitales, empujando hacia arriba el costo del capital y dejando afuera a toda clase de prestatarios. Y estas apuestas especulativas ejecutadas frenéticamente están socavando todos los esfuerzos del Departamento del Tesoro y de la Reserva Federal de Estados Unidos para “licuar” el sistema. Si esto se mantiene, el mercado de CDS podría hundir la economía estadounidense en una recesión/depresión que hará parecer a la Gran Depresión como un día en la playa.
¿Alguien tiene una toalla?


Inside Wall Street: la verdadera causa de la crisis financiera Parte 3

(Por Por Shah Gilani)

Cómo complejos títulos, el proteccionismo de Wall Street y la miope regulación causaron un cuasi-derrumbe del sistema bancario de EE.UU.

(En la III parte de esta investigación de tres capítulos sobre la crisis crediticia, Shah Gilani detalla cómo la misma complejidad del sistema financiero mundial nos trajo al borde de una crisis total. En una anexo especial mañana (jueves), el ex negociante profesional y administrador de fondos de cobertura detallará una supervisión del sistema bancario que pondría fin inmediatamente a la crisis del crédito - posiblemente sin un sólo centavo del dinero de los contribuyentes.)



No hay más tiempo para seguir con rodeos. Expongamos los tres catalizadores de la crisis crediticia que han permanecido ocultos durante demasiado tiempo, gracias al proteccionismo de Wall Street y a la regulación miope. Esos catalizadores - que nos llevado al borde de una crisis financiera - son las obligaciones de deuda colateralizadas y estructuradas, los seguros contra defaults crediticios estructurados, y el terrible vástago de ambos - los seguros contra defaults crediticios sobre obligaciones de deuda colateralizadas y estructuradas.
Un Título con respaldo en activos (Asset-Backed Securities - ABS) es un tipo de título de deuda negociable que deriva de un grupo o pool de activos subyacentes. Podría estar hablando de un pool de hipotecas, de arrendamientoss de automóviles, o de préstamos hechos a varios prestatarios. Estamos usando el ejemplo de las hipotecas residenciales, aunque el ejemplo es exactamente el mismo para las hipotecas comerciales, los arrendamientos de automóviles o los préstamos bancarios. Así es cómo funciona.



Anatomía de un préstamo hipotecario

Una empresa hipotecaria hace préstamos para la vivienda en su distrito, como lo hace su sucursal local del banco. Entonces aparece un banco de inversiones y compra las hipotecas de la compañía hipotecaria y las del Banco. Sólo quiere comprar los hipotecas a hechas a prestatarios prime o calificados que están pagando un 6 % de intereses sobre sus hipotecas. Una vez que adquiere esos préstamos, el banco de inversión securitiza o titulariza las hipotecas, significando que las agrupa en un paquete negociable que puede vender a los inversores.
Este pool especial es conocido como "pool cerrado," significando que no se agregarán más hipotecas, aunque algunas pueden dejar el grupo si los prestatarios subyacentes pagan sus hipotecas temprano porque vendieron sus hogares, o los refinanciaron, o si las hipotecas subyacentes están en default y el "recaudador" les permitir ser quitadas del pool. El único ingreso que entra al pool cerrado resulta de los pagos de intereses y capital mensualmente hechos por los propietarios.
En nuestro ejemplo - debido a que todos los préstamos hipotecarios fueron a hechos a los llamados prestatarios "prime" con fuerte crédito - puede que el título tenga una calificación de Invesment Grade (A+) que paga el 6 %, debido a que todos los titulares de hipoteca están pagando el 6 % y los pagos están siendo traspasados a los inversores. Eso es todo. Existen muy buenas, aunque no exactas, metodologías para valuar este título en particular, principalmente porque es uniforme en el sentido de que todos los pagadores de la hipoteca son prestatarios prime que están pagando todos el 6 %.
Los títulos con respaldo en activos se vuelven infinitamente más complicados, cuando son rebanados y cortados en estructurados instrumentos colateralizados. Por lo general encajan en dos categorías principales:
1) Obligaciones de deuda colateralizadas (Collateralized Debt Obligations - CDOs), que incluyen todo tipo de títulos respaldados en hipotecas residenciales y comerciales.
2) Y Obligaciones de préstamo colateralizados (Collateralized Loan Obligations - CLOs), que son carteras de préstamos de bancos y de bancos de inversión agrupadas.
Los CDOs y CLOs son creados a partir del "pool-cerrado," de títulos con respaldo en activos. Están colateralizados o avalados por los activos subyacentes - de ahí el prefijo - pero también están "estructurados."En nuestro ejemplo anterior, nuestro título hipotecario con respaldo en activos fue calificado A+ y paga al inversor que lo compra el 6 %. Si quiero crear títulos de mayor rendimiento que creo que podré vender a mucho más, agruparé hipotecas de los prestatarios subprime o no-calificados.
Debido a que los prestatarios subprime son, por definición, prestatarios de mayor riesgo, las empresas y bancos hipotecarios les cobran mayores tasas de interés para compensar el mayor riesgo que representan. Si agrupo estas hipotecas, su calificación sería "basura" - o cercana a ella - lo que será un problema si intento y vendo estos títulos a inversores de todo el mundo.

Es ahí donde la magia de la ingeniería financiera, mejor conocida como estructuración, entra en juego. Puedo dividir al grupo cerrado de hipotecas subprime y estructurarla el grupo en capas, o tramos . Lo que haré es dividir el grupo en múltiples tramos, o rebanadas. Estructuraré los pagos de flujo de caja desde todos las hipotecas de manera que si el 1º y 2ª tramo entran en problemas, tomaré los pagos de flujo de efectivo de los tramos inferiores para manterner constante todos los pagos a los titulares del 1º y 2º tramo.
Para alguien que intente vender estos títulos con respaldo en activos, esto es un golpe de genialidad. En nuestro ejemplo, ya que ahora estoy garantizando más que bien que los tenedores de títulos del 1º y 2º tramo van a cobrar, tal vez pueda obtener que las tres grandes compañías calificadoras de deuda- Stándard & Poor’s, Moody's Investors Service y Fitch Ratings Inc. - le den a mis 1º y 2º tramos la calificación de "Investment Grade" de los CDOs. Tal vez pueda incluso comprar un seguro de parte de una aseguradora monolínea como AMBAC Financial Group Inc. o MBIA Inc. y obtener para mis tramos superiores una codiciada calificación "AAA". ¡Vaya, seguro que podría vender un montón de estas cosas de alto rendicmiento con una calificación de Investment Grade!
Eso es justo lo que sucedió. Y efectivamente vendieron mucho - una enorme cantidad.
Esos preocupantes tramos
Como dije en la parte II de esta serie de investigación, los CDOs - en forma individual - son difíciles de valuar. De hecho, "la leyenda dice que construir los pagos de flujo de caja en el primer teórico CDO de 3-tramos (el tipo más simple de CDO) llevó a un superordenador Cray Inc. 48 horas para calcular.
El problema comienza aquí. Hay tantos de estos títulos segmentados afuera en el mercado - y en las hojas de balance de los bancos, los bancos de inversión, las compañías de seguros, los fondos de cobertura y todo tipo de otras confiadas entidades de inversión de todo el mundo - que cuando los prestatarios subprime comenzaron a defaultear o dejar de pagar, no pasó mucho tiempo antes que los tramos de nivel inferior se quedaran sin dinero para pagar a los llamados títulos de 1º y 2º-nivel con calificación "AAA". El problema escaló rápidamente y casi todos estos títulos fueron degradados en su calificación. Esa no es una sorpresa. Tampoco lo es toda la historia, ya que deja una pregunta clave sin responder.
¿Qué ocurrió con los tramos de más bajo nivel?

Esos tramos eran "desagradables" desde el vamos ya que empecé por agrupar las hipotecas subprime (los prestatarios de alto riesgo). A continuación, los hice "tóxicos" al "despojarlos" de su flujo de caja para sostener otros tramos. Esta basura tóxica era tan mala, que nunca nadie la calificó y sólo los avaros fondos de cobertura o los especuladores locos la comprarían por su alto rendimiento. O, quizás, como pensé tanto en mi creación que conservaré esta pieza para mí mismo, o tal vez tendré que hacerlo porque ningún inversor la comprará jamás.
Este tipo de cosa está allí afuera. Hay un montón de ella. Y sólo un acto de Dios sacará a estos títulos de las profundidades en donde ahora residen. Con su premisa colateralizada y su naturaleza estructurada, los CDOs son muy difíciles de valuar - sobre todo porque nadie confía en "el modelo de valuación interna" de algún otro. Puesto que todo el mundo está temeroso de estos títulos porque nadie sabe realmente lo que en verdad valen, nadie quiere comprarlos.

Sin embargo, cuando una institución - como Merrill Lynch & Co. Inc. - se pone lo suficientemente desesperada como para vender una cartera de estos valores a 22 centavos por dólar, entonces, todos aquellos que tienen que valuar a precio de mercado (mark-to-market) sus activos ahora tienen que valuar sus propios títulos similares a 22 centavos por dólar. Eso causa amortizaiones masivas en los bancos, los bancos de inversión, las compañías de seguros y otras instituciones financieras. Y estas empresas que amortizan activos y ven que sus pérdidas escalan, se ven obligadas a obtener capitales adicionales para satisfacer los requisitos regulatorios.
CDS - Peligrosas Substancias Financieras Controladas - Controlled Dangerous (Financial) Substances
Es un círculo vicioso - uno que va erosionando nuestra fe en nuestros bancos, y peor aún, la fe de los bancos en otros bancos. Consecuentemente, los bancos han dejado de préstarse entre sí por temor a que la próxima ronda de amortizaciones y pérdidas pueda poner en peligro a algunos de los bancos asociados comerciales a los que solían prestarles miles de millones de dólares cada noche.
Ya no más.
Sería bastante malo si ese fuera el único problema que enfrenta el mercado de títulos. Encima de estos valores estructurados altamente elaborados de los que recién he hablado, tenemos también a los Seguros por defaults crediticios (credit default swaps - CDS) con un valor hipotético estimado en u$s 62 billones en el mercado. Un CDS es un derivado financiero que es similar a una póliza de seguro que un titular de deuda puede usar para cubrirse contra el default de una corporación, o de una entidad soberana. Pero un CDS también pueden utilizarse para especular.
En la parte II de nuestra investigación, que corrió el lunes, expliqué cuán problemático es el fijar el precio de los CDS y cómo los índices contra los cuales se determina el valor de estos swaps son negociables en sí mismos como instrumentos especulativos y cómo todo el complejo está llevando al sistema financiero hacia un abismo. Eso es esencialmente lo que llevó al colapso del otrora saludable gigante asegurador, American International Group.

Lamentablemente, no veo que el muy necesitado plan de rescate del Departamento del Tesoro de EE.UU. sea eficaz sin realmente abordar los problemas tanto del mercado de los CDO como de los CDS. La iniciativa del Departamento del Tesoro creará más problemas de los que intenta resolver y finalmente cargará a los contribuyentes con tanta deuda que se arriesgan a hundir al dólar y, peor aún, a la calificación de Investment Grade del Gobierno de los Estados Unidos. Eso sería calamitoso.
Mañana (jueves) en MoneyMorning, en un anexo a esta pieza, presentaré una propuesta que estoy llamando el Plan Money Morning porque potencialmente anuncia un nuevo amanecer en la crisis del crédito, abordando los problemas desde abajo hacia arriba y no desde arriba hacia abajo. Aunque este plan es sencillo y elegante en su simplicidad, todavía optamos por presentarlo como una historia separada para proporcionarle el enfoque, los detalles y las explicaciones que creemos que esta estrategia merece.
Si el Departamento del Tesoro quiere inmediatamente establecer las prioridades respecto a las heridas que están desangrado a nuestros bancos y al sistema financiero del crédito disponible mediante la compra y almacenamiento de activos ilíquidos con dinero de los contribuyentes, no pasará mucho tiempo antes de que el sistema financiero estadounidense comience a tener una hemorragia en otro lugar.
El mercado libre causó estos problemas ante las narices de los imperceptibles reguladores.
El mercado libre - con la supervisión de las prácticas de buen gobierno establecidas por reguladores eficaces, quienes no deberían estar facultados para matar al capitalismo empresarial - una vez más se pondrá a la altura de la ocasión y demostrará la robustez y el espíritu incansable de EE.UU.

Las crisis financieras se suceden impulsadas por la globalización
La crisis financiera motivada por el impago de los créditos de alto riesgo en Estados Unidos no ha tocado techo. Aunque desde los bancos centrales y los gobiernos se trata de poner una venda en los ojos de la población, saben de su gravedad, porque han necesitado inyectar más de 350.000 millones al circuito financiero para evitar un colapso. Las crisis financieras se suceden por el efecto de la globalización y ya se anuncia una burbuja en los biocombustibles.

La crisis financiera mundial actual, surgida en Estados Unidos por el impago de los créditos de alto riesgo, es una más de las que se han producido entre el siglo pasado y el actual, que está siendo castigado ya desde los comienzos con las crisis de las tecnologías de la información y la comunicación, denominada la «crisis de las punto.com», y ahora con la «crisis de las hipotecas de alto riesgo». Estados Unidos está en el epicentro de cada colapso.
Los problemas no paran aquí, porque la compañía Accenture ya ha pronosticado que el sector de los biocombustibles se enfrenta «a una posible burbuja, similar a lo que ocurrió con las TIC». Lo que está claro es que a medida que ciertos negocios cobran relevancia, los especuladores financieros entran en ese proceso hasta que extraen la última gota, lo que provoca un reajuste del mercado.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) reconoce que se está produciendo un creciente número de crisis financieras y explica que la globalización «ha incrementado su frecuencia y su propagación, pero no necesariamente su gravedad».
Esa matización de ese organismo alineado con las políticas neoliberales más profundas podría llegar a ser cierta si en el caso de la actual crisis financiera mundial no hubiera sido necesaria la inyección de más de 350.000 millones para ofrecer liquidez al mercado y beneficiar de forma directa a los especuladores bursátiles para evitar un colapso financiero de consecuencias impredecibles.
La globalización ha hecho posible que el movimiento de capitales no esté restringido y, por lo tanto, en cuestión de segundos se puede estar invirtiendo en Tokio y en Nueva York, sin restricción alguna. Quienes peor parados salen de estas y anteriores crisis y movimientos especulativos son siempre los trabajadores. En Euskal Herria la actual crisis ya ha provocado que se pongan más trabas a la hora de acceder a un crédito y no está claro que los tipos de interés, que fija el Banco Central Europeo, se mantengan inamovibles en el 4%, ya que el indicador del Euribor sigue imparable y ha rebasado ese porcentaje con cierta facilidad.

A este hecho hay que añadir que la Reserva Federal de Estados Unidos todavía sigue transfiriendo liquidez porque, al contrario de lo que se había dicho, la crisis no ha aflorado con toda su contundencia ni se ha trasladado al resto del mundo, como es de esperar. De hecho, el ex presidente de la Reserva Federal estadounidense Alan Greenspan afirmó que el efecto de la crisis traerá consigo una recesión económica «cuando aflore en toda su intensidad». En Europa se espera que su efecto llegue a mediados del próximo año.

Crisis de las punto.com

Si retrocedemos, se puede comprobar como en el 2000 ya se produjo la crisis de las compañías de internet. Entonces empresas como «Amazon.com» y AOL lideraron el fuerte crecimiento de ese negocio. El punto más álgido de la operación se alcanzó cuando AOL compró Time Warner en enero de 2000.
La cotización en el mercado tecnológico estadounidense Nasdaq se elevó. En marzo estalló la burbuja, ya que el Nasdaq comenzó a perder. Para octubre de 2002 ese índice había caído un 78%. Esta situación tuvo la correspondiente influencia en la economía, dado que la inversión empresarial cayó y Estados Unidos entró en un proceso de desaceleración, que después se agravó con los sucesos de las Torres Gemelas de Nueva York el 11 de Setiembre. Para reactivar la economía, la Reserva Federal de Estados Unidos redujo los tipos de interés del 6,25% al 1%, «para estimular el crecimiento».
En 2002 también se produjo la crisis financiera en Argentina derivada de los problemas de deuda y de falta de liquidez de los sistemas.

CRISIS ASIATICA


Otra importante crisis tuvo lugar en el sureste asiático en 1997, que se extendió a Rusia y Brasil en 1998 y provocó también en Estados Unidos un fuerte colapso financiero con el fondo de capital riesgo Long-Term Capital Market (LTCM), que hizo crack. Ese fondo fue creado por los ganadores del premio Nobel Myron Acholes y Robert Merton para la compra y venta de bonos. Estos creían que a largo plazo las tasas de interés de los bonos gubernamentales empe- zarían a converger y el fondo de capital riesgo podría comerciar con las pequeñas diferencias entre las tasas.
Sin embargo, en agosto de 1998, Rusia empezó a dejar de pagar sus bonos, por lo que los inversionistas acudieron a otros mercados y buscaron refugio en los Bonos del Tesoro estadounidense. Produjo un diferencial drástico, lo que provocó que el fondo Long-Term Capitral Market, que había pedido prestado mucho dinero, se encontrara en peligro de perder miles de millones. «Para poder liquidar esas posiciones, tendría que vender sus bonos de la Tesorería, lo que afectaría al mercado de crédito de Estados Unidos y forzaría un incremento de los tipos de interés», según manifiestan los expertos.
Por lo que la Reserva Federal decidió «que debía acudir al rescate» y convenció a los principales bancos estadounidense para que invirtieran en torno a 4.000 millones «para salvar a la firma del colapso inminente». A la vez, la Reserva Federal acordó un recorte de emergencia de los tipos en octubre de 1998. Los mercados se estabilizaron, pero esa compañía de capital riesgo fue liquidada en 2000.
Diez años después de la crisis asiática, «Asia mira nuevamente al futuro con confianza. Es alentador observar que las políticas se adaptan cada vez más al ritmo acelerado de la globalizaicón», indican David Burton y Alessandro Zanello, directores del FMI para Asia y Pacífico. Sin embargo, ambos reconocen que el desarrollo económico sólo afecta a unos pocos, puesto que la mayoría de la población se encuentra en posiciones de pobreza y existe desigualdad entre los trabajadores.

Crack de octubre de 1987

Las bolsas de valores estadouniudenses sufrieron fuertes caídas en octubre de 1987, cuando el índice Dow Jones bajó un 22%. La crisis tuvo su origen en la creencia generalizada del manejo inapropiado de información confidencial y en la adquisición de compañías con dinero proveniente de préstamos. Se produjeron problemas con las computadoras, porque las operaciones se hacían a golpe de tecla sin capacidad de reacción al mercado.
Una crisis anterior en 1985 tuvo como protagonista al banco Savings and Loans, que ya ofrecía hipotecas y recibían depósitos de pequeños inversionistas.
CRisis made in eeuu
Las principales crisis financieras que han ocurrido en el último cuarto del siglo pasado y en el inicio del actual tienen su origen en Estados Unidos, pero han tenido una repercusión mundial muy importante por su posición dominante.

ALTO RIESGO


La crisis financiera actual debido al impago de las hipotecas de alto riesgo, que se inició en Estados Unidos, ha sobrepasado sus fronteras y se espera que tenga un impacto directo en la economía europea durante el próximo ejercicio.
prevenir EL RIESGO
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ya alertó en abril del fuerte riesgo crediticio en Estados Unidos. Sin embargo, considera que existen en la actualidad mecanismos que permiten anticipar con más tiempo la gravedad de estas crisis.
Posible burbuja en el sector de los agrocombustibles
Un estudio que ha presentado recientemente la compañía Accenture indica que el sector de los agrocombustibles se enfrenta a una posible burbuja de aquí a 2012. El trabajo reconoce que, al igual que ocurrió con la crisis de internet, podría pasar en el sector de moda. «Las compañías más fuertes serán las que queden en los próximos cinco años», precisa Matías Alonso, socio de Resources de Accenture.
Alonso reconoce que «primero habrá un boom, que ya lo estamos viviendo, al que le seguirá un descenso de la actividad a medida que se haga evidente hasta qué punto es complicado aumentar de un modo práctico la dimensión de ese mercado. Al final, los jugadores más estables serán los que quedarán».
El informe analiza que los productores de agroetanol y agrodiésel se convertirán en el próximo quinquenio en los líderes exportadores del sector energético, puesto que ya se conoce que el mercado global de los agrocombustibles va a crecer a nivel mundial por las políticas que se están relanzando para consumir energía más limpia. En este sentido, la posición de China e India en este mercado será fundamental y marcará el futuro del sector que, por otro lado, está provocando un encarecimiento de los cereales. Según Accenture, las claves para determinar el éxito o fracaso futuro de las compañías dedicadas a los agrocombustibles se controlará sobre la capacidad que tenga de «equilibrar de manera sostenida el suministro de carga de alimentación con todo lo relacionado con el almacenamiento y el transporte, reduciendo así los costes y aumentando la producción de carga de alimentación, las consideraciones legales a favor de la agricultura en casi todos los países y las normativas que fomenten el uso de los biocombustibles para reducir las emisiones de CO2».
Una de las mayores incertidumbres que recoge el estudio de Accenture se basa en la tecnología. «Seguirá mejorando, pero todavía no sabemos cuáles tendrán un mayor impacto y cuál será la dimensión del sector al final». Un tema que sale a la luz en este caso es que la empresa Biocarburantes de Castilla y León, compuesta al 50% por la empresa Abengoa Bioenergía y Ebro Puleva, ha decidido el cierre de la planta de bioetanol de Salamanca «por la incertidumbre regulatoria y la subida de los precios de los cereales», según informó Abengoa. J. BASTERRA
«El mercado libre desemboca en una orgía especulativa»

Las crisis financieras están mostrado una virulencia especial desde «la Gran Depresión» americana de 1929, conocido como «jueves negro», a la actual, pasando por la del petróleo en los años setenta del siglo pasado. Desde el FMI se trata de reducir ese impacto actual sobre los anteriores, pero el efecto negativo arrastra a más sectores. El FMI considera que se deben poner más controles, para que «salten las alarmas antes» y se puedan adoptar medidas compensatorias. Es decir, se trata de ayudar a los especuladores. Lo que sí es cierto es que antes de producirse los colapsos, las compañías obtienen siempre los mayores beneficios económicos en procesos de fusión y compras de empresas. Andrew Jackson, que ocupó el cargo de economista jefe de la Canadian Labour Congress, situó en un análisis que realizó sobre la «Gran Depresión» y la crisis de 1998, que afectó al sureste asiático y a Estados Unidos de forma directa, su semejanza en que «la naturaleza fundamental del sistema económico no ha cambiado. El mercado libre desemboca en una orgía especulativa». Para explicar las burbujas financieras, Jackson señala que «aparecen debido a las esperanzas irracionales sobre el futuro y se vienen abajo cuando el rebaño de los inversionistas cambia el rumbo». Critica que, tras la crisis del petróleo en 1973, «los gobiernos desregularon los mercados, en beneficio de las transnacionales». J. B.

AHOGADOS

Mientras el Banco Central Europeo y la Reserva Federal estadounidense salen en apoyo de los especuladores financieros, quienes poseen créditos hipotecarios se han visto perjudicados por quienes están haciendo de la Bolsa un inmenso negocio.

Desequilibrios estructurales del capitalismo actual

(Por IAR Noticias)

La actual crisis económica y financiera internacional se inscribe en el marco de un largo ciclo de recesión, del cual el capitalismo no ha logrado salir, desde su inicio a mediados de los años setenta del siglo pasado. Sin esa inserción, es difícil la comprensión del carácter de esta crisis, de las consecuencias que puede producir y del escenario que debe surgir después de ella.
Por Emir Sader (*) Insurrectasypunto

Los ciclos y las crisis

El capitalismo vive, por la propia naturaleza de su proceso de reproducción, articulado por ciclos, cortos y largos. Estos conjugan los ciclos cortos, en una perspectiva expansiva, si la curva de las subidas y los descensos de las oscilaciones cortas apuntan para arriba; recesiva si apuntan para abajo, de acuerdo a la teoría del economista ruso Kondratieff, retomada teórica e históricamente por Ernst Mandel.
En la segunda post-guerra, el capitalismo vivió su "edad de oro", según Eric Hobsbawn, en que coincidieron virtuosamente la mayor expansión concomitante de las grandes economías capitalistas - los Estados Unidos, Alemania, Japón - , el llamado "campo socialista", dirigido por la Unión Soviética, y las economías periféricas, como México, Argentina, Brasil, con sus procesos de industrialización dependiente. La economía capitalista no dejó de presentar sus ciclos cortos de crisis, pero en cada nuevo ciclo se retomaba la expansión y empujaba la economía a niveles cada vez más altos.
Fue un largo ciclo expansivo comandado por las grandes corporaciones internacionales de carácter industrial y comercial, apoyadas por un sistema financiero en expansión y por grandes transformaciones en la producción agrícola. Un modelo hegemónico regulador - o keynesiano o de bienestar, como quieran llamarlo - incentivaba las inversiones productivas, tendía a fortalecer la demanda de consumo interno, promovía el fortalecimiento de los estados nacionales y la protección de sus economías.
Las crisis, como es típico en el capitalismo, expresaban procesos de superproducción o de subconsumo - como quieran llamarlos-, reflejando el desequilibrio estructural de ese sistema entre su - ya reconocida por Marx en el Manifiesto Comunista - enorme capacidad de expansión de las fuerzas productivas, pero que se confrontaba constantemente con su incapacidad para distribuir la renta en la misma medida de aquella expansión.

En su fase final, el largo ciclo expansivo de la segunda pos-guerra vio ese excedente, resultado acumulado del desfase entre producción y consumo convertido en capital financiero - los llamados eurodólares, que fue aprovechado por países como Brasil, para reciclar su modelo económico diversificando su dependencia externa y favoreciendo la reanudación de la expansión económica interna, incluso antes del final del largo ciclo expansivo. Este factor - el golpe militar fue en el ciclo expansivo - diferenció el escenario económico brasilero de los demás países de la región, donde las dictaduras coincidieron con la recesión, por haberse dado durante el largo ciclo recesivo del capitalismo internacional.
¿Qué características tuvo el final de ese ciclo y el comienzo del nuevo, de carácter recesivo? Habiendo triunfado el diagnóstico de que el estancamiento económico se debía al exceso de regulaciones, el nuevo modelo se centró en la desregulación, por lo que las privatizaciones, las aperturas para el mercado externo, las políticas de "flexibilización laboral" y de ajuste fiscal, fueron sus expresiones más claras.
Dos consecuencias importantes deben ser recordadas aquí, para comprender el carácter de la crisis actual y sus efectos en los países de América Latina. La primera de ellas, el gigantesco proceso de transferencia masiva de capital del sector productivo hacia el especulativo, que la desregulación promovió a escala nacional e internacional. Libre de trabas, el capital migró masivamente para el sector financiero y en particular para el sector especulativo, donde obtuvo muchos más beneficios, con mucha mayor liquidez y menos o ningún tributo para circular.
Se configuró así, la hegemonía del capital financiero bajo la forma de capital especulativo, haciendo que más del 90% de los movimientos económicos se dieran, no en la esfera de la producción o del comercio de bienes, sino en la compra y venta de papeles, en las Bolsas de Valores o de papeles de las deudas públicas de los gobiernos.

Se promovió la refinanciación de las economías, lo que significa, en primer lugar, la refinanciación de los Estados, cuyo primer y mayor compromiso pasa a ser el pago de las deudas, es decir, la reserva de recursos mediante el llamado "superávit primario" y la transferencia masiva y sistemática de los recursos del sector productivo para el capital financiero. Grandes grupos económicos con un banco o institución financiera a la cabeza, acostumbran a ganar más en inversiones financieras que en aquellas que dieron origen a las empresas que los componen. Gran cantidad de pequeñas y medianas empresas, entraron en procesos de endeudamiento, de los cuales no consiguieron salir. Otras, así como los consumidores, no se atrevieron a pedir préstamos, por el temor a endeudarse con altas tasas de interés.
El capital financiero pasó a ser la sangre que corre por las economías de los países, definiendo el metabolismo que las preside. Un capital que tiene en la volatilidad, en la extrema liquidez, un elemento esencial, inherente, que le permite moverse rápidamente para donde puede tener mayores ventajas y, al mismo tiempo le atribuye un gran poder de presión, frente a las economías débiles que dependen estructuralmente de él.



Las crisis en la fase neoliberal

De estas características resulta el carácter centralmente financiero de las crisis en el período neoliberal, como se evidenció en la crisis mexicana, asiática, rusa, brasilera y argentina, entre otras. El sector financiero canalizó para sí los excedentes de capital, producto del desfase estructural entre producción y consumo, agudizada en la fase actual del capitalismo, en que el aumento de la productividad y la creatividad tecnológica siguieron profundizándose al mismo tiempo que se dieron procesos de concentración de renta entre las clases sociales, entre países y regiones del mundo.
El poder devastador de estas crisis y el potencial de contagio se revelaron de la misma dimensión del tamaño de la apertura de las economías al mercado internacional y al peso que el capital financiero pasó a desempeñar en escala nacional y mundial. México siguió sufriendo los efectos de la crisis de 1994 durante muchos años. Lo mismo ocurrió con los países del sudeste asiático. En Brasil, la crisis de 1999 significó el pasaje a años de recesión, que sólo recientemente fueron superados. En Argentina la crisis tuvo consecuencias devastadoras desde el punto de vista económico, financiero, político y social.
Son crisis que se desatan a partir del eslabón más frágil, más sensible, del proceso de reproducción - el sector financiero -, pero que rápidamente se propagan por el resto de la economía, por el papel central que este sector pasó a tener y por los aspectos psicológicos en los que se basa. No por casualidad el segundo libro de Francis Fukuyama se llama "Confianza", para indicar cómo las expectativas, positivas o negativas, asumen fuerza material en el juego especulativo.


América Latina fue así, víctima privilegiada de estas crisis, que no por casualidad alcanzaron justamente a sus tres economías más fuertes, que habían sido exhibidas como modelos - la mexicana, brasilera y argentina. En los tres casos la crisis tomó la forma de ataque especulativo, de crisis financiera, que se extiende para el conjunto de la economía. Los capitales especulativos se valen del peso desestabilizador que tienen en la economía, para hacer valer esa posición, presionando con una salida brusca y masiva de capitales, acciones gubernamentales o simplemente el juego del mercado, lucrando enormemente con esas operaciones.
Las crisis anteriores tenían como escenarios países de la periferia, con efectos que intensificaron la tendencia al debilitamiento de los países globalizados y la intensificación de la concentración de la renta y del poder de los países globalizadores.



Incluso la crisis en Rusia podría ser caracterizada como la de una economía transformada en periférica, especialmente a mediados de la década de 1990. La excepción fue el ataque del megaespeculador George Soros a la libra esterlina inglesa, pero terminó siendo un caso puntual, lo que no modifica la norma general de las crisis en la periferia.
En su conjunto, como crisis neoliberales, provocaron demandas de medicina neoliberal: más apertura de las economías - como sucedió fuertemente en los países del sudeste asiático - mayores préstamos del FMI y las correspondientes Cartas de Intención, con un incremento de los ajustes fiscales. La economía mexicana recibió un préstamo gigante de los Estados Unidos en el momento de la crisis de 1994, inclusive porque coincidía con el momento en que se firmaba el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA) y el surgimiento de la rebelión de los zapatistas en Chiapas. Como compromiso, México usó esos recursos para pagar los préstamos de los bancos norteamericanos y siguió profundizando el modelo neoliberal.
El gobierno brasilero de Fernando Enrique Cardoso, frente a la crisis de 1999, elevó la tasa de interés al 49% y firmó la tercera Carta de Intención con el FMI, cuyas consecuencias extendieron la recesión por varios años. En la Argentina, la crisis provocada por la explosión del modelo de paridad peso/dólar, produjo la mayor regresión económica y social que el país conoció en toda su historia. El gobierno de Fernando de la Rúa trató de mantener el modelo heredado de Carlos Menem y con esto cayó a los pocos meses de asumir su mandato presidencial.

La crisis actual y sus consecuencias

La anterior crisis de la economía norteamericana se dio en el año 2000, cuando se desvanecía la ilusión de que la "nueva economía" permitiría que el capitalismo no sufriese más sus crisis cíclicas, ya sea porque la informática le permitiría preverlas y así evitarlas, ya sea porque nuevas demandas como las de las computadoras, generarían, de la misma forma que en el caso de los automóviles, el lanzamiento anual de nuevos modelos, que extenderían cada vez más la demanda. En aquel momento, el papel de los mercados norteamericanos en el mundo, seguía siendo determinante, transfiriendo los efectos de su recesión para la economía mundial.
Esta vez la crisis norteamericana se produce en un escenario internacional que ha cambiado. La continua expansión de los países emergentes - entre ellos principalmente China e India, pero también los países de América Latina, que mantienen constante el ritmo de crecimiento, en particular Brasil y Argentina – amortigua la disminución de la demanda de los Estados Unidos y, por primera vez, la recesión de la economía norteamericana no tiene efectos directos y devastadores sobre la economía mundial.
Pero, como esta crisis se ve agravada con el aumento de los precios de los productos agrícolas y la continua crisis del petróleo, se constituye en verdad en una triple crisis: sus efectos son más profundos y extensos que una simple crisis cíclica de la economía norteamericana. Son afectadas no solo las exportaciones para los Estados Unidos, sino también los importadores de energía y productos agrícolas, que en mayor o menor proporción afecta a todos los países en el mundo.

Sin embargo, al igual que cualquier fenómeno de un sistema caracterizado por la extrema desigualdad de la riqueza y del poder entre regiones y países y dentro de cada país, los efectos de las crisis no se distribuyen por igual entre todos. Hay ganadores y perdedores, verdugos y víctimas.
Como la crisis está en pleno desarrollo, sus alcances no pueden ser evaluados en toda su plenitud, se dan pugnas para ver quien consigue sacar ventaja, quien trata de perder menos, por lo que aún no es posible evaluar con precisión los daños en toda su extensión y quien los asumirá. Es verdad que el mundo cambiará a partir de esta crisis, inclusive porque toca tres puntos nodales de las relaciones económicas y del poder actual: dinero, energía y alimentos. Sin embargo, las estructuras de poder, de producción y de distribución de la riqueza reinante, garantizan resultados muy diferentes para las distintas regiones y países como consecuencia de las crisis.
En la combinación del aumento de los precios del petróleo, de los productos agrícolas y la disminución de la demanda de los Estados Unidos y de Europa, los países más pobres, que son la gran mayoría del África, Asia y América Latina, perderán claramente, con fuertes presiones recesivas, déficit en la balanza comercial y el aumento del endeudamiento. Los países exportadores de petróleo y de productos agrícolas con alzas más significativas, tendrán sus situaciones atenuadas, pero las presiones inflacionarias no perdonan a ningún país, y con ellas, las políticas recesivas vuelven a imponerse.

En América Latina, los efectos son más pesados y directos para los países que siguen dependiendo en mayor medida del comercio con los Estados Unidos: México, América Central y el Caribe en primer lugar. En segundo lugar, los países con pautas exportadoras menos valorizadas o aquellos que hubiesen tenido su ciclo de expansión económica excesivamente centrado en las exportaciones, especialmente las economías más abiertas, entre ellas las que tienen tratados de libre comercio con los Estados Unidos, como Chile , Perú, además de los ya mencionados México, Costa Rica y otros países centroamericanos y caribeños. Deben ser relativamente menos afectados los países con pautas exportadoras más diversificadas – ya sea en los productos, ya sea en los mercados - como Brasil, en parte Argentina, y los que participan en los procesos de integración regional – ya sea en el Mercosur o en el Alba. Para estos, las crisis son una oportunidad especial para acelerar e intensificar los procesos de integración, del comercio, así como los planos financieros y energéticos.
Ya sea por la combinación de las crisis, ya sea porque afecta profundamente a los Estados Unidos, en el momento en que, por primera vez, su peso en la economía mundial disminuye, el mundo y América Latina en particular, tendrán fisonomías distintas, ya sea acelerando transformaciones que ya están en marcha, o dando inicio nuevas dinámicas, pasadas las crisis – cuya duración y profundidades, aún no pueden ser medidas con precisión.



AIG entregará al gobierno de EE.UU. el 80% de la empresa sin la aprobación de los accionistas

(Por IAR Noticias)

American International Group Inc. informó el viernes que dará al Gobierno el control del 80% de la compañía sin solicitar la aprobación de los accionistas, en tanto el comité de auditoría del directorio determinó que la "demora" necesaria para obtener la aprobación "pondría en serio peligro la viabilidad financiera" de la entidad.
Por Liam Pleven -The Wall Street Journal
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IG indicó además en un comunicado enviado a la Comisión de Bolsa y Valores, SEC, de Estados Unidos que pagará a alrededor de 130 ejecutivos bonificaciones en efectivo como parte de un programa de retención para la gigante de seguros.
La semana pasada AIG obtuvo el derecho de recibir un préstamo de hasta US$85.000 millones del Gobierno en un acuerdo para evitar una posible bancarrota.
AIG señaló en el comunicado que Jay Wintrob, el vicepresidente ejecutivo de servicios de retiro de AIG, recibiría una compensación de US$3 millones.
El pago de las bonificaciones se divide en dos: un 60% en dicimebre y el 40% restante en diciembre del próximo año.
Los términos del acuerdo no fueron divulgados.
El programa de retención sugiere que la actual gerencia de AIG -incluido el presidente ejecutivo Edward Liddy, quien fue asignado por acuerdo con el Gobierno- está tratando de mantener a los principales empleados y proteger el valor de las subsidiarias de seguros de la compañía.
La decisión de la compañía de proseguir sin obtener la aprobación de los accionistas, la cual señala que contó con el visto bueno de la Bolsa de Nueva York, priva a los accionistas de buscar opciones para un potencial apalancamiento.
AIG anunció el viernes que alcanzó un acuerdo para comprar reaseguros -lo que básicamente son seguros para compañías de seguro- de una filial del vehículo de inversión de Warren Buffett, Berkshire Hathaway Inc.
También el viernes, Maurice R. "Hank" Greenberg, ex titular de AIG, y un grupo de accionistas afiliados informaron que redujeron su participación a un nivel justo por debajo de un límite clave de acuerdo con la normativa.
Greenberg y los inversionistas informaron en documento a la SEC que ahora son propietarios del 9,99% de las acciones de AIG, luego de vender 40 millones de acciones el jueves.

Al reducir su participación por debajo del 10%, Greenberg tiene más espacio para maniobrar como potencial comprador. Bajo la ley de Nueva York, los accionistas que controlan más del 10% de las acciones de una aseguradora deben solicitar solicitar autorización al
Departamento de Seguros del Estados de Nueva York antes de tomar medidas como ejercer control sobre la compañía.
El viernes, las acciones de AIG cerraron en US$3,15 y subían un 0,63% a US$3,17 en negociaciones tras el cierre del mercado.

La ONU lanza alerta mundial
Casa Blanca y Congreso enfrentados por el rescate: Peligra el plan y caen bolsas


(Por IAR Noticias)

El terremoto financiero imperial con epicentro en EEUU se complica cada vez más con la renuencia cada vez más marcada del Congreso de EEUU a aprobar el plan de mega-rescate diseñado por la Casa Blanca. La incertidumbre sigue derrumbando las bolsas y la Reserva Federal y el Tesoro de EEUU advierten de "graves consecuencias" si no se aprueba la iniciativa oficial. La guerra electoral tiñe el cuadro de la crisis y paraliza las decisiones. Gobernantes del mundo, reunidos este martes en la Asamblea general de la ONU, lanzaron un alerta mundial y requirieron medidas urgentes para evitar que la crisis financiera se globalice.


La Casa Blanca advirtió el martes al Congreso que la economía en su conjunto está en riesgo si no aprueba con urgencia el proyecto de rescate financiero por US$ 700.000 millones, mientras las bolsas mundiales retrocedían nuevamente al perder confianza en ese plan.
En ese escenario, Wall Street -que abrió el martes en leve alza- pasó al rojo poco después de mediar la jornada, mientras Paulson, secretario del Tesoro y Bernanke, presidente de la Reserva Federal, explicaban en el Senado los detalles del plan, el Dow Jones perdía 0,13% y el Nasdaq bajaba 0,14%.

También los mercados bursátiles de Europa y de la región Asia-Pacífico, escépticas ante el plan de rescate, cerraron a pérdidas.
La bolsa de Londres cerró perdiendo 1,91%, la bolsa de París cayó 1,98%, el Ibex-35 de la bolsa de Madrid cedió 1,34% y la de Francfort 0,64%.

En Asia, el índice Hang Seng de la Bolsa de Hong Kong retrocedió 3,9% y la Bolsa de Shanghai perdió 1,56%. La Bolsa de Tokio, segundo mercado de valores del mundo, estuvo cerrada el martes por feriado.
El secretario del Tesoro estadounidense, Henry Paulson, lanzó una dura advertencia al Congreso, donde la mayoría demócrata ha puesto obstáculos al plan de salvamento, luego de que la semana pasada la crisis del crédito provocara enormes turbulencias en las plazas financieras del mundo.

"Si la situación persiste, amenazará a todos los sectores de la economía", destacó ante el comité bancario del Senado, que también recibió al presidente de la Reserva Federal estadounidense (Fed), Ben Bernanke.
Henry Paulson afirmó que "los mercados han alcanzado un nuevo nivel dentro de las turbulencias" que asolan Wall Street desde el estallido de la crisis. Además, advirtió que amenazan con salpicar al resto de la economía. "Debemos tomar una acción decisiva contra las causas profundas de esta agitación", enfatizó.
Por su parte, el presidente de la Reserva Federal de EEUU, Ben Bernanke, mostró su respaldo al plan de rescate diseñado por el secretario del Tesoro, Henry Paulson, y urgió al Congreso de EEUU a tomar las acciones necesarias para evitar graves consecuencias para el sistema financiero y la economía.

En un discurso ante el Comité de Banca del Senado, el máximo responsable de política monetaria de EEUU, Ben Bernanke, admitió que el breve marco temporal disponible actualmente dificulta la elaboración de un exhaustivo proyecto de reformas para hacer frente a las debilidades del sistema financiero y regulatorias, puesto que requeriría un cuidadoso y extenso análisis.

"La acción del Congreso es requerida con carácter urgente para estabilizar la situación y evitar que, de otro modo, pudiera haber serias consecuencias para nuestros mercados financieros y para la economía", afirmó Bernanke.
Por otro lado, el presidente de la Fed apuntó que la economía de EEUU continúa haciendo frente a considerables desafíos, entre los que aparecen el debilitamiento del mercado laboral y una elevada inflación, y destacó que las tensiones en los mercados financieros se han intensificado "significativamente" en los últimos tiempos.

"Los mercados de capitales están bajo un gran estrés y urge adoptar acciones inmediatas para comprar acciones por valor de cientos de miles de millones de dólares intoxicados por las hipotecas basura", señaló Bernanke a la Cámara estadounidense.

En las últimas jornadas, la Casa Blanca y el Tesoro, a los que se suma la Reserva Federal, presionaron a los legisladores para la rápida aprobación del plan de US$ 700.000 millones diseñado por el secretario del Tesoro y que contempla la compra de activos en poder de las entidades financieras quebradas.
Los demócratas se niegan a concederle "superpoderes" al jefe del Tesoro para que maneje a su "gusto y placer" la multimillonaria suma destinada a estatizar las quiebras privadas del sistema financiero.
Los demócratas insisten que Wall Street también "pague el costo fiscal" que va a caer como una bomba de tiempo sobre el bolsillo de la población estadounidense.

La oposición parlamentaria quiere que el plan no se limite al sector bancario sino que incluya también a las familias que han sido víctimas de la crisis del crédito y exige medidas de reactivación económica que ya habían propuesto a Bush y que éste rechazó.



Desde la semana pasada, la Fed inyectó más de US$ 170.000 millones en dinero fresco ante la falta de liquidez. La crisis llevó a la quiebra del ícono de Wall Street Lehman Brothers y al borde de la bancarrota a otras instituciones, que debieron ser vendidas o rescatadas en última instancia.
El sistema financiero estadounidense saltó de una crisis a otra la semana pasada, que comenzó con la quiebra del banco de inversiones Lehman Brothers por US$ 600.000 millones y la absorción de su competidora Merrill Lynch por el Bank of America. Siguió luego el rescate del gigante asegurador AIG por US$ 85.000 millones.
Pero los demócratas, a través de sus líderes y representantes parlamentarios más destacados, ya advirtieron que no piensan firmarle un "cheque en blanco" a la administración Bush (que sería como regalarle galardones al republicano McCain en la dura disputa por la Casa Blanca).

Varios legisladores expresaron ya su reticencia ante el plan de rescate. "Me preocupa que no hayamos recibido ninguna prueba creíble de que el plan funcionará", declaró el senador republicano Richard Shelby, de Alabama (sur).
"Podríamos muy bien gastar 700.000 millones de dólares o 700 billones, y no resolver la crisis. Antes de firmar algo de semejante magnitud, quiero saber que hemos agotado todas las soluciones alternativas razonables", explicó, ilustrando el recelo expuesto por otros de sus colegas.
"Que Dios haya creado el mundo en siete días no quiere decir que tengamos que aprobar esta propuesta en siete días". Con estas palabras expresó este martes el senador republicano Joe Barton su escepticismo y el de los senadores de ambos bandos presentes en el Comité de Bancos acerca de la urgencia de las medidas presentadas por las principales autoridades económicas del EEUU en el Congreso.
Los demócratas buscan reforzar el papel de supervisión del Congreso, incluir asistencia a los deudores hipotecarios y modificar las leyes de bancarrota.
"Sería algo sin precedentes dar 700.000 millones de dólares a, virtualmente, un individuo sin ningún tipo de supervisión, transparencia y rendición de cuentas", dijo el lunes el demócrata Christopher Dodd, presidente del Comité de Banca del Senado, en una entrevista con la cadena CBS.

Ese "hombre" es Henry Paulson, el secretario del Tesoro, cuyo plan inicial, de tan sólo dos páginas y media, se reserva la máxima flexibilidad para el uso de los fondos sin ningún tipo de mecanismo de revisión de las decisiones.
"No se trata de quitarle (al secretario del Tesoro Henry Paulson) la oportunidad de actuar. Entendemos completamente la gravedad del momento", dijo el presidente de la junta del Comité de Banca del Senado, el demócrata de Connecticut Chris Dodd, quien añadió: "Pero no se pueden simplemente entregar US$700.000 millones del dinero de los contribuyentes sin insistir en que éstos reciban protección. Vamos a exigir (...) responsabilidad".
Por su parte, John McCain, el candidato presidencial republicano, abogó por un plan que difundió la semana pasada y que prevé la creación de un comité independiente para supervisar el rescate de Wall Street, que podría costar hasta 1 US$ billón.
En su opinión, el secretario del Tesoro, Henry Paulson, tiene demasiado poder en esta crisis.
"Este acuerdo me incomoda profundamente", dijo McCain, senador por Arizona, a un grupo de estadounidenses irlandeses en Scranton, Pensilvania. "Cuando estamos hablando de un billón de dólares de dinero procedente de los impuestos, (la frase) 'confíen en mí' no es suficiente."
Alerta mundial en la ONU
Los gobiernos del mundo reclamaron este martes ante la Asamblea general de la ONU urgentes medidas para evitar que la crisis financiera se globalice y ponga los cimientos de la recesión mundial en un planeta ya castigado por la devastación climática y la crisis alimentaria.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, inauguró la sesión advirtiendo que el mundo enfrenta un "desafío de liderazgo" para lidiar con la tormenta financiera, que se suma a una crisis energética y alimentaria.

"Veo un peligro de naciones mirando más hacia dentro, en lugar de mirar hacia un futuro compartido", dijo Ban a una audiencia de más de 120 jefes de Estado o de gobierno.

El presidente de la Asamblea general, el nicaragüense Miguel d'Escoto advirtió por su parte que "la crisis financiera actual, sumada al encarecimiento de los alimentos y a la devastación humanitaria provocada por fenómenos naturales recurrentes, tendrá serias consecuencias que impedirán avances significativos -si es que se realizan avances- hacia los Objetivos del Milenio (OMD)", consistentes en reducir a la mitad la pobreza para el 2015.
Como es tradicional, Brasil fue el país cuyo jefe de Estado habló primero en la tribuna mundial: Luiz Inacio Lula da Silva dedicó buena parte de su discurso a la crisis financiera y la necesidad de que cada país asuma responsabilidades.

"La naturaleza global de esta crisis implica que las soluciones que adoptemos deben ser también globales, y decididas en legítimos y creíbles foros multilaterales, sin imposiciones", advirtió Lula.

"Las instituciones económicas hoy en día no tienen la autoridad ni los instrumentos que necesitan para evitar la anarquía de la especulación. Debemos reconstruirlas sobre bases enteramente nuevas", reclamó Lula.

"Solo acciones decisivas de parte de los gobiernos, especialmente en países que están en el centro de la crisis, podrán controlar el desorden que se extendió a través del sector financiero mundial, con perversos efectos en la vida diaria de millones personas", opinó Lula.
El presidente francés Nicolas Sarkozy propuso incluso una cumbre mundial antes de fin de año para "reflexionar juntos sobre las lecciones a sacar" de la "más grave" crisis financiera desde los años 30.

"Reconstruyamos juntos un capitalismo normal y regulado en el que sectores enteros de la actividad financiera no sean dejados solamente al criterio de los operadores del mercado, donde trabajan los bancos. La función de los bancos es financiar el desarrollo económico, más que la especulación", dijo Sarkozy.
Para intentar tranquilizar al resto del planeta, el presidente norteamericano George W. Bush prometió actuar "con la urgencia requerida".

"Les puedo asegurar que mi administración y nuestro Congreso están trabajando juntos", dijo Bush ante la Asamblea en Nueva York, mientras en Washington los legisladores polemizan contra reloj con el plan de la Casa Blanca y las bolsas se derrumbaban por segunda jornada consecutiva durante esta semana.
En opinión de David Rosenberg, economista en jefe para Norteamérica de Merrill Lynch, el plan de rescate elaborado por la administración estadounidense sólo aliviará provisionalmente la crisis. "No creemos que esto cambie mucho la situación, es decir, que la economía estadounidense está en recesión y probablemente lo siga estando", escribió en una nota titulada "El capitalismo se toma un año sabático".
"En el mejor de los casos, (el plan de rescate) sólo evita lo peor: el derrumbe total del sistema financiero mundial y una profunda recesión planetaria", agregó, y enfatizó que el coste de este plan para Estados Unidos equivale "a lanzarse en una nueva guerra en Irak".


La crisis financiera reconfigura la relación entre Washington y el sector privad

(Por IAR Noticias)

Una ráfaga de medidas el martes prometió extender los tentáculos del gobierno estadounidense en el sector privado, iluminando el modo en que la crisis financiera podría reconfigurar la relación entre el gobierno y la economía.
Por Kara Scanell, Phred Dvorak, Joann Lublin y Elizabeth Williamson -
The Wall Street Journal
Durante una audiencia en el Senado, el presidente de la Comisión de Bolsa y Valores, Christopher Cox, solicitó a Washington que amplíe su supervisión sobre instrumentos financieros exóticos que hasta ahora han sido poco regulados. En carpeta hay una propuesta de los demócratas en el Congreso para permitir que el gobierno establezca límites a las remuneraciones de los ejecutivos y asuma participaciones accionarias en empresas que utilicen un fondo de rescate de US$700.000 millones, en caso que sea aprobado. El candidato presidencial republicano, John McCain, se mostró partidario de la imposición de tales límites salariales.
En su conjunto, estas medidas representan una intervención del gobierno en áreas celosamente protegidas por el sector privado. "Nunca he sido partidario del intervencionismo estatal, pero creo que tenemos una situación sin precedentes que requiere medidas sin precedentes", dijo el Secretario del Tesoro, Henry Paulson, durante una audiencia ante al Comité Bancario del Senado para defender su plan de rescate. "No existe ninguna forma de estabilizar los mercados que no sea la intervención estatal".



De la Reserva Federal, Ben Bernanke, tuvieron una fría recepción en el Congreso el martes, donde fueron bombardeados con preguntas durante cinco horas. "Lo que nos mandaron es inaceptable", dijo tras la audiencia el presidente del Comité de Bancos del Senado, Christopher Dodd (demócrata). "Esto no va a funcionar".
Paulson intentó repetidamente convencer a los legisladores de que él y el gobierno del presidente George W. Bush estaban tomando las medidas necesarias para respaldar a los contribuyentes, quienes podrían enfrentar problemas económicos más graves si los mercados financieros se mantienen obstruidos. "Se trata de los contribuyentes estadounidenses", dijo. "Es todo lo que nos importa".
Pese a sus críticas, los legisladores no indicaron su rechazo a las medidas y las bancadas de los partidos demócrata y republicano lograron avances importantes en materias como el establecimiento de límites a los paquetes de remuneración de los ejecutivos.
De todos modos, la velocidad con la que se han desencadenado los acontecimientos deja sin respuesta muchas preguntas peliagudas sobre cómo el gobierno cumplirá su nuevo rol. Eso ha dado pie a las críticas de quienes quieren preservar la filosofía de no injerencia del gobierno en los asuntos privados que ha imperado en Washington durante décadas.



"¿Acaso queremos que el gobierno posea todo esto?", preguntó Anne Canfield, directora ejecutiva de Consumer Mortgage Coalition, una asociación nacional de acreedores y gestores hipotecarios, refiriéndose a los activos hipotecarios que serían comprados bajo el plan de rescate. "Tienen que gestionar los activos con varios objetivos en mente: mantener a los propietarios en sus casas, estabilizar las comunidades, los mercados hipotecarios y conseguir valor para los contribuyentes".
El papel del gobierno en la economía ni se acerca al que tenía en los años 30, cuando EE.UU. luchaba por dejar atrás la Gran Depresión. De todos modos, el aluvión de rescates e intervenciones lo ha dejado en una posición desconocida en la historia reciente. El gobierno federal, a través del Departamento del Tesoro y la Reserva Federal, ahora controla una gran parte del mercado hipotecario y a AIG, la mayor aseguradora del mundo, y se apresta a gastar US$700.000 millones en valores hipotecarios de compañías financieras atribuladas.
Cox, el presidente de la SEC, tomó ayer la posición más fuerte adoptada por un regulador federal cuando exhortó al Congreso a "proveer un estatuto que regule estos productos". Cox añadió que la falta de supervisión de los seguros contra cesaciones de pagos, conocidos como CDS, constituye "una brecha regulatoria que hay que enfrentar de inmediato".



Se estima que el mercado para estos instrumentos se ha duplicado en apenas dos años para alcanzar los US$62 billones (millones de millones).
La industria ha rechazado con éxito los llamados para una mayor regulación a lo largo de los años, sobretodo porque los productos son negociados entre inversionistas sofisticados. El ex presidente de la Fed, Alan Greenspan, los ha calificado como uno de los instrumentos financieros más importantes que existen.
El Congreso probablemente no dilucidará el tema este año, pero la voluntad política para un cambio parece estar cobrando fuerza. Las declaraciones de Cox se producen después de medidas del Departamento de Seguros de Nueva York para regular los CDS. Paulson, en todo caso, fue más cauteloso ayer. Dijo que los CDS han sido "de extraordinaria utilidad" para permitir que las instituciones cubran sus riesgos. "No es algo tan sencillo como simplemente decir, 'vamos a regularlo'", dijo al Senado.


El Blues del Pánico de Wall Street:El final de la economía de las Blue Chip

(Por IAR Noticias)

En realidad no quedan ya más blue chips. Las empresas más grandes del mundo, como demostró Enron, pueden desaparecer de la noche a la mañana entre una nube de humo. Sino miren a Lehman Brothers. Hoy está aquí y luego, puf, por la mañana se ha esfumado.
Por Dave Lindorff (*) - Revista Sin Permiso
AIG, el paradigma de las empresas Blue Chip (expresión inglesa utilizada para caracterizar a los principales títulos de una Bolsa de Valores – N. del T.), una de las 30 empresas que componen el Dow Jones Industrial Average (índice compuesto por las 30 empresas de mayor capitalización de Estados Unidos, excluyendo las de transporte y de servicios básicos – N. del T.), una empresa que en el año 2000 presumía de una capitalización de 217 mil millones de dólares, lo que la convertía en la mayor institución financiera del mundo, se tambalea al borde del hundimiento. Hoy vale sólo 7 mil millones de dólares, y el futuro de la que hasta hace poco era la mayor empresa aseguradora del mundo pende de un hilo – siendo ese hilo la voluntad que tengan instituciones de Wall Street como Goldman Sachs y Morgan Stanley, las cuales afrontan ellas mismas procesos de re-capitalización, de salir al rescate con 75 mil millones de dólares en nuevos préstamos.

No hace mucho aquellos inversores que desconfiaban de los mercados financieros, o que no querían asumir muchos riesgos, solían destinar sus fondos a las empresas que se suele llamar "blue chips" – empresas que eran consideradas como conservadoras, inversiones tan seguras que podían capear cualquier tormenta. Tenían nombres como AT&T, General Motors, Ford, Boeing… y AIG.

Pues bien, AT&T es una sombra de lo que fue, se habla entre los analistas de que GM y Ford son cadáveres vivientes, Boeing necesita reanimación asistida o, ya que sólo la apuntalan sus contratos militares, más bien "defunción" asistida, y AIG… parece tener ya un pie en la tumba.

En realidad no quedan ya más blue chips. Las empresas más grandes del mundo, como demostró Enron, puedes desaparecer de la noche a la mañana entre una nube de humo. Sino miren a Lehman Brothers. Hoy está aquí y luego, puf, por la mañana se ha esfumado.

En el caso de AIG, si el gigante asegurador se hunde, se puede llevar mucho con él.

En un artículo de hoy en el diario australiano The Australian (el producto insignia de la NewsCorp de Rupert Murdoch y difícilmente sospechoso de connivencias marxistas) se decía lo siguiente:

Si los esfuerzos de última hora de la Reserva Federal norteamericana no logran dar un respiro a AIG, los daños en cascada provocados por las sub-prime habrán ido destrozando poco a poco a los mercados financieros hasta un punto mucho peor que en el legendario cataclismo financiero de 1987.

Y una vez en ese escenario, los gobiernos y los reguladores de los mercados financieros por igual deberán plantearse lo que hasta hace poco era impensable: ¿estamos yendo hacia algo comparable a lo de 1929?

Entonces, ¿qué deben hacer los atormentados inversores? Es claro que no hay ningún puerto seguro en el mercado bursátil, el cual podría mañana mismo desplomarse tranquilamente un 40 o un 70% así como subir un 3%. Los bonos no tienen mucha mejor pinta. Puede que sean más estables que las acciones, pero no si la empresa que los emite quiebra. En ese caso se convierten en pedacitos de papel sin valor alguno, parecidos a las participaciones de Fannie Mae que ahora se usan para envolver regalos. Las agencias de certificación, como Standard&Poors y Moody's, si bien siguen con su habitual timidez a la hora de devaluar a una gran entidad empresarial, hoy han rebajado discretamente la calificación de la deuda de AIG en dos grados, lo cuál es su forma de dar a entender que si tú eres uno de los propietarios de los bonos de AIG, tienes bastantes más posibilidades de acabar perdiendo hasta la camisa.

No son sólo los inversores los que deberían estar asustados. Aquellas personas que han optado por proteger a sus familias comprando pólizas de seguro de vida, o que han tratado de proveerse de una fuente de ingresos para su jubilación comprando anualidades de AIG, deberían estar preocupados de si la empresa seguirá allí cuando llegue el momento de que ellos o sus beneficiarios necesiten recibir los pagos. No hay duda de que los distintos estados, quienes en EEUU son los responsables de legislar sobre la industria aseguradora, en la mayoría de casos han establecido fondos de reserva para cubrir a los asegurados, pero así como el FDIC (entidad reguladora de los Estados Unidos que administra los seguros sobre depósitos bancarios – N. del T.) sólo asegura depósitos bancarios hasta los 100.000 dólares, estos fondos en general sólo cubren los primeros 100.000 dólares del seguro o de la anualidad como importe rescatado en efectivo, o 300.000 dólares en forma de algún tipo de renta. Pero estos fondos de garantía se diseñaron para proteger a la gente ante operaciones aseguradoras irresponsables; son patéticamente impotentes ante problemas de la escala de AIG.


AIG es un gigante del mundo de los seguros de tal envergadura que como decía a The Australian un tesorero de la empresa:

"Si se colapsa AIG, entonces no hay industria del seguro en el mundo".

El New York Times, comentando el miedo de la gente de a pie de que cuando llegue el momento no estén disponibles sus seguros o sus pensiones, citaba a un consultor de seguros, Glenn Daily, quién decía que determinado cliente de AIG estaba intentando conseguir prestado lo máximo usando como garantía su seguro de vida, para colocar por ahí ese dinero hasta que pase la crisis de AIG. Pero añadía sombríamente que "si todo el mundo hace esto, es posible que la empresa haga aguas".

Pero de hecho, es peor que eso. Como escribía hoy en un artículo de opinión del New York Times Michael Lewitt, un gestor financiero afincado en Florida, AIG es un actor clave en el mercado de derivados de crédito, que mueve 60 billones (sí, ¡con "b" de billones!) de dólares, un espacio enorme, internacional y altamente desregulado donde operan los fondos de cobertura (hedge funds), y cuyo colapso dejaría al Crash del 29 como un simple tropiezo.

Así que eso es a lo que nos abocamos. No hay refugios en las blue chip debido al creciente desastre en que se ha convertido la economía estadounidense. Y no hay un rescate sencillo – de hecho, se ha postulado que el Secretario del Tesoro Henry Paulson dejó caer a Lehman Brothers precisamente porqué sabía que iba a necesitar todos los recursos que le quedan al Tesoro para tratar de mantener viva a AIG. Se trata de un castillo de cartas frágil e interconectado, apuntalado por una cierta fe residual de los inversores normales quienes, al menos hasta el momento, siguen creyendo que hay una estructura coherente detrás. A medida que va cayendo carta tras carta ese desvencijado edificio – primero Bear Stearns, después IndyMac Bank, luego Fannie Mae y Freddie Mac, Lehman Brothers, ahora tal vez AIG y Washington Mutual, una gran entidad bancaria que está a las puertas de la muerte – llegará un momento en el que esos inversores y ahora también los poseedores de seguros, puede que decidan coger su dinero e irse a casa, de modo que todo el tinglado se vendrá ruidosamente abajo.

Las buenas noticias son que si se colapsa la economía de EEUU, el granjero pastún del noreste de Pakistán, el tendero iraquí de Fallujah, el obrero iraní de Teherán y el campesino de Venezuela ya no tendrán que preocuparse de bombardeos ni temer que sus hijos caigan bajo las balas de la ametralladora de un helicóptero de los EEUU. Los EEUU se habrán quedado ya sin fondos para pagar esas guerras en el exterior. Y ya que un colapso de la capacidad adquisitiva de los consumidores norteamericanos traería también una prolongada recesión para el resto del mundo, tal vez, como en los años 30 del pasado siglo, puede que podamos ver una reducción importante en las emisiones de CO2 de coches, fábricas y centrales térmicas de modo que la catástrofe global debida al calentamiento que nos amenaza a todos nosotros pueda ser significativamente retrasada, dando tiempo a la humanidad para llevar a cabo una estrategia a largo plazo suficientemente seria.

Super rescate en Wall Street: ¿funcionará?

(Por IAR Noticias)

Muchas preguntas abrió el paquete de rescate propuesto por la administración Bush al Congreso el fin de semana pasado. Más allá del costo real de la operación de salvamento, el plan no contiene detalles sobre la valuación de los activos que serían adquiridos o sobre las generosas compensaciones de ejecutivos de empresas que serán rescatadas.
Por Alejandro Nadal - La Jornada, México
El aspecto más alarmante del plan es que daría poderes amplísimos al secretario del Tesoro. La sección octava contiene una salvaguarda excepcional: las decisiones del secretario no podrán ser revisadas por ningún tribunal o agencia administrativa. Así, Paulson tendría facultades ilimitadas para hacer todo tipo de arreglos para limpiar las cuentas sucias de Wall Street, usando 700 mil millones de dólares (mmdd) de los causantes a puertas cerradas. Probablemente todo eso es inconstitucional, pero revela algo alarmante de un plan que ha fabricado una administración famosa por su cinismo y capacidad para mentir.

Las reformas planteadas por los demócratas son compatibles con lo esencial de la solicitud de la Casa Blanca. Pero eso no es suficiente para la voracidad de los financieros. Las propuestas demócratas incluyen la adquisición de acciones en las instituciones “rescatadas”, las limitaciones a las gigantescas compensaciones de los altos ejecutivos y la posibilidad de que los contratos hipotecarios sean modificados por jueces. Esos cambios ponen a temblar al sector financiero, pero, si es el precio a pagar, los aceptarán.


Entonces la pregunta es si el plan de rescate podría funcionar. En el corto plazo es posible que pueda calmar el pánico y evitar corridas sobre algunos bancos regionales. Pero el plan no va a detener la recesión en la que ya se sumerge la economía estadounidense. Las cifras sobre ritmo de actividad, inversiones y desempleo así lo confirman. Y el desplome en el precio de activos residenciales agrava las cosas al deprimir el consumo, que es el principal componente del PIB (alcanza 70 por ciento, mientras la inversión es apenas 20 por ciento).

La recesión va a ser larga y profunda: probablemente se prolongará hasta finales de 2009. Y como un menor ritmo de actividad implica menores ingresos fiscales, el de por sí abultado déficit fiscal va a rebasar los pronósticos oficiales. Para 2009 se planea un déficit fiscal de unos 482 mmdd, sin contar el costo de las guerras en Irak y Afganistán (otros 520 mmdd). Así que con los 700 mmdd del paquete de rescate, el boquete fiscal que la administración Bush heredará a su sucesor adquiere dimensiones colosales, quizás incontrolables. Para fines de 2009 el déficit fiscal real puede superar 7 por ciento del PIB, lo que comprometerá durante años la política fiscal de los sucesores de Bush en la Casa Blanca.

El paquete de rescate tampoco podrá revertir la tendencia secular en la declinación del dólar como moneda de reserva mundial. En estos días de debate en el Congreso los precios de los productos básicos (commodities) han ido en aumento y el dólar sufrió un descenso importante frente a otras divisas. Todo eso implica mayor presión inflacionaria, precisamente en momentos en que la Reserva Federal no puede aumentar la tasa de interés so pena de profundizar la crisis y agravar el descalabro del sistema bancario. Es evidente que el dólar saldrá mal parado de esta crisis y el plan de salvamento de la Casa Blanca no sólo no alterará este estado de cosas, sino que lo puede empeorar.

El desenlace final no puede evitarse: Estados Unidos perderá la capacidad de financiar su déficit externo con un dólar considerado medio de pago y reserva mundial. Eso quiere decir que Estados Unidos ya no podrá empacharse de deuda como hizo en el pasado por una simple y sencilla razón: la credibilidad del resto del mundo en su moneda no será la misma. Si quiere seguir siendo un buen sujeto de crédito para el resto del mundo, tendrá que poner su casa en orden. Entre otras cosas, deberá corregir sus déficit gemelos y reformar el marco regulatorio de su sector financiero.

En el corto plazo deberá colocar un entramado institucional y regulatorio diferente para el componente no bancario del sistema financiero. Es absurdo mantener la bursatilización explosiva, la proliferación de derivados y el florecimiento descontrolado de los fondos de riesgo (hedge funds) como si nada hubiera pasado. Dejar todo esto sin cambios es uno de los defectos más fuertes del paquete de súper rescate.

Sin reformas significativas en el marco regulatorio de su sistema financiero, la credibilidad del resto del mundo en la economía estadounidense se vendrá al suelo y la capacidad de ese país para seguir siendo sujeto de crédito se reducirá sensiblemente. En esas condiciones, esta crisis se traduciría en un estancamiento en el nivel de vida de la población. Junto con la marcada desigualdad que impera en Estados Unidos, eso podría ser un factor de cambio político de primer orden.

¿Recesión global, crash del dólar e incumplimiento de pagos en EEUU?

(Por IAR Noticias)

Una de las consecuencias en el reajuste geopolítico del tsunami financiero en curso ha sido el espectacular acercamiento estratégico de China con Japón (People’s Daily, 22/09/08), lo cual beneficiará al yen nipón en detrimento del dólar e intentará minimizar el daño las pletóricas reservas de divisas del Banco del Pueblo de China.
Por Alfredo Jalife-Rahme - La Jornada, México
Un autor anónimo que se presenta en China Daily (19/09/09) como “director del Centro de Estudios de Seguridad Económica de los Institutos Chinos de Relaciones Internacionales Contemporáneas” comenta que “desafortunadamente las medidas de emergencia de EU, la Unión Europea (UE) y Japón alivian temporalmente (sic) la tensión en los mercados financieros” y expone las “reservas agotadas (¡súper sic!) del Tesoro de EU”, así como el “efecto dominó” de las quiebras.
Stephen Roach, jefe en Asia de la atribulada Morgan Stanley, realiza la “anatomía de la pulverización”. Por cierto, Roach fue uno de los principales previsores de las graves fallas de la Reserva Federal en la fase terminal del hoy universalmente vilipendiado Alan Greenspan, pero luego se equivocó rotundamente al darle demasiado crédito a las medidas preventivas de Ben Shalon Bernanke.



Desde su radar inigualable, tanto en Asia como en su atribulado banco (del que acaba de adquirir 20 por ciento el grupo financiero japonés Mitsubishi UFJ), aborda la próxima secuencia financiera y sus repercusiones económicas. Afirma que el crecimiento del PIB global, que promedió 5 por ciento de 2004 hasta 2007, se encamina a 3.5 por ciento que juzga “alejado del desastre”.
Aquí exhibe su primera contradicción cuando considera que el sistema financiero de EU “se encuentra fuera de control”. ¿Cómo puede un sistema descontrolado e incontrolable encontrarse “alejado del desastre”? No estamos incitando al desastre, pero es pertinente tener en el radar mental tal escenario indeseable, aunque sea como remota posibilidad.



Lo interesante de la secuencia de Stephen Roach, desde su perspectiva indomable sobre la vigencia de la globalización, es que marca el piso de los sucesos por venir en “tres fases distintas del proceso de ajuste”, en la interacción “entre los mercados financieros y la economía real”.
Su primera fase desmenuza la crisis crediticia: considera que el proceso de deglución de la mala deuda anda avanzado en 65 por ciento, lo que nos parece demasiado hiperoptimista, cuando lo peor está por ocurrir. Es probable que el sesgo de su análisis financiero provenga de su cargo.
Su segunda fase diagnostica la economía estadounidense: aduce correctamente que el “evento mayúsculo es la capitulación (sic) de los consumidores de EU”, sobrendeudados y cortos de ingresos, que habían llevado el frenesí consumista a 72 por ciento de su PIB. Considera que los ajustes en la economía de EU van apenas en 20 por ciento.

La tercera fase versa sobre la economía global y sus vínculos con EU: la manufactura de China y Japón ha empezado a reducir sus embarcaciones a EU, cuyas reverberaciones han golpeado a la UE. Recuerda que las exportaciones asiáticas, 45 por ciento del PIB regional en 2007, redundaron en su acelerado crecimiento que se volvió dependiente de la demanda externa en la que el consumidor de EU era el rey. Después de dos años de un crecimiento a 12 por ciento del PIB, China se desaceleró a 10.1 por ciento en el segundo trimestre de este año, mientras se han debilitado las economías de Japón y Europa que “representan colectivamente 30 por ciento del total de las exportaciones de China”.
Vaticina para el año entrante otra caída del PIB chino a 8 por ciento. Como se nota, Stephen Roach es más realista en economía que en finanzas y la caída de 4 por ciento del PIB chino en un lapso de dos años afectará notablemente la demanda del mercado de las materias primas (aunque no necesariamente su cotización, debido al desplome del dólar).
Juzga que la economía de Japón es todavía “más precaria”, ya que su economía se ha estancado a 2 por ciento en los años recientes, lo que hace probable una recaída en recesión. Se desprende que China exhibe un “inmenso colchón”, pese a todo.
Stephen Roach no pierde su entusiasmo por la globalización a la que señala como la causal del auge global, en particular el asiático de 2002 a la mitad de 2007. Nada más que ahora la “conectividad” está golpeando en la cabeza asiática.
Llama la atención el común denominador de la disminución de 2 por ciento del crecimiento global que Roach aplica indistintamente en los cuatro principales motores de la economía mundial (EU, UE, China y Japón) y ni siquiera se toma la molestia de escudriñar a los otros tres gigantes del BRIC, es decir, a Brasil, Rusia e India, ya no se diga a la despreciada Latinoamérica, a la que, por cierto, la Cepal vaticina un crecimiento de 6 por ciento, con la notable excepción de la mediocridad del “México calderonista” en plena degradación. ¿Y qué tal si el PIB global, al contrario del diagnóstico sesgado de Stephen Roach, disminuye mucho más, abajo del umbral de 3 por ciento que el Fondo Monetario Internacional define como “recesión global”, cuando el tsunami financiero apenas se encuentra en su fase preliminar?
Mientras el locuaz Jaques Attali, ex director del Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo, augura una guerra inevitable como reajuste geopolítico a las turbulencia financieras globales, existen otros analistas a quienes por lo menos habría que tomarse la molestia de escuchar, por más sombrías que fuesen sus conclusiones.
John Taylor, presidente de la empresa neoyorquina International Foreign Exchange Concepts, la mayor firma de hedge-funds (fondos de cobertura de riesgos) de divisas del mundo, pronostica que el rescate colosal del gobierno bushiano “aplastará la cotización del dólar” (Yvette Essen, The Daily Telegraph, 21/09/08), escenario al que se adhiere Tim Bond, de Barclays Capital, quien vislumbra el “riesgo de una mayor inflación” (The Times, 21/09/08).

Después de exponer la transferencia de riqueza al BRIC y a las petromonarquías (nota: la tesis de Bajo la Lupa), Roger Cohen aborda el “despellejamiento (sic) de EU” y reporta una charla con el representante Barney Frank, jefe del Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes, quien confiesa que EU cesó de ser “el poder mundial dominante” (IHT, 21/09/08). ¡Como si no lo supiéramos!
Liam Halligan, jefe de los economistas de la londinense Prosperity Capital Management, considera que la inundación de liquidez por el gobierno bushiano no ha tenido efecto en las “tasas interbancarias de largo plazo que han permanecido neciamente (sic) altas”, lo que en su conjunto puede desembocar en el “incumplimiento de pagos” (¡súper sic!) de EU, lo que ha cesado de ser un escenario “impensable” (The Daily Telegraph, 21/09/08). ¿Quién va a rescatar ahora a la Reserva Federal y a la Secretaría del Tesoro de EU?.

Mientras la economía mundial se derrumba: La fortuna de los ricos duplica el PBI mundial

(Por IAR Noticias)

Los números y las estadísticas prueban cada vez más que en el sistema capitalista (normatizado como "modelo único" a escala global) lo que resulta "crisis" y achicamiento del consumo para las mayorías, es sinónimo de poder de consumo y de acumulación de riqueza para las minorías privilegiadas que detentan el control económico-financiero a escala global.
De esta manera, mientras el proceso inflacionario-recesivo desatado desde las economías centrales (EEUU y Europa) ya genera pobreza y devaluación acentuada del poder adquisitivo de las mayorías a escala planetaria, un selecto grupo de mega-empresas y multimillonarios multiplican a escala sideral su activos empresariales y sus fortunas personales.
Los "súper-ricos", ejecutivos y accionistas de los grupos capitalistas que se reparten el mundo como si fuera un pastel, los que aparecen habitualmente retratados en los ranking del jet set decadente, conforman el resultante final de un proceso de acumulación de riqueza en pocas manos a costa de la crisis mundial y del achicamiento progresivo de la participación de las mayorías en el proceso de reparto de la producción mundial.
Mientras la economía mundial ya ingresó en un proceso inflacionario-recesivo que impacta en la suba de los alimentos y del costo de vida de amplias capas de la sociedad mundial (sobre todo de las más vulnerables y desprotegidas) bancos, empresas trasnacionales, (sobre todo petroleras) registran balances de ganancias descomunales superiores al presupuesto y al PBI de decenas de países de la periferia juntos.

En el año 2007, 500 multimillonarios sumaban una fortuna de casi tres billones de dólares, una cifra equivalente al presupuesto anual de EEUU, la mayor potencia imperialista del planeta, y a decenas de PBI (producción del pastel) anuales de países dependientes.
Si quiere saber cuantas tajadas del pastel de la producción mundial se robaron esos multimillonarios, divida el PBI mundial por el total de población mundial, luego de comprobar cuanto le tocaría a cada poblador mundial en un reparto equitativo del PBI, réstele a la fortuna de un súper-rico de la pirámide: Lo que le sobra (al multimillonario) de la parte que en realidad le tocaba, es el producido del robo capitalista.
Si se quiere saber cuanto se roban el conjunto (los multimillonarios) hay que hacer la misma operación agregando la cantidad de súper-millonarios existentes.
La prensa internacional (del sistema), sus periodistas y comentadores, difunden estas cifras, impresionantes y fantásticas, destilando una rara mezcla entre admiración y envidia por no estar en el lugar de los rankeados, a los que consideran personas tocadas por la "varita mágica" del éxito y el prestigio social.
Este viernes, la prensa internacional informa, sin más comentarios, y sin analizar el resultante y el impacto social que produce la acumulación de riqueza en pocas manos, que las fortunas personales crecieron a niveles récord el año pasado.

Pese a la crisis económica-financiera mundial y la crisis social que genera la suba de precios de los alimentos y de la energía, las riquezas personales en todo el mundo crecieron un 5 por ciento a US$ 109,5 billones, según un informe sobre "riqueza mundial publicado el jueves por Boston Consulting Group (BCG).
Para ilustrar lo que afirmábamos al principio (el macro-robo capitalista del producido mundial) hay que señalar que la cifra acumulada, según el informe, de US$ 109,5 billones de riqueza acumulada en manos de los "millonarios" (con las súper-fortunas en la cima) se aproxima a casi dos veces el PBI mundial (la riqueza anual producida por todos los países) que ronda en los US$ 70 billones.

Pero, para dar una mejor idea de lo que significa, en términos de comparación, esta cifra de US$ 109,5 billones, hay que puntualizar que equivale a casi dos veces y media el PBI anual de EEUU y la Unión Europea, las dos potencias económicas centrales que concentran más del 60% de la producción mundial.
Esa masa increíble de dinero acumulada por una minoría de "población rica" (regida en el vértice de la pirámide por los súper-ricos) es lo que le falta a los más de mil millones de personas que "sobreviven" con un promedio de un dólar diario, según el Banco Mundial y otras instituciones del sistema, y más de tres mil millones que no alcanza a cubrir el parámetro de necesidades básicas, medidas por alimentación, vivienda y salud.
Más que ningún análisis estructural, esa cifra acumulada muestra el irracionalismo demencial (y caníbal de su propia especie) del sistema capitalista legitimado como "sistema único" al que ya nadie cuestiona ni analiza, salvo los medios alternativos y de contrainformación que solo existimos minoritariamente en la Internet.
Según el informe de Boston Consulting Group, más bajo de la pirámide de los "súper-ricos" el 1 por ciento de los hogares poseía un 35 por ciento de la riqueza mundial el año pasado.
El 0,001 por ciento más pudiente, los hogares que tienen al menos US$ 5 millones (unos 3,45 millones de euros) en activos, acumulaban US$ 21 billones de dólares (se trata de los sectores sociales de clase media rica, que obran a modo de "colchón" entre el vértice de los "multimillonarios" y la base mayoritararia de la pirámide del sistema capitalista compuesta por los sectores pobres o de menor capacidad de consumo).
El crecimiento más rápido -según el informe- se produjo entre sectorees sociales de las regiones en desarrollo, como China y los estados del Golfo Pérsico, y entre familias que "ya eran ricas". El mayor salto en 2007 se produjo en países emergentes de Asia y Latinoamérica (China y los países exportadores de materias primas y petróleo).

El informe destaca que la riqueza también que la riqueza se concentra cada vez más entre los más ricos (el vértice de la pirámide).

El número total de "hogares millonarios" creció un 11 por ciento, a 10,7 millones el año pasado, señala el informe.
En ese sentido, la riqueza creció con mayor fuerza en Asia, la cuenca del Pacífico -excluido Japón- y Latinoamérica, con un aumento del 14 por ciento. Esta franja representa el eje del centro exportador-importador de materias primas y manufactura del "modelo económico" vigente a escala global.
Además, la mayoría de las súper-fortunas provienen de "negocios" relacionados con la finanzas, el "espectáculo", el deporte, la "cultura", las grandes producciones de Hollywood, las grandes cadenas de diarios, radio y televisión, la moda y los cantantes "fashion", y en general todo lo que "divierte y entretiene" a los televidentes y espectadores de todo el mundo, mientras las mayorías del planeta se margina cada vez más del "circuito" laboral y comercial del sistema.
Esta concentración de riqueza en pocas manos que "nadie ve", expresada brutalmente en el ranking de multimillonarios de Forbes, o en el listado de ganancias y facturación de las trasnacionales y bancos capitalistas que controlan las acciones y los índices de Wall Street y de las principales plazas financieras mundiales , está ahí, al alcance de nuestras narices.
No es la resultante de la "brecha entre ricos y pobres" como sostienen los curas y los encuestadores, sino el emergente descarnado y real de la explotación del hombre por el hombre del sistema capitalista que ha tocado niveles de impunidad nunca vistos en la historia de humanidad.
El crecimiento desmesurado de las "fortunas personales" está determinada por la concentración del capital mundial en mega-grupos o mega-compañías, comerciales, industriales y financieras con facturaciones y ganancias superiores al PBI de decenas de naciones subdesarrolladas.
Los grupos controladores del "dinero sin fronteras" de la era de la globalización (los hacedores de las "fortunas personales"), no más de 200 empresas y bancos multinacionales, dictan y condicionan la política mundial y el comportamiento de gobiernos, ejércitos, o instituciones mundiales oficiales o privadas.
Son los amos invisibles del Planeta: los que manejan a los países y a presidentes por control remoto, como si fueran títeres de última generación.
Pero, y así como los "mega-ricos" que generan se agrupan en la punta de la pirámide de concentración de riqueza, las mega-empresas que controlan el mundo se concentran en Wall Street, la catedral financiera del sistema capitalista a escala global



El "récord" del índice Dow Jones (que reparte la mas formidable tajada de rentabilidad capitalista con la especulación financiera, aún en épocas de crisis como la que vivimos) lo integran un reducido número de empresas transnacionales de dimensiones gigantescas, mayores que Estados, que controlan la producción, el comercio y las finanzas mundiales.
Entre las primeras treinta megaempresas imperialistas que controlan el sistema económico productivo mundial y que conforman el Dow Jones se encuentran:

3M Company, Alcoa, Altria Group, American International Group, American Express, AT & T, Boeing Co (armamentista) , Caterpillar, Citigroup, Coca Cola, Dupont, Exxon Mobil (petrolera) , General Electric, General Motors, Hewlett Packard, Home Depot, Honeywell, IBM, Intel Corporation, Johnson & Johnson, JP Morgan Chase, McDonalds, Merck & Co, Microsoft, Pfizer Inc, Procter & Gamble, United Technologies, Verizon, Wal-Mart Stores, Walt Disney.
La hegemonía de Wall Street sobre los "mercados mundiales", significa el dominio abrumador y las superganancias de un reducido número de empresas "cotizantes" de dimensiones gigantescas, mayores que Estados, sobre la producción, el comercio y las finanzas mundiales.
Eso, y no la "natural" brecha entre ricos y pobres es lo que determina la polea de crecimiento desmesurado de la "riqueza personal" de los multimillonarios diseminados por el mapa del capitalismo "globalizado".
Las comparaciones numéricas de las cifras de riqueza concentrada en pocas manos con la pobreza y la marginación humana extendida masivamente por todo el planeta, son infinitas, y ponen al descubierto, más que ninguna imagen o palabra, la verdadera naturaleza del sistema capitalista instalado como "única civilización" posible en el mundo.
Ya no se necesitan pensadores, ni filósofos, ni científicos ni expertos en nada para "ver" en acción la obra devastadora y genocida del capitalismo: Basta con consultar el ránking Forbes, o el activo patrimonial y el ránking ganancial de las trasnacionales en cualquier medio especializado.
Los medios del sistema (adoradores confesos del "éxito" de los multimillonarios) alteran la comprensión (la relación riqueza en pocas manos= pobreza en muchas manos) publicando los porcentuales y las cifras de riqueza sin asociarlos con el impacto social devastador que general como contrapartida.
Y eso llevó a que (por ignorancia inducida por manipulación), el sistema capitalista se haya convertido en un "orden natural" incuestionable, como Dios.

Economía-EEUU: Expertos recomiendan comprar menos balas
(Por IAR Noticias)

Mientras Estados Unidos enfrenta la mayor crisis financiera de las últimas décadas, expertos reclamaron cambios sustanciales en la forma en que Washington gasta dinero para proteger su seguridad nacional.
Por Jim Lobe - IPS
Los especialistas, convocados por el centroizquierdista Instituto para Estudios de Políticas (IPS, por sus siglas en inglés) y el centro de estudios Política Exterior en Foco (FPIF), reiteraron el lunes el pedido de que se adopte un "presupuesto de seguridad unificado".

A través de él, se incrementaría el gasto destinado a la diplomacia internacional y la seguridad interna, al tiempo que se recortaría el actual presupuesto del Departamento (ministerio) de Defensa, que se ubica en torno al medio billón de dólares.

Esa suma, que no incluye los 15.000 millones de dólares mensuales que se gastan en las guerras de Afganistán e Iraq, se incrementará el próximo año en alrededor de 40.000 millones de dólares, más que lo destinado anualmente para el funcionamiento del Departamento de Estado (cancillería).

El informe de los expertos destaca que actualmente Estados Unidos gasta en programas militares 16 dólares por cada dólar que destina a iniciativas diplomáticas. Esa proporción se incrementará a 18 a uno en 2009, cuando el presupuesto de defensa llegará a casi 540.000 millones de dólares.

Al mismo tiempo, los recursos del Departamento de Estado se ubicarán algo por debajo de los 40.000 millones de dólares y el 20 por ciento de ese total se destinará a asistencia militar y de seguridad al exterior.

Paradójicamente, altos funcionarios del gobierno, como el secretario (ministro) de Defensa, Robert Gates, han criticado ese creciente desequilibrio, aunque al mismo tiempo apoyan el incremento del gasto militar.

"Es necesario un dramático aumento en el gasto destinado a los instrumentos civiles de la seguridad nacional", dijo Gates en noviembre de 2007.

Pero el gobierno del presidente George W. Bush no ha incluido en el presupuesto nacional para 2009 un aumento significativo de recursos para el Departamento de Estado.

"Gates ha empeorado las cosas en el último presupuesto del que será oficialmente responsable", dijo Miriam Pemberton, del IPS, coautora del informe junto con Lawrence Korb, asociado del no gubernamental Centro para el Progreso Estadounidense.

A causa de la grave crisis financiera, y el plan gubernamental de rescate de bancos que demandará 700.000 millones de dólares, es improbable que el Congreso legislativo aumente los fondos para acciones diplomáticas o de ayuda al exterior si no encuentra formas de reducir el gasto en otras áreas.

La idea del "presupuesto unificado" es facilitar esas reasignaciones de recursos, incorporando en un único instrumento los fondos para gasto militar, seguridad interna, diplomacia, ayuda al exterior y acciones de mantenimiento de la paz.

Históricamente, los recursos para los presupuestos de los departamentos de Defensa, Estado y Seguridad Interior se tramitaron en forma separada en el Congreso legislativo, lo que permitió a los cabilderos de las fuerzas armadas y las industrias militares ejercer su desproporcionada influencia.

La idea de que el "presupuesto unificado" puede ser útil para la reasignación de recursos entre las tres áreas ha ganado apoyo en los últimos años.

Un grupo de 50 generales y almirantes retirados reclamó "una modificación en el énfasis de la política exterior estadounidense, de un enfoque que se basa fuertemente en el poder militar hacia otro que privilegie el valor de la diplomacia y el desarrollo".

Asimismo, una comisión nombrada por Bush para formular recomendaciones sobre ayuda al exterior reclamó en diciembre la creación de un "presupuesto de seguridad nacional", combinando los recursos de los departamentos de Defensa y Estado. Los de este último se deberían incrementar en 10 por ciento, mientras que los niveles de asistencia al exterior se duplicarían.

El analista de inteligencia Thomas Fingar advirtió este mes que el poder militar estadounidense será el activo "menos significativo" para extender la influencia de Washington en el mundo.

El informe del grupo de expertos propone un recorte de 61.000 millones de dólares en los programas militares en 2009, incluyendo 25.000 millones que se ahorrarían reduciendo el arsenal nuclear estadounidense.

También recomienda limitar el programa de defensa misilística a sus aspectos de investigación, en lugar del despliegue de esas armas, e interrumpir las iniciativas que podrían contribuir a una carrera armamentista en el espacio.

Otros 24.000 millones de dólares podrían recortarse limitando o abandonando la investigación, desarrollo y producción de algunas armas de alta tecnología, como los submarinos clase Virginia y los misiles nucleares Trident II, que han recibido críticas incluso de los militares.

Ese dinero podría ser destinado a programas defensivos o preventivos, como la ayuda al exterior y las misiones de paz. El informe señala que si se cancela la construcción de los submarinos clase Virginia, los 850 millones de dólares previstos con ese fin servirían para pagar las deudas de Estados Unidos con la Organización de las Naciones Unidas y otras instituciones internacionales.

El Imperio del dólar en crisis
Las redes funcionales del capitalismo financiero: Cómo se llegó al colapso

(Por IAR Noticias)

Al contrario de lo que pregonan los analistas y autoridades del sistema, el colapso económico-financiero, originado en EEUU, y que ya se proyecta a las economías centrales y periféricas a escala global, no se trata de una "falla de las normas de regulación y control financiero", sino de una reestructuración económica-financiera global impulsada por la dinámica histórica de concentración del capital en pocas manos.



Este proceso (donde se aprovechan tanto las "burbujas" como las "crisis" para generar rentabilidad capitalista) permite la consolidación de un puñado de conglomerados financieros globales "ganadores" de la crisis que se degluten a las instituciones quebradas mediante compras o fusiones forzadas.
No se trata (como quieren hacer creer las autoridades del sistema) de una "crisis involuntaria" sino de un proceso inducido de acumulación capitalista a través de la especulación financiera que terminó (como efecto no deseado) impactando en las variables de la economía real con las sociedades (sobre todo las más desprotegidas) pagando el costo del nuevo proceso de acumulación capitalista.


A) La red global

Imaginemos al sistema capitalista "globalizado" como una gran red tejida en los cuatro puntos cardinales del planeta, desde el Este al Oeste y del polo Norte al polo Sur.
Luego imaginemos las líneas (económicas-financieras-tecnológicas) de esa red convergiendo en dos puntos terminales: EEUU y Europa.
Una gigantesca telaraña de más de doscientos países, con sus correspondientes sistemas económicos productivos y sociedades de consumo nivelados en un mismo marco operativo y en un mismo "programa capitalista" y convergiendo en un centro geográfico imperial: Las metrópolis imperiales (los centros comerciales-financieros) de EEUU y la Unión Europea.
La existencia de esta red (fácil de comprobar investigando los sistemas económicos-productivos-financieros y los comercios exteriores de los países centrales y periféricos) se superpone a cualquier teoría macroeconómica o calificación "filosófica" a priori del sistema capitalista de la era de las computadoras.
Todo lo que sucede en la red planetaria del "capitalismo globalizado" se programa y nivela planetariamente desde ese centro estratégico (la "computadora madre") desde donde se diseña y exporta (a toda la red) desde "modelos económicos", "modelos jurídicos-institucionales", "modelos militares", hasta "modelos sociales" fundamentados en la ideología de consumo capitalista.


Hasta ahora, luego de la caída de la URSS y el advenimiento del "nuevo orden mundial" en la década pasada, a ese centro del dominio planetario capitalista se lo denominó "Imperio unipolar" (o reinado del Imperio del dólar), con EEUU cumpliendo el rol de "computadora madre" (servidor) y con el resto de las potencias "occidentales" acopladas como "terminales centrales" del sistema.
Fue durante el proceso de reestructuración macroeconómica y financiera (destinado a abrir las fronteras del mundo al capitalismo transnacional), el cual se inició en los primeros años de la década de 1980 y culminó en 1999 (la era de la "revolución bancaria") y cuando el Congreso estadounidense adoptó el Acta de Modernización de los Servicios Financieros durante la administración Clinton, que los conglomerados gigantes de Wall Street consolidaron su dominación financiera global.
De la mano de las "reformas económicas" impuestas planetariamente desde el FMI y la OMC, en la década del 90 en el mundo periférico, los mega-bancos de "inversión", las firmas de brokers, los inversores institucionales y las compañías de seguros podían "invertir" (léase depredar) libremente (exentos de impuestos) en cualquier negocio e integrar completamente sus operaciones financieras en Asia, África o América Latina.



CON LA LLAMADA

doctrina del "Consenso de Washington" fueron destruidos sistemáticamente los Estados nacionales y sus legislaciones protectoras en nombre del "libre mercado" y la "apertura económica". Y -de la mano de las transferencias computarizadas- nació la era del "capitalismo sin fronteras" desde la matriz del sistema financiero imperial con asiento en Wall Street.
El modelo, impulsado en la década del 90 por el llamado Consenso de Washington (un foro en las sombras del lobby sionista de poder mundial), respondía a un nuevo proyecto estratégico de desarrollo y acumulación expansiva del capitalismo financiero transnacional, en la era de las comunicaciones digitales.
La combinación interactiva de las redes informáticas, el sistema satelital y las telecomunicaciones, posibilitaron la era de los mercados informatizados y sin fronteras.
Así nació la era de la globalización financiera. La industria del dinero especulativo en alta escala. El dinero como productor de dinero. Circulando sin barreras. El dinero como un producto en sí mismo. El dinero informático, reproduciéndose a velocidades increíbles a través de los continentes.
Mediante las redes planetarias de transacciones informatizadas (realizadas al segundo y en cualquier escala) el sistema "globalizado e interactivo" del capitalismo transnacionalizado fue nivelado como "único modelo de economía" a escala planetaria.
De esta manera se consumó el proceso de acumulación y concentración capitalista más asombroso de toda la historia. La llamada burbuja financiera o "exuberancia irracional" (el más alto nivel histórico de rentabilidad capitalista), con base territorial y operativa en Wall Street y en las metrópolis financieras de Europa (las terminales centrales de la red).
Destruidas las redes de los "Estados nacionales", "abiertas" sus economías y desmanteladas sus empresas públicas y legislaciones protectoras comenzó la "era del libre mercado" cuyas bases fueron establecidas por la "revolución bancaria" de Clinton (y del Consenso de Washington) en la década del 90.
En un ciclo de reproducción perversa del "dinero por el dinero mismo" (transferencias informatizadas a escala global) la dinámica de los grupos financieros súper-concentrados revela el predominio del capital especulativo (dinero sin fronteras) sobre el productivo, como dato más sobresaliente y distintivo de la llamada "globalización" del sistema capitalista en decadencia.
Como se sabe, y lo destacan una multitud de expertos, EEUU, la locomotora del sistema capitalista "globalizado", ha sustituido a la "economía real" por la "economía bancaria", o sea, ha sustituido a la "economía de los recursos genuinos" (respaldados por la producción) por la "economía de los papeles" (acciones de deuda sin respaldo) circulando por los mercados financieros globales.
A esta era siniestra de la depredación capitalista en alta escala, con base en la especulación financiera nivelada como industria a escala planetaria, se la denominó "Globalización".

En términos reales la "Globalización" no fue otra cosa que la incorporación institucional de los "ex Estados nacionales" como satélites dependientes de la red económica-productiva y financiera al sistema capitalista trasnacional dominante hegemonizado por EEUU y Europa.
Los "Estados nacionales" de Asia, África y América Latina fueron convertidos en "Estados transnacionales" y los países ya no tuvieron vida independiente sino dentro del modelo (la nivelación económica se complementó con la nivelación política, militar y social).
De esta manera, el "Estado nacional" (del capitalismo local) fue sustituido por el "Estado privatizado" al servicio del capitalismo transnacional dentro de un modelo de política y economía nivelados por la ideología de la sociedad de consumo.
Los países periféricos se convirtieron en "economías de enclave" y comenzaron a transferir (a través de la red global) enormes recursos financieros (producto de la depredación económica) a los países centrales.
Estos recursos, finalmente, fueron utilizados para una segunda fase complementaria de explotación y rentabilidad capitalista en alta escala: La especulación financiera sin fronteras a escala planetaria.
Y, como no podía ser de otra manera, en la década del 90, en la catedral imperial de Wall Street nació la "burbuja financiera", o el reinado de la "economía de papel".
Se trató (y se trata todavía) de la máxima abstracción de la rentabilidad capitalista: La reproducción del dinero por el dinero mismo, fijando reglas y dinámicas propias por encima del sistema productivo real.
En un salto cualitativo transformacional inédito, el sistema capitalista, dueño de los Estados (centrales y dependientes) y de sus sistemas económicos productivos, consumó lo que parecía imposible: La creación de una "economía de papel" sin respaldo de la economía real.

B) Los dueños de la red

En el tablero de la especulación y la concentración capitalista a alta escala el dinero durante las crisis financieras (como la que está sucediendo) no se evapora, solamente pasa de unas manos a otras en un mayor nivel de concentración.
De acuerdo con las leyes históricas del capitalismo, para que se produzca la concentración monopólica de la riqueza, debe generarse (a través de la competencia capitalista por el mercado y la rentabilidad ) un proceso de alta circulación de dinero y de ganancias (burbuja), primero, y otro de retracción de ganancias con escasez del dinero circulante (crisis) después.
A estas dos instancias rectoras se agrega, en la era de la globalización, la "regulación darwiniana" del mercado por medio de las "burbujas" (periodos expansivos) y las "crisis" (periodos depresivos), tras las cuales los grupos más poderosos y diversificados (y con mayor control político de la economía a través de los Estados capitalistas) absorben a los grupos más débiles y continúan con una nueva fase del proceso de rentabilidad y concentración de riqueza.
O sea, deben haber "burbujas" y "crisis" financieras, donde unos pierden y otros ganan, y donde los monopolios más súper-concentrados del sistema capitalista se degluten y/o absorben a los menos concentrados (el pez grande se come al chico).
Esta dinámica es la que ha posibilitado la existencia de bancos y trasnacionales (la mayoría abrumante con asiento en Wall Street) que facturan ganancias y tienen activos equivalentes a los presupuestos y al PBI de decenas de países juntos del llamado "mundo periférico" (los "mercados emergentes").
El actual colapso en EEUU posibilita una reestructuración del sistema financiero imperial (nivelado planetariamente) mediante compras de acciones y activos en bancarrota y oleadas de fusiones corporativas, donde el pez más grande (y diversificado) se come al chico, en una dinámica darwinista aplicada en el sector financiero.


Este proceso permite la consolidación de un puñado de conglomerados financieros globales "ganadores" de la crisis que se comen a las instituciones quebradas mediante compras o fusiones forzadas.
Una crisis, es antes que nada un reciclamiento del sistema: Lo que estaba en un casillero, se traslada a otro. Lo que estaba en Merrill Linch se recicló en el tablero contable de Bank Of América que compró a la entidad semiquebrada.
En el actual proceso, los que ya se perfilan como "grandes ganadores" son el Bank of America (que compró a Merril Lynch y se consolida como la mayor institución financiera del mundo) y JP Morgan Chase que acaba de comprar los activos del mayor banco de ahorro y préstamo de EEUU, Washington Mutual, vendidos en subasta después de que la institución fuera intervenida por las autoridades.
A su vez, las "crisis" están impulsadas por grupos que conocen información confidencial del movimiento monetario y de las decisiones de la Reserva Federal de EEUU lo que les permite predecir acontecimientos.
Las quiebras y las bajas accionarias, a su vez, se manejan con rumores e información manipulada (por ejemplo la "quiebra" anticipada de alguna institución) que generan temor y caos en los mercados.
Luego esos grupos, utilizando créditos multimillonarios sin respaldo real (sistema de apalancamiento) compran las acciones de las corporaciones quebradas a precio de ganga como sucedió con Merrill Linch, Washington Mutual, y está por suceder con Lehman Brothers y otros gigantes en "lista de espera".
Estas operaciones de ganancias con las "crisis" y las "burbujas" son controladas por los grupos súper-concentrados sionistas (con central operativa en Wall Street y en las metrópolis europeas) que controlan las redes del sistema capitalista globalizado, cuyas filiales y casas matrices pueden estar en Europa, Asia, o en cualquier continente, pero tienen su terminal en Wall Street.
La información preliminar de los movimientos y decisiones de la Reserva Federal, conforma la materia prima de estas gigantescas operaciones de depredación capitalista a escala planetaria con la especulación financiera que realizan los grupos sionistas súper-concentrados que controlan los resortes básicos del poder económico en el Imperio locomotora del capitalismo.
El complejo entramado de "vasos comunicantes" entre el capitalismo financiero, tecnológico, industrial, de servicios, informático y comunicacional (controlado mayoritariamente por grupos del lobby sionista estadounidense-europeo) revela un grado increíble de concentración, diversificación, e intereses comunes de las megacorporaciones transnacionales que se dividen el planeta como un gran mercado.
Su inserción en el Congreso y en la Casa Blanca, los contactos con la CIA y la inteligencia estadounidense, sus ramificaciones en el Pentágono y en el Complejo Militar Industrial de EEUU, le permite al lobby sionista de Nueva York (el dueño de la red global) tener conocimiento previo de las decisiones de política exterior y de seguridad nacional que influyen en los mercados globales de la red capitalista.
El lobby sionista no está solamente en la Casa Blanca sino que abarca todos los niveles de las operaciones del capitalismo trasnacional, cuyo diseño estratégico está en la cabeza de los grandes charmans y ejecutivos de bancos y consorcios multinacionales que se sientan en el Consenso de Washington y se reparten el planeta como si fuera un pastel.

En la práctica se trata de un poder mundial conformado por una estructura de estrategas y tecnócratas que operan las redes industriales, tecnológicas, militares, financieras y mediáticas del capitalismo trasnacional extendido por los cuatro puntos cardinales del planeta.
Son los dueños de la red: Los que deciden el destino del "capitalismo globalizado".

C) El estallido de la red

Proyectado en secuencia: El "lunes negro" de los mercados globales del 15 de septiembre pasado, que registró el mayor derrumbe de Wall Street desde el 11-S, trasformó la crisis hipotecaria en crisis crediticia e instaló oficialmente la crisis financiera con recesión proyectada desde las economías centrales a los países emergentes y periféricos del sistema capitalista a escala global.
Desde entonces, y ante la impotencia de la Casa Blanca y del establishment del poder estadounidense, la "burbuja financiera" del capitalismo especulador sin fronteras de Wall Street, la reproducción del dinero por el dinero mismo, estalló y se desmorona sobre las mismos cimientos de la red global que inventó.
De esta manera, lo que comenzó como crisis hipotecaria en septiembre de 2007, luego transformada en crisis crediticia y colapso bancario generalizado, hoy ya toca los umbrales de una crisis del sistema capitalista a escala global.
En consecuencia: El cóctel crisis del crédito-caída de la producción-desempleo masivo ya se proyecta como efecto inmediato de la crisis financiera con caída bancaria y derrumbe de bolsas a escala global con epicentro en EEUU y Europa.
Según las primeras autoridades del sistema capi
talista (Reserva Federal USA, BCE, FMI, Banco Mundial; OCDE, G-8) EEUU y las quince naciones de la zona euro, países que en conjunto representan más de la mitad de la economía mundial, o ya están en recesión o enfrentan significativos riesgos de entrar en recesión en los próximos meses.
EEUU y Europa (el corazón del Imperio económico "unipolar") por lo tanto, se han convertido ya en el epicentro de la crisis crediticia emergente del derrumbe globalizado de los mercados que "institucionalizó" en la economía real la multiplicación y potencialización del proceso inflacionario-recesivo en las primeras potencias económicas del sistema.
La crisis que hizo estallar la red financiera global, como fue planteada hasta ahora, viró de lo "financiero" hacia lo "económico-.financiero": Tuvo un epicentro en la crisis hipotecaria de EEUU, se expandió a los mercados financieros globales (subdesarrollados y desarrollados), y ahora ya toca variables estructurales de la "economía real" por medio del proceso desatado por el cóctel suba del petróleo + suba de alimentos = proceso inflacionario, que ya padecen las economías centrales del sistema capitalista: EEUU, Unión Europea y China.

¿Porqué estalló la red?

La filosofía especuladora del "apalancamiento" (una economía virtual montada sobre el crédito y el endeudamiento) estalló cuando la "falta de confianza" de los tenedores de bonos y acciones (el dinero de papel) los llevó a "efectivizarlos" en dinero real.
Allí se destapó la mentira y la falta de respaldo de decenas de billones de dólares transferidos por asentamientos financieros y papeles que, cuando los tenedores quisieron convertirlos en dinero contante y sonante se encontraron con la sorpresa de que el efectivo no estaba donde debería estar: Los bancos.
En resumen, y como resultante del proceso, los tenedores de los bonos subprime "desvalorizados" decidieron venderlos en masa generando un colapso generalizado (de todos los índices y acciones) de los mercados financieros en EEUU, Europa, Asia y América Latina.
Los gigantes bancarios e hipotecarios comenzaron a derrumbarse arrastrando consigo a todo el sistema financiero imperial.
Hay expertos que sostienen que un equivalente billonario a más de un PBI de EEUU y Europa juntos circula en papeles sin respaldo de la "burbuja financiera" que se generó en Wall Street en la década del noventa desparramando ganancia especulativa a escala planetaria.

Las "súper-fortunas" personales, los "súper-activos" empresariales se nutrieron de este macro-robo monumental del capitalismo financiero especulador que inventó una economía paralela: La economía de papel.
Esa economía es la que hoy está estallando junto con los macrobancos y macroempresas que lideraron la depredación capitalista (a través de la red globalizada) y que hoy se encuentran con sus bóvedas sobrecargadas de papeles sin valor: La chatarra de la "burbuja financiera".
En un escenario marcado por el derrumbe bursátil y las quiebras de los gigantes bancarios del Imperio las autoridades monetarias de EEUU y Europa (la "computadora madre") iniciaron el mega rescate de los bancos para evitar que las turbulencias financieras contaminen la economía real y se proyecten por toda la red a escala global.
Hasta ahora (incluido el mega-rescate de la Casa Blanca) los esfuerzos han concluido en un fracaso mientras los países globalizados de la red, en un efecto dominó, comienzan a sentir las consecuencias del colapso financiero imperial en sus economías reales.
Y los expertos y macroeconomistas ya comienzan a barajar alternativas a la "crisis del Imperio del dólar" mientras surge una pregunta de fondo: ¿Podrá sobrevivir el sistema capitalista globalizado sin la hegemonía de EEUU?
Los gigantes financieros
se devoran entre sí

Colapso bancario en EEUU: Quiebra Lehman Brothers y hay alarma mundial

(Por IAR Noticias)

En medio de un proceso recesivo que ya amenaza al sistema capitalista a escala global de acuerdo con las propias proyecciones oficiales de las primeras autoridades mundiales del sistema (Reserva Federal, BCE, FMI, Etc), y de una descomunal debacle económica financiera, que tiene en la crisis bancaria e hipotecaria su principal detonante y verdugo,
el sistema financiero USA recibió otra estocada mortal con el anuncio este domingo de la quiebra de
Lehman Brothers, la cuarta mayor entidad de EEUU y el decano de la especulación financiera en Wall Street.
A su vez, la absorción de Merrill Lynch (otro gigante en quiebra) por
Bank of America ilustra claramente la dinámica de reciclamiento y concentración capitalista durante la crisis, donde el más apto se come al más débil.

El sistema financiero imperial USA volvió a sufrir otro duro golpe este domingo cuando la casa matriz de uno de los principales bancos estadounidenses, Lehman Brothers, anunció que se declarará en bancarrota.



Además, la mayor empresa de corredores bursátiles del mundo, Merrill Lynch, será adquirida por el Bank of America por unos US$50.000 millones, y se informó que la principal aseguradora mundial, American International Group, AIG, está en la búsqueda de US$40.000 millones de fondos de emergencia de la Reserva Federal.

En tanto, y en medio de un contexto de alarma mundial, un grupo de diez bancos internacionales anunció este domingo un programa de préstamos de US$70.000 millones para empresas con problemas y para hacer frente a la crisis de crédito que amenaza la estabilidad del sistema financiero mundial.
Desde el inicio de la crisis subprime, hace más de un año, los gigantes financieros de EEUU (incluidos los europeos) han tenido que depreciar sus activos y reducir drásticamente sus costos, lo que ha supuesto la caída de presidentes y consejeros delegados de esas entidades, acompañados por decenas de miles de trabajadores despedidos.


Los mayores bancos y casas de bolsa USA, por su lado, han anunciado depreciaciones de activos y pérdidas crediticias por valor de más de US$ $500,000 millones desde el 2007 vinculadas a declinaciones de los títulos respaldados por hipotecas.
En este escenario marcado por la "volatilidad" de los mercados (bolsas que suben y bajan) las autoridades monetarias de EEUU resolvieron seguir "auxiliando" con fondos estatales a los bancos para evitar que las turbulencias financieras contaminen la economía real.


En un comunicado, diez bancos internacionales, entre ellos el Bank of America, Barclays, Deutsche Bank y UBS, indicaron que cada uno aportará US$7.000 millones al fondo para hacer frente a la crisis crediticia.

El anuncio se produjo para hacer frente a las consecuencias de la quiebra de Lehman Brothers, abrumado por sus pérdidas en el sector hipotecario, después de que fracasaran las conversaciones para intentar encontrar un comprador.
La casa matriz, Lehman Brothers Holdings, Inc., explicó que planea acogerse a la protección por bancarrota, pero la presentación al Capítulo 11 no incluirá sus operaciones de correduría/corredor y otras actividades.
La solución inicial para Lehman Brothers, que incluía la venta de sus activos rentables al grupo británico Barclays, no prosperó este domingo después de que los compradores se retiraran ante la negativa del Tesoro a darle respaldo financiero a la operación.



El panorama para Lehman Brothers Holdings Inc. se oscureció en la tarde del domingo cuando Barclays PLC, el único comprador que quedaba por la firma de Wall Street, le dijo a los reguladores que se estaba retirando de la transacción.
En los últimos doce meses, los fondos soberanos y otras instituciones han inyectado miles de millones de dólares de capital fresco en Lehman, Merrill Lynch, Citigroup, y otros gigantes de Wall Street. Sin embargo, tras absorber pérdidas gigantescas en estas inversiones, ahora se han mantenido al margen.

La quiebra de Lehman Brothers se produce a solo una semana de que el gobierno de EEUU resolviera rescatar del precipicio a sus dos principales entidades hipotecarias en crisis, Fannie Mae y Freddie Mac , "estatizando" sus pérdidas y garantizando su solvencia con un aporte del Tesoro norteamericano de US$ 200.000 millones.
Se trató del rescate financiero más grande en la historia de EEUU de dos gigantes del negocio hipotecario que concentran cerca de la mitad de los créditos inmobiliarios otorgados en Estados Unidos por un valor de US$5,3 billones, cifra que se acerca a casi dos veces el presupuesto anual de EEUU.
Esta vez el Tesoro de Estados Unidos, que en marzo pasado salió en defensa del banco Bear Stearns y que hace una semana intervino a favor de las hipotecarias Freddie Mac y Fannie Mae, rechazó hacer lo mismo a favor de Lehman Brothers argumentando que ello haría que los bancos reclamaran siempre el respaldo del estado en estas situaciones.
De acuerdo con la visón de The Wall Street Journal, lo que "más preocupa a los inversionistas "es que los problemas económicos de EEUU ya se han contagiado a Europa, Japón y al mundo en desarrollo. Incluso después del rescate de Freddie Mac y Fannie Mae, es probable que el deslizamiento hacia un bajón económico global continúe, con recesiones en algunos de los grandes países europeos y, posiblemente, EEUU".



En tanto, y en un acelerado esfuerzo por capear la tormenta que está afectando al sistema financiero estadounidense, Merrill Lynch & Co., otro gigante emblemático de la especulación finaciera en Wall Street, llegó a un acuerdo durante la noche del domingo para fusionarse a Bank of America por cerca de US$50.000 millones, según la cadena BBC.
Impulsado por su presidente ejecutivo Kenneth Lewis, Bank of America ya ha llevado a cabo decenas de adquisiciones grandes y pequeñas, incluyendo la compra de la alicaída firma hipotecaria Countrywide Financial Corp. a principios del año. Al agregar a Merrill Lynch, controlaría la mayor fuerza de corredores de acciones del país así como en un súper gigante de las inversiones.
Esto grafica, a su vez, la dinámica concentradora del sistema capitalista durante las crisis, donde los más aptos se engullen a los más débiles agilizando nuevos procesos de concentración del capital.

La lógica darwiniana del capitalismo

De acuerdo con las leyes de su desarrollo histórico, el sistema capitalista se basa en dos pilares esenciales: la búsqueda de rentabilidad (la ganancia y concentración de riquezas en pocas manos, que conforma la base de formación de los monopolios) y la competencia por los mercados (la dinámica por la cual los monopolios capitalistas compiten entre sí, y el pez más grande se come al chico).
A estas dos instancias rectoras se agrega, en la era de la globalización, la "regulación darwiniana" del mercado por medio de las "burbujas" (periodos expansivos) y las "crisis" (periodos depresivos), tras las cuales los grupos más poderosos y diversificados (y con mayor control político de la economía a través de los Estados capitalistas) absorben a los grupos más débiles y continúan con una nueva fase del proceso de rentabilidad y concentración de riqueza.
De acuerdo con las leyes históricas del capitalismo, para que se produzca la concentración monopólica de la riqueza, debe generarse (a través de la competencia capitalista por el mercado y la rentabilidad ) un proceso de alta circulación de dinero y de ganancias (burbuja), primero, y otro de retracción de ganancias con escasez del dinero circulante (crisis) después.
O sea, deben haber "burbujas" y "crisis" financieras, donde unos pierden y otros ganan, y donde los monopolios más súper-concentrados del sistema capitalista se degluten y/o absorben a los menos concentrados (el pez grande se come al chico).
Esta dinámica es la que ha posibilitado la existencia de bancos y trasnacionales (la mayoría abrumante con asiento en Wall Street) que facturan ganancias y tienen activos equivalentes a los presupuestos y al PBI de decenas de países juntos del llamado "mundo periférico" (los "mercados emergentes").

De esta manera, en un proceso de conversión dialéctica del positivo al negativo, el sistema capitalista sionista, controlado desde la cima del Imperio norteamericano, genera ganancias y concentración de riquezas en pocas manos, tanto con las "burbujas" como con las "crisis".
Y tal cual como lo predijo Alan Greenspan (el gurú más emblemático de los grupos sionistas que controlan el dólar y la Reserva Federal), y lo acaba de afirmar el presidente del Tesoro de EEUU, Henry Paulson, (ex director de Goldman Sach), la "crisis hipotecaria" estadounidense va a dar como resultante una quiebra generalizada de bancos y empresas, tanto en EEUU como en el resto del mundo.
Y como en el sistema capitalista todo se compra y se vende (incluidos los activos empresarios y las acciones devaluadas en los mercados globales), los mismos grupos sionistas que lanzaron y se beneficiaron de la "burbuja hipotecaria", hoy ya están comprando, a precio de regalo, los bonos y acciones devaluadas por la "crisis hipotecaria".

Economía-EEUU: Ola de protestas contra rescate financiero

(Por IAR Noticias)

El plan para el rescate de las instituciones financieras de la amenaza de quiebra formulado por el gobierno del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, desató una ola nacional de protestas.
"Dinero por basura", gritaban activistas que se concentraron el jueves en Nueva York, cerca de Wall Street, el corazón financiero de esta nación.

Expresaban así su indignación por el plan para comprar la cartera de deudas incobrables de los bancos a 700.000 millones de dólares, que se financiará con dinero de los contribuyentes.

Los manifestantes reclamaron que el Congreso legislativo tome medidas para proteger a los millones de personas que corren riesgo de perder sus casas, al no poder hacer frente al pago de los créditos que tomaron para comprarlas, en lugar de acudir en auxilio de las grandes compañías de inversión responsables por la debacle.

"La gente está en pie de guerra por esto", dijo a IPS Matt Holland, de la organización no gubernamental TrueMajority, que cuenta con unos 700.000 miembros y jugó un papel importante en la organización de las protestas.

Según este grupo, miles de personas en más de 190 ciudades en todo el país participaron en las manifestaciones de rechazo al plan de rescate de las instituciones bancarias, propuesto el viernes pasado por el secretario del Tesoro (ministro de Finanzas) estadounidense, Henry Paulson.

La iniciativa, que requiere aprobación parlamentaria aún pendiente, no incluye ninguna medida legal o financiera dirigida a proteger a los propietarios de viviendas de las ejecuciones hipotecarias, ni tampoco fija un techo al ingreso de los altos ejecutivos de las instituciones financieras, que en algunos casos trepan a cientos de millones de dólares al año.

Algunos legisladores señalaron este jueves que estaban cerca de llegar a un acuerdo para la aprobación de una versión modificada de la propuesta de Paulson, pero todavía no existen indicios claros sobre el destino final del controvertido plan.

Pero luego de llegar a ese entendimiento básico, las negociaciones se estancaron por disputas políticas entre los legisladores del gobernante Partido Republicano y el opositor Demócrata.

El representante John Boehner, líder del bloque republicano en la cámara baja, dijo que su partido no podía apoyar un plan como el acordado, que contemplaba una intervención del Estado de tal magnitud.

Eso originó un nuevo choque, pues los demócratas lo acusaron de sabotear el acuerdo para favorecer las posibilidades del candidato oficialista para las elecciones del 4 de noviembre, el senador John McCain.

En una reunión realizada este jueves en la Casa Blanca con líderes parlamentarios, para discutir la crisis, Paulson se inclinó, con una rodilla apoyada en el piso, ante la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, para rogarle que su partido no retirara el apoyo al plan de rescate financiero.

Este viernes, Bush reconoció que todavía existían diferencias de criterio, pero dijo que confiaba en que el plan sería finalmente aprobado.

"Es irresponsable pedir a los contribuyentes que paguen con sus impuestos el paquete de rescate para Wall Street y, al mismo tiempo, negarles una respuesta a la devastación que las ejecuciones hipotecarias está provocando en el país", dijo Janet Murgula, presidente del Consejo Nacional La Raza, el mayor grupo hispano de derechos civiles.

Bush, sin embargo, considera que la situación no es tan grave. "Entiendo que existe nerviosismo, pero la economía está creciendo, la productividad es alta, el volumen del comercio está en aumento y la gente está trabajando. En la medida en que encontremos debilidades, nos moveremos" para atenderlas, dijo en un discurso televisado este miércoles.

Ralph Nader, candidato independiente a la presidencia de Estados Unidos, criticó a Bush y señaló que "la primera pregunta que debemos formular como ciudadanos es por qué es necesario este rescate y, si hace falta, por qué 700.000 millones de dólares".

También propuso que si las entidades financieras que las autoridades se disponen a rescatar con fondos públicos obtienen ganancias en los próximos ejercicios se reembolse dinero a los contribuyentes.

A invitación de Bush, McCain y el senador Barack Obama, el candidato presidencial demócrata, asistieron a la reunión del jueves en la Casa Blanca en la que se discutió la crisis financiera. Pero no es claro hasta qué punto McCain y Obama apoyan el plan de Paulson.

Mientras los legisladores discuten las alternativas, Murgula considera que "salvo que se responda a las necesidades de millones de propietarios de viviendas, aumentará el número de ejecuciones hipotecarias. Esas casas continuarán inundando el mercado, deprimiendo aún más los precios".

¿SE DERRUMBA EL IMPERIO?

El dominó global de la crisis capitalista: Cómo se bate el cóctel USA-China- petróleo-dólar

(Por IAR-Noticias)

Las líneas matrices y las variables claves de una crisis económica mundial en gestación que ya configura -según los propios analistas y organismos del sistema- la mayor "amenaza histórica" para el sistema capitalista globalizado que tiene como potencia imperial regente a EEUU.

En el actual modelo de enclave de la economía mundial capitalista, y de acuerdo con lo que proyectan los expertos, EEUU y China van a jugar un rol central en una (por ahora potencial) crisis del sistema a escala global detonada por un desenlace del cóctel interactivo petróleo-dólar-crisis financiera USA=recesión mundial.
La crisis del crédito hipotecario en EEUU terminó con el boom inmobiliario e hizo temblar los mercados mundiales en septiembre, y continúa pendiendo como una amenaza sobre el crecimiento, acompañada de sombríos vaticinios sobre la economía global realizados por las máximas entidades oficiales del sistema.

El dato decisivo en esta caída generalizada de los mercados continúan siendo -según coinciden la mayoría de los analistas- el derrumbe del dólar y la escalada de los precios del petróleo y su impacto sobre los mercados y la economía global.
La actual crisis mundial en desarrollo del "modelo" (que amenaza con tragarse, en primer lugar, al Imperio capitalista estadounidense) tiene tres actores-detonantes centrales:
A) El derrumbe del dólar (por ahora, la moneda patrón de las transacciones mundiales),
B) la crisis subprime-financiera de EEUU (que desequilibra los mercados mundiales),
C) la escalada de los precios del petróleo (que la mayoría de los especialistas ve como el desencadenante clave de un proceso recesivo a escala mundial).
En este escenario, EEUU, la principal potencia económica-financiera imperial se encamina (y arrastra consigo a todo el sistema capitalista) hacia lo que un conjunto de analistas denomina estanflación (recesión con inflación), cuyo pronóstico (todavía en estado larval) lo viene vaticinando la propia Reserva Federal de EEUU con sus anuncios de que habrá una reducción del crecimiento de la economía estadounidense con posibles brotes inflacionarios.
Y hay, por lo menos, dos explicaciones centrales de porqué una agudización de la crisis económica-monetaria en EEUU puede arrastrar al resto de las economías a nivel planetario:
A) En el actual modelo globalizado de economía mundial EEUU es el principal comprador y consumidor de productos y recursos energéticos,
B) la economía mundial capitalista está "dolarizada" (el dólar es la moneda patrón de todas las transacciones comerciales y financieras a escala global).
Estos dos factores centrales explican porqué cualquier oscilación o desequilibrio económico-financiero que tenga a EEUU como protagonista, impacta y se esparce inmediatamente por todo el "sistema".



En el actual pronóstico sombrío de la economía imperial estadounidense coinciden instituciones madres del actual sistema económico-financiero como la Fed estadounidense, el Banco Mundial, el FMI, así como los bancos centrales de Europa y de Asia, que ven en la confluencia crisis hipotecaria-derrumbe del dólar-escalada de los precios del petróleo, el detonante central de un (por ahora potencial) proceso recesivo del capitalismo a escala mundial.


El tablero de desarrollo de la economía mundial capitalista vigente, que derrama ganancia y concentración de riqueza en pocas manos (con su contrapartida de pobreza y exclusión social masiva), tiene tres motores centrales:
A) El eje agro-energético minero exportador (países "emergentes" exportadores de materias primas, con América Latina a la cabeza), B) el eje industrial exportador (países asiáticos exportadores industriales con China e India a la cabeza ), y C) el eje especulativo financiero-importador (EEUU, UE y países centrales que importan y consumen la mayoría de los bienes y servicios), que se expresa en la descomunal transferencia de ganancias y recursos desde los países emergentes a los países imperialistas dominantes.
La ecuación del "modelo" se puede resumir así: Los países "emergentes" alimentan de materias primas a la "gran fábrica"" asiática, y la "gran fábrica" asiática, a su vez, los alimenta de productos y de dólares, que luego (por el consabido proceso de apropiación imperial-capitalista) son trasferidos a la maquinaria financiera-capitalista de los países centrales donde se generan las "burbujas" y las "crisis" que luego se proyectan a todo el modelo globalizado de economía capitalista.

Todo este proceso se posibilitó por un sistema de economía de enclave de las trasnacionales que terminó con los controles de los estados nacionales, dividió el planeta entre productores de materias primas (países emergentes) y fábricas globales con mano de obra barata (China y Asia) , que terminó socializando la producción pero no así el reparto de lo producido, creando súper-concentración de riqueza, fortunas personales y activos empresariales en pocas manos, que son reciclados en el gran supernegocio del capital-especulativo en los países centrales (EEUU, Unión Europea y Japón) concentrado ganancias siderales en las bolsas y fondos de inversión de los países centrales (la "burbuja").


CHINA Y EL EFECTO DOMINO DE LA CRISIS USA


En este proceso de feed back (ida y vuelta) de la economía mundial, EEUU y la Unión Europea (potencias regentes del sistema imperial capitalista) cumplen el rol de "principales compradores" de bienes producidos (además de que también son exportadores centrales), mientras que China, India y los países asiáticos cumplen el rol de "principales vendedores" de bienes producidos (además de ser importadores centrales de materias primas y petróleo).
En el centro del modelo imperial-económico globalizado , y a modo de protagonistas centrales, se encuentran EEUU (el principal comprador mundial), y China (el principal vendedor mundial), cuyas economías entrelazadas se proyectan como claves y dominantes en el funcionamiento de todo el sistema capitalista a escala global.
Una crisis recesiva (detención del crecimiento) de la economía de EEUU con devaluación del dólar, produciría el siguiente impacto básico (por efecto dominó) en actual modelo económico global:

A) Con un proceso recesivo de su economía y un dólar devaluado, EEUU (el principal comprador de la "gran fábrica" asiática) reduciría drásticamente sus compras a China,
B) como impacto inmediato, la economía china también ingresaría en un proceso recesivo (detención del crecimiento) que la obligaría a reducir sus importaciones de materias primas y de petróleo,
C) la reducción en la importación de materias primas y de petróleo por parte de China (el principal importador mundial) impactaría en las economías de Rusia y de los "países emergentes" (los principales exportadores de petróleo y de materias primas a China) que también podrían ingresar en un proceso recesivo.
Como se sabe, EEUU es el principal comprador de productos chinos, y el gigante asiático, a su vez, es el principal importador de petróleo y materias primas de los "países emergentes", con lo que se puede deducir que si el Imperio estadounidense (en proceso recesivo) reduce sus compras, el impacto se va a proyectar inevitablemente en una crisis de China proyectada a los "países emergentes".


Esta crisis, por efecto dominó, de la economía mundial con origen en EEUU (la economía central del sistema capitalista), se proyectaría inmediatamente a las bolsas y a los mercados globalizados del dinero ( la "pata financiera" del modelo) completando el ciclo del derrumbe del actual modelo de economía capitalista a escala global.
Además de la recesión económica generalizada a escala global, el derrumbe del modelo rompería el equilibrio de la "gobernabilidad" política y desataría una ola de conflictos sociales y sindicales a escala mundial que afectaría por igual tanto a EEUU y a las potencias centrales como a los países "emergentes".
Las autoridades monetarias de EEUU y Europa, así como los principales analistas y voceros periodísticos del sionismo financiero (como The Wall Street Journal, The Economist y The Financial Times) ven en la caída del dólar estadounidense, y en su inter-relación con la suba de los precios del petróleo, un elemento clave para la ruptura (proceso recesivo con detención de la producción y de los márgenes de rentabilidad) del actual modelo de desarrollo y "crecimiento capitalista" a escala global
.A su vez, la mayoría de los analistas del sistema estiman que dentro de las variables que impulsan hacia arriba los precios del petróleo y la energía (vitales en el proceso de desarrollo de la economía mundial), un estallido armado de cualquiera de los conflictos geopolíticos y militares que acechan a Medio Oriente y Asia (Irán en primer término) puede disparar el crudo a niveles nunca vistos.
Lo que a su vez detonaría un derrumbe generalizado de los mercados mundiales, precipitando el estallido de una recesión mundial con despidos masivos de empleados y trabajadores en todo el planeta.

EL DOMINO GLOGAL DEL PRETOLEO


Además de la crisis recesiva en EEUU, el otro "gran peligro" que acecha al actual modelo de economía capitalista es la escalada de los precios del petróleo y la energía que también amenazan con desencadenar un efecto dominó de derrumbe económico a escala global.
El petróleo, el motor de los motores de la economía mundial, reviste una importancia estratégica excepcional para el equilibrio (o la ruptura) del actual modelo de acumulación capitalista motorizado desde las sociedades de consumo niveladas planetariamente.
El petróleo es el elemento clave y (el motor de todos los motores) para mantener una ecuación equilibrada del "modelo" de explotación capitalista vigente que tiene en el boom de las exportaciones de materias primas controlado por las trasnacionales en los "países emergentes" (pagando salarios africanos y eludiendo impuestos), y en el boom industrialista de los mercados asiáticos controlado por las trasnacionales (pagando salarios africanos y eludiendo impuestos) y en la "burbuja financiera" controlada por los grandes consorcios financieros sionistas (desde la Reserva Federal y los bancos centrales europeos y asiáticos), sus motores de crecimiento y expansión a escala global.
En suma, y según la visión de los expertos en Wall Street, la conjunción del "dólar débil" y del incremento en la demanda, alimentan la escalada del precio del petróleo (el motor de las economías centrales y emergentes) con el consecuente peligro de desatar un proceso inflacionario con retracción de la economía y del consumo a escala global.



Y hay una primera lógica que lo explica: China y los "tigres asiáticos" (la "gran fabrica" del modelo industrial-capitalista globalizado) se alimentan de petróleo.
Los países "emergentes" productores y exportadores de materias primas, incluidos el gas y el "oro negro" (los que nutren de energía y de materia prima a la "gran fábrica" asiática) se alimentan de petróleo.
Los países centrales capitalistas (los grandes consumidores y beneficiarios económicos-financieros del "modelo") se alimentan de petróleo.
En la energía (básicamente petróleo, gas y derivados del petróleo) se encuentra la clave que mueve los centros vitales de producción, elaboración y transporte de todo lo que fabrica y consume el planeta nivelado por este modelo de "globalización" económica capitalista
En lo inmediato -señalan especialistas-, varios factores adicionales, como un posible desenlace de conflictos armados en Medio Oriente y el Kurdistán iraquí, podrían incrementar a niveles inéditos el proceso de escalada en los precios del petróleo, sumándose al incremento de la demanda por baja de las reservas .
Todos los expertos coinciden en que el precio del petróleo bordeando los US$100 el barril -la semana pasada superó los US$99- es un factor clave para desatar un proceso inflacionario a escala global y resulta un freno para el crecimiento económico de EEUU, el principal comprador de energía de todo el planeta.

La preocupación, según The Wall Street Journal, es que el inmenso castillo financiero construido sobre los cimientos del mercado de bienes raíces podría derrumbarse, lo que desaceleraría la economía estadounidense con un efecto dominó recesivo sobre la economía global, tal como lo vienen anticipando el FMI, la Reserva Federal y el Tesoro norteamericano, además de las autoridades monetarias y principales gurúes (Greenspan, entre ellos) de los países centrales.
Sí estas "turbulencias" en los mercados bursátiles se juntan con la escalada de los precios del petróleo, la baja del dólar, y un desenlace de los conflictos militares latentes, se pueden convertir en dinamita recesiva para la economía mundial liderada por el Imperio estadounidense.

A su vez, la repercusión más inmediata de la suba récord de los precios del petróleo -según los expertos- puede ser una escalada mundial de los precios de los alimentos de consumo diario, esenciales para la supervivencia, debido a la alta incidencia de los combustibles en sus costos, principalmente en el sistema de producción y comercialización y en el transporte.
La suba de los alimentos de consumo esencial, a su vez, actúa como principal disparador de la tasa de inflación y del consecuente proceso de recesión económica que conlleva lo que los expertos denominan estanflación.
El factor dólar débil-petróleo alto
Según el diario The Wall Street Journal,
la contracara de la "burbuja" especulativa que comienza a desarrollarse en los mercados emergentes producida por fondos que huyen de la crisis financiera de los países centrales, es el debilitamiento del dólar que amenaza con seguir disparando el precio del petróleo.
Debido a que la mayoría de los commodities, incluyendo el petróleo, se cotizan en dólares, y a los productores se les paga en esa moneda, los precios de las materias primas aumentan a medida que el dólar se deprecia.
El factor dólar débil-petróleo alto afecta en primer término a las "economías centrales" de EEUU y Europa, y se cierne como un fantasma sobre China, la llamada "fábrica del mundo", y mayor demandante global de petróleo y materias primas, que empieza a experimentar los primeros síntomas inflacionarios-recesesivos en su economía.

A su vez, el derrumbe del dólar estadounidense puede conducir a una (cada vez más definida) "desdolarización" de la economía mundial y de las transacciones económicas-financieras hoy regidas globalmente por la divisa estadounidense,
Como consecuencia más inmediata, ante un dólar débil (la moneda de transacción comercial del petróleo) los productores (para mantener sus ganancias) seguirán -según los especialistas- aumentando los precios con el peligro de desatar un proceso inflacionario con retracción (recesión) de la economía y el consumo a escala global.
En este escenario, con EEUU en proceso de una "recesión anunciada" (todavía en estado larval), con la crisis financiera-subprime pendiendo como una espada de Damocles y con el precio del crudo a punto de cruzar la barrera de los US$100, los países productores de petróleo ya estudian cómo desprenderse de su histórica dependencia a la divisa estadounidense y decretar su funeral como "moneda de transacción petrolera".

Pero la "dolarización" que rige el actual modelo de economía capitalista globalizada lleva a que las reservas de las principales potencias capitalistas estén atadas a la divisa estadounidense, y que desprenderse de ellas implique un riesgo de descalabro financiero, no solamente para EEUU, sino para todo el sistema capitalista en su conjunto.
Como ejemplo baste citar que las reservas de China (la economía clave junto a la de EEUU) superan al billón de dólares, más del 22% del total mundial , y si el gigante asiático decidiera desprenderse del dólar generaría una conmoción de consecuencias impredecibles en el sistema monetario internacional que impactaría con dureza en el actual modelo capitalista mundial, y podría conducir a su propia desaparición junto a la de EEUU.
La actual decadencia de la divisa norteamericana hace que la moneda china se revalúe frente al dólar haciendo menos competitivas sus exportaciones (principalmente a EEUU) y generando temores de recesión, por lo que las propias autoridades chinas intentan medidas para mantener un equilibrio razonable en sus reservas.


De la misma manera, las autoridades monetarias de la Unión Europea (el otro "gran comprador" de China) ya han lanzado un alerta roja y una advertencia del riesgo que conlleva la apreciación del euro frente al dólar que podría conducir a una recesión en cadena de la economía europea, ya impactada por la crisis subprime-financiera y los altos precios del petróleo.
Y la conclusión (teniendo en cuenta que todas las economías, incluida la de Rusia, están atadas al dólar) es que si las potencias decidieran "desdolarizar" sus reservas y convertirlas a otra moneda estallaría, en primer término, el sistema económico-financiero del Imperio norteamericano (la economía regente del sistema capitalista) que arrastraría tras de sí al resto de las economías del mundo capitalista "globalizado".
Y como el sionismo financiero que controla la economía imperial estadounidense (con base central en Wall Street, la Reserva Federal y los bancos centrales de Europa y de Asia), es el mismo que controla las economías de China y la Unión Europea, ya está en marcha un operativo montado desde los grandes centros del "capitalismo sin fronteras" para salvar al dólar, antes de que arrastre en su caída a todo el sistema.

En resumen, de los tres factores que podrían conducir al estallido de un anunciado dominó de crisis capitalista a escala global (cóctel dólar-petróleo-crisis financiera), sólo el cóctel interactivo conflicto militar-petróleo-crisis financiera= recesión global entraña un peligro cierto y de difícil control para EEUU (la potencia regente) y el resto del sistema capitalista.
El verdadero peligro que hoy amenaza la existencia del Imperio norteamericano, y de todo el sistema que lo sostiene no es el dólar (al dólar lo controlan cuando quieren), sino la conjunción explosiva Irán-petróleo-crisis financiera = recesión mundial.
La "gran amenaza" no proviene de la dinámica económica-financiera (siempre se juntan para controlarla) sino de la dinámica conflicto militar + petróleo + recesión mundial = descalabro económico y caos social extendidos por todo el planeta capitalista "globalizado".
Y hay una explicación lógica: EEUU y el sistema capitalista (metidos en el mismo barco) solo se van a hundir cuando pierdan el control. Y con el ataque a Irán, pueden empezar a perderlo.

La hora del "Apocalipsis social"
La guerra que nunca se imaginó emprender el capitalismo

(Por IAR Noticias)

Ya no se trata de una guerra por conquista de petróleo, recursos naturales y mercados, sino de la "batalla final" contra el hambre que el mismo sistema capitalista ha generado a través de siglos de propiedad privada y de concentración de riquezas en pocas manos.

Lo que parece, en primer término, una expresión surrealista y demente (que el capitalismo combata al hambre que genera), es lo que se han propuesto las naciones centrales más desarrolladas, que a través de sus instituciones y organizaciones advierten sobre las implicancias y el peligro que entraña lo que llaman "crisis alimentaría mundial" y cuyos efectos ya se proyectan por medio de estallidos sociales y revueltas de los pobres por todo el planeta.
En su dinámica histórica concentradora de riqueza en pocas manos (y como producto de la propiedad privada explotada sin planificación) el capitalismo ha depredado los ríos, la fauna y los bosques, produciendo las condiciones para un "Apocalipsis natural" de la mano del calentamiento global y de la extinción de los recursos naturales esenciales.
En un segundo frente, las guerras intercapitalistas por la conquista de mercados y el negocio con el armamentismo han creado las condiciones para un "Apocalipsis nuclear" de la mano de los arsenales atómicos que las potencias centrales acumulan como "efecto disuasivo" contra sus rivales, y cuya utilización efectiva nadie puede prever en el futuro.
Y hay un tercer frente que se suma: La plaga del hambre que ya se extiende como una epidemia por las áreas empobrecidas del planeta generando las condiciones para un "Apocalipsis social".
No hace falta mucha imaginación (el fenómeno ya se verifica en la realidad) para mensurar el factor apocalíptico masivo que representaría para el sistema el avance de ejércitos de hambrientos buscando comida para supervivir en las grandes urbes, enfrentando con la violencia a la represión militar o policial.
¿Que puede detener a un hambriento? Se trata del instinto de conservación, el primer sistema de señales que guía la conducta de un ser humano o de un animal en situaciones extremas de lucha por la supervivencia.
¿Acaso se utilizarían tanques, aviones y arsenales nucleares para detener a los miles de millones de pobres atacados de "hambre celular" que se abalanzarían masivamente sobre las ciudades para conseguir alimentos por los medios que fuesen?
¿Con qué discurso los políticos del sistema podrían contener a los atacados de incontinencia alimentaria y reencauzarlos por la senda de la "civilización" y de la "gobernabilidad democrática" capitalista?



¿Cuanta propiedad privada concentraría un "empresario" capitalista antes de que las multitudes de hambrientos saqueen su casa y destruyan todo lo que encuentran a su paso, incluso su vida y la de su familia?
¿Cuantas balas o misiles alcanzarían a disparar las tropas militares antes de ser destrozadas por las multitudes enfurecidas por el hambre y la reacción instintiva de la búsqueda de supervivencia a cualquier costo?

Estallidos en Haití por demanda de alimentos.
No se trata de una revolución racional y planificada por la toma del poder político, se trata de la "barbarie" en su escala primitiva, una regresión al hombre prehistórico, sin ningún molde de "civilización" o de "convención social" que lo contenga en su búsqueda de alimentos para supervivir en la inmediatez.
A excepción de los marginados masivos de la sociedad de consumo capitalista, que no alcanzan a cubrir los niveles esenciales de supervivencia, el resto de la sociedad mundial (tanto en el mundo dependiente como en el mundo de las potencias capitalistas dominantes) está programada a partir de una estructura piramidal de individuos-masa nivelados por la ideología del consumo capitalista.


La manipulación psicológica con el consumismo (para vender productos capitalistas) desarraigó al individuo-masa de los valores de su propia cultura, historia y tradiciones de origen, y lo convirtió en un alienado universalizado y sin conciencia.
Curiosamente, el sistema que niveló a la humanidad en la ideología del consumo como "pensamiento único", hoy retacea a las mayorías planetarias la materia prima del consumo: Los alimentos esenciales para la supervivencia.
La ONU, el Banco Mundial, la mayoría de los expertos y últimamente el G-8, vienen advirtiendo sobre el peligro de estallidos sociales a escala global que podrían generarse por el impacto de los precios del petróleo sobre el costo de los alimentos en los países más pobres de Asia, África y América Latina.
El FMI acaba de advertir que la crisis mundial es mayor de lo que se preveía, y que va a condenar al hambre y la desesperación a las masas más empobrecidas del mundo dependiente, en Asia, África y América Latina.
"Miles, cientos de miles de personas padecerán hambre. Los niños sufrirán de malnutrición, con consecuencias por el resto de sus vidas", señaló el director del FMI, advirtiendo que la crisis social causada por la inflación en los precios de los alimentos ya esta desencadenando conflictos sociales a nivel mundial.

La "emergencia alimentaria" producida por la escalada de los precios del petróleo, con su inmediato emergente de conflictos y estallidos sociales que ya empiezan a extenderse por los países periféricos, determinó, a su vez, una operación "salvataje de los pobres" que el Banco Mundial, el FMI y el G-7 quieren profundizar, no para reparar las injusticias cometidas por la concentración de riqueza en pocas manos, sino para salvar al sistema de la escalada de conflictos sociales y gremiales que pueden terminar de un plumazo con el actual modelo globalizado de depredación capitalista.



Aceleradamente, los responsables y estrategas institucionales del sistema comienzan a tomar conciencia de que la "crisis alimentaria" no tiene otra barrera de contención posible que la de suministrar alimentos a los hambrientos antes de que les estalle el planeta en las manos.

Este lunes, el director del Departamento de Agricultura de la Organización para la Agricultura y la Alimentación de Naciones Unidas (FAO), José María Sunsi, afirmó hoy que es necesario incorporar en el mercado mundial de alimentos "mecanismos de información y prevención" para poder anticipar las crisis alimentarias y evitar que lleguen a "extremos tan graves" como la actual, provocada por la subida sin precedentes del precio de los alimentos.
Por su parte, la ONU y otras organizaciones internacionales llegaron a un acuerdo para crear una "unidad de crisis" destinada a responder al desafío de la actual plaga alimentaria mundial, anunció el martes en Berna el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon.

Ban realizó el anuncio tras una reunión en Berna con los dirigentes de las 27 agencias y organizaciones de Naciones Unidas para trazar un plan "de emergencia" para hacer frente a la crisis provocada por la subida de los precios de los productos alimentarios.

Ban Ki-moon., un apéndice de Washington en la ONU, señaló en una conferencia de prensa que la prioridad inmediata debe ser "alimentar a los hambrientos" e hizo un llamamiento a los países a contribuir, "urgente y plenamente", con fondos para el Programa Alimentario Mundial (PAM).

Las potencias ya hablan de un "Nuevo Trato (New Deal) para una Política Mundial de Alimentos", acordado en el Comité de Desarrollo, el panel que fija las políticas del Banco Mundial y que se reunió en Washington como parte de las asambleas de gobernadores que realizó la institución este fin de semana conjuntamente con el Fondo Monetario Internacional.

El presidente del BM, Robert Zoellick, señaló al término de las asambleas que los gobiernos deben intervenir de forma "urgente" para evitar que la crisis alimentaria hunda aún más en la pobreza a 100 millones de personas, y pidió a países donantes cumplir pronto sus compromisos de completar un faltante de US$ 500 millones en las Naciones Unidas destinado a amortiguar el hambre en el mundo.
En la dinámica de concentración de riqueza del capitalismo en la era transnacional, los US$ 500 millones ofrecidos para paliar el hambre en el mundo resultan una cifra magra y absurda que no alcanzan ni siquiera para subsanar el hambre en un solo país.
Para dar una dimensión numérica de la depredación capitalista a escala planetaria baste citar que -según el Wall Street Journal- los activos financieros globales (el dinero especulativo sin fronteras), suman alrededor de US$ 59,4 billones (millones de millones).

Esta masa de dinero (producto de la depredación capitalista a escala global) equivale a casi 25 veces el presupuesto anual de EEUU (US$2,4 billones), o algo más asombroso aún: Esa suma equivale a casi el total del PBI mundial (US$ 65 billones).
Con solo el 5% de la suma compuesta por los "activos finacieros globales" (unos US$ 3 billones) se podría alimentar y cubrir las necesidades de salud de toda población mundial hoy marginal y carenciada.
Baste mencionar que la totalidad del gasto armamentista en el mundo asciende a US$ 1,2 billón, y que En Wall Street (el templo del dinero especulativo mundial) se cotizan acciones por US$ 22 billones.
En este escenario, los US$ 500 millones mencionados por la ONU y el Banco Mundial como esenciales para "combatir el hambre" carece de toda lógica matemática y realista.
La suma mencionada como esencial para dar la "guerra contra el hambre" equivale a menos de 10% de la fortuna personal de Warren Buffett, el especulador más emblemático de Wall Street, y resulta menos que un mendrugo comparada con las fortuna de los diez "hombres más ricos".

La prensa internacional (parte integrante del sistema) pone en esta dinámica de "salvataje de los pobres" al FMI, al Banco Mundial, al G-7 y el G-8, como si fueran instituciones del "bien común" y sin fines de lucro, luchando para terminar con la injusticia y el hambre en el mundo.
Antes que nada, el Banco Mundial, el FMI, el G-7 y el G-8 son las máximas entidades representativas del capital trasnacional que depreda el mundo con las trasnacionales y con el sistema de especulación financiera con sede central en Wall Street.
Antes de la crisis financiera con las subprime en EEUU, y con el triunfo del Dow Jones en Wall Street, reinaba la fiesta del sistema capitalista sionista trasnacionalizado y nivelado planetariamente como dinámica de concentración de riquezas en pocas manos, que condujo a la mitad de la población del planeta a sobrevivir en la extrema pobreza y en la marginalidad social.
La concentración del capital mundial en mega-grupos o mega-compañías trasnacionalizadas, fue el aspecto más definitorio de la llamada "globalización económica".

Finalmente, el explosivo cóctel petróleo-alimentos-crisis financiera que ya tomó dimensiones globales determinó que las potencias más ricas, con EEUU y Europa a la cabeza, se dedicaran -hasta ahora sin éxito- al "salvataje&" de sus bancos y mercados financieros.
El encarecimiento del petróleo y de los carburantes y su impacto inmediato sobre los alimentos de consumo básico, el aumento de la población empobrecida, el cambio climático y las sequías en África y las inundaciones en Asia, entre otros factores, se retroalimentan en incuban focos de estallido social en gran escala que todavía nadie sabe como prever y controlar.
Ya en marzo de 2007 Fidel Castro, había alertado en un artículo, publicado en el diario cubano Granma, que si se aplicaba la producción masiva del biocombustible etanol a los países del Tercer Mundo, estos verían cuántas personas dejarían de consumir maíz entre las masas hambrientas del planeta. "O algo peor (...) no quedará un árbol para defender la humanidad del cambio climático".
Ahora,
la alarma ya ha cundido hasta en los más altos estamentos del poder capitalista que observan como los procesos de rebelión pueden entrar nuevamente en ebullición a causa de la escasez y suba de los alimentos esenciales.
Paradojalmente, y como producto de sus propias contradicciones, el sistema capitalista, hoy se encuentra amenazado por la propia plaga masiva que generó: El hambre mundial.

Y sus estrategas económicos, formados en las guerras por conquista de mercados, en un repliegue táctico, intentan el diseño operativo de la única batalla que no pueden ganar.
Matemáticamente, el hambre y los hambrientos, son mayoría en el planeta, y la "crisis alimentaria" mundial los multiplica como a los panes de Jesús que solo llegan a las mesas de los privilegiados de la pirámide capitalista.
En esa ecuación se resume el peligro potencial del "apocalispsis social" que la instituciones y autoridades del sistema advierten ante la indiferencia de los especuladores financieros y concentradores de riqueza capitalista empresarial que siguen depredando el planeta como si nada pasara.
Se trata en definitiva, de una dinámica irracional de autodestrucción que solo conduce a lo que viene: La guerra por la supervivencia alimentaria que solo podría ser detenida con una distribución equitativa de los alimentos y una reprogramación del sistema productivo a escala mundial orientado hacia las mayorías.
En resumen, y como el capitalismo no puede renunciar a sus leyes históricas (concentración de riqueza en pocas manos) la "guerra contra la pobreza" es un mito que solo intenta retrasar el reloj de la historia, o sea el "Apocalipsis", que tanto en su variante "social" como "natural" o "nuclear", parecen ver cada vez mas cerca los representantes más lúcidos del sistema.

El colapso del capitalismo
Lo que el sistema no explica sobre la crisis: ¿Cuál es el desenlace?

(Por IAR Noticias)

¿Qué va a pasar cuando la crisis financiera, retroalimentada por la escalada del petróleo y de los alimentos, devenga en una crisis inflacionaria-recesiva con despidos laborales masivos y emergencia alimentaria a escala global? El modelo colapsa, pero nadie explica que hay al final del túnel. Y hay una razón que lo fundamenta: El sistema (capitalista) perdió el control y su futuro es un laberinto.

Alimentando la escalada mundial del precio de los alimentos (que ya genera inflación y estallidos sociales de los pobres a escala global), en la semana que pasó, los precios del crudo ya tocaron un récord de US$ 117, por barril, confirmando los peores pronósticos recesivos a nivel mundial y demostrando que sus valores ya no tienen techo ni control.
Los datos decisivos de la caída generalizada y constante de los mercados financieros y su efecto inmediato acechante: la estanflación mundial (combinación de recesión con inflación), continúan siendo -según coinciden la mayoría de los analistas- el derrumbe del dólar, la escalada de los precios del petróleo y su impacto desestabilizador sobre los precios de los alimentos a escala global.
Hasta ahora, en su media lengua interesada, los analistas y la autoridades del sistema capitalista solo contaron una parte de lo que describen como la antesala de una "crisis de la economía mundial" con epicentro en la crisis financiera en EEUU, que podría expandirse como un proceso recesivo a todo los países del planeta globalizado.

Por supuesto, que ningún analista o periodista del sistema explican en qué consiste y cómo será la dinámica y el desarrollo de esa "crisis global" (superior a la Gran Depresión del 30) que pronostica a cada rato la plana mayor del sistema capitalista desde las cadenas mediáticas internacionales.

LA CRISIS DE LA POBREZA


¿Cuál es el "peor escenario" que hoy vislumbra el capitalismo depredador como desenlace de las propias lacras que genera?
La ONU, el Banco Mundial, el FMI, la mayoría de los expertos y últimamente el G-7, vienen advirtiendo sobre el peligro de estallidos sociales (que ya están ocurriendo) a escala global que podrían generarse por el impacto de los precios del petróleo sobre el costo de los alimentos en los países más pobres de Asia, África y América Latina.
En forma inédita, la emergencia alimentaria producida por la escalada de los precios del petróleo, con su inmediato emergente de conflictos sociales que ya empiezan a extenderse por los países periféricos, determinó, la semana pasada, una operación "salvataje de los pobres" piloteada por el Banco Mundial, el FMI y el G-7 (las potencias capitalistas centrales).
Los precios de los alimentos a nivel global podría llevar a unos 100 millones de personas a una pobreza más profunda, alertó el sábado el director del Banco Mundial (BM), Robert Zoellick.

Su advertencia se hizo eco en el jefe del FMI, el "gendarme financiero" del sistema capitalista a escala global, Strauss-Kahn, quien alertó sobre las calamitosas consecuencias del aumento continuo en los precios de los alimentos.
"Miles, cientos de miles de personas padecerán hambre. Los niños sufrirán de malnutrición, con consecuencias por el resto de sus vidas", señaló a la prensa, advirtiendo que la crisis social causada por la inflación en los precios de los alimentos ya esta desencadenando conflictos sociales a nivel mundial.
Hasta aquí, entonces, tenemos verificado la existencia de tres "actores centrales" de la crisis en desarrollo: El petróleo (en su interacción con el dólar en baja), la inflación (producto de la interacción petróleo-alimentos), y los estallidos sociales en los países más pobres (producto del encarecimiento y escasez de alimentos)

¿Como se resuelve en el futuro el desenlace de esta ecuación explosiva?

EL MODELO EN PELIGRO


Los analistas y autoridades del sistema hablan de "recesión global", pero nadie describe (o se imagina) como se va a desarrollar secuencialmente y cuáles serán las resultantes a escala global.
La crisis, como está planteada hasta ahora, ha sido esencialmente "financiera": Tuvo un epicentro en la crisis hipotecaria de EEUU, se expandió a los mercados financieros globales, y ahora ya toca variables estructurales de la "economía real" por medio del proceso desatado por el cóctel suba del petróleo + suba de alimentos = proceso inflacionario, que ya padecen las economías centrales del sistema capitalista: EEUU, Unión Europea y China.
En el actual pronóstico inflacionario de la economía imperial estadounidense coinciden instituciones claves del actual sistema económico-financiero como la Reserva Federal y el Tesoro de EEUU, el Banco Mundial, el FMI, así como el G-7 (los siete países más ricos) y los bancos centrales de Europa y de Asia, que ven en la confluencia crisis finaciera-derrumbe del dólar-escalada de los precios del petróleo, el detonante central de un (cada vez más claro) proceso recesivo del capitalismo a escala mundial.
Pero, obviamente, lo que no cuentan los analistas del sistema y sus autoridades es que el petróleo es el elemento clave y (el motor de todos los motores) para mantener una ecuación equilibrada del "modelo" de explotación capitalista vigente que hoy está nivelado para todo el planeta.
Ese modelo tiene tres ejes centrales e interdependientes:
A) El boom de las exportaciones de materias primas controlado por las trasnacionales en los países periféricos o "emergentes" (pagando salarios africanos y eludiendo impuestos), que posibilita un crecimiento desmesurado de la rentabilidad capitalista sin distribución social de la riqueza, y la utilización del "asistencialismo" para contener los conflictos sindicales y sociales.
B) El boom industrialista-exportador de China y los mercados asiáticos controlado por las trasnacionales (pagando salarios africanos y eludiendo impuestos) que permite a EEUU y a las potencias centrales del capitalismo exportar tecnología e insumos caros, e importar bienes y productos elaborados a precio de ganga.
C) La "especulación financiera" a escala global controlada por los grandes consorcios financieros sionistas (con la Reserva Federal de EEUU y los bancos centrales europeos y asiáticos, como herramientas de control y regulación), que le posibilita a EEUU (y a las potencias centrales) generar rentabilidad parásita (sin producción) y trasladar sus déficit al resto del mundo por medio del endeudamiento financiero.

En la articulación de este "modelo" interactivo de acumulación capitalista, Latinoamérica y los países "periféricos" exportadores de materia prima conforman "la granja barata", China y los países "emergentes" asiáticos conforman, a su vez, "la fábrica barata", y juntos alimentan la existencia funcional del "gran casino global" del dinero sin fronteras con sede central en Wall Street.
En estos tres motores se asentó hasta ahora lo que los expertos (antes de la crisis) señalaban como "formidable crecimiento mundial de la economía", y que en la realidad solo se trata de un proceso de concentración de la riqueza en pocas manos, con su contrapartida de pobreza y exclusión social, inédito por sus alcances en la historia del sistema capitalista.

La crisis hipotecaria en EEUU, primero, la irradiación de la crisis a los mercados financieros globales, después, y la escalada de los precios del petróleo, luego, terminaron de configurar un proceso inflacionario-recesivo que amenaza con arrasar los cimientos del modelo de explotación capitalista vigente a escala global.
En este escenario, el petróleo (el recurso más escaso y buscado del planeta) es la estrella protagónica central.



LA ECUACION DE LA CRISIS

Los factores detonantes clave de una crisis mundial -según se desprende de las propias proyecciones oficiales- se motorizan por la especulación bursátil con las acciones energéticas, la sobredemanda de energía,
y el escenario siempre latente de conflictos geopolíticos y militares que se se ciernen sobre regiones petroleras estratégicas en Asia, Africa y Medio Oriente.
Como efecto de la interdependencia económica, el factor crisis financiera dólar débil-petróleo alto, hoy afecta en primer término a las "economías centrales" de EEUU y Europa, y se cierne como un fantasma sobre China, la llamada "fábrica del mundo", y mayor demandante global de petróleo y materias primas, que ya empieza a experimentar los primeros síntomas inflacionarios-recesivos en su economía.
EEUU y Europa son los principales compradores de productos chinos, y el gigante asiático, a su vez, es el principal importador de petróleo y materias primas de los "países emergentes", con lo que se puede deducir que si el Imperio estadounidense (en proceso recesivo) reduce sus compras, el impacto se va a proyectar inevitablemente en una crisis de China proyectada a los "países emergentes".
Con un proceso recesivo de su economía y un dólar devaluado, EEUU (el principal comprador de la "gran fábrica" asiática) reduciría drásticamente sus compras a China, y Europa, que ya enfrenta un fenómeno recesivo en su economía comunitaria, e ingresaría en una contracción de sus sistema económico productivo.
Como impacto inmediato, la economía china también ingresaría en un proceso recesivo (detención del crecimiento) que la obligaría a reducir sus importaciones de materias primas y de petróleo, A su vez la reducción en la importación de materias primas y de petróleo por parte de China (el principal importador mundial) impactaría en las economías de Rusia y de los "países emergentes" (los principales exportadores de petróleo y de materias primas a China) que también podrían ingresar en un proceso recesivo.
Esta situación, a su vez, sumiría al resto de las economías planetarias (interdependientes) en un proceso inflacionario-recesivo (estanflación) que dispararía una escalada de conflictos sindicales y estallidos sociales, como respuesta a la desocupación masiva y escalada de precios que generaría la reducción de la actividad económica a escala global.

EL INFIERNO TAN TEMIDO


Asia, África y Medio Oriente con sus regiones petroleras, contienen áreas de conflictos geopolíticos y militares en ebullición que amenazan con estallar en cualquier momento (como son los casos emblemáticos de Irán, Siria, y el Kurdistán iraquí) impulsando el precio del crudo, incluso por encima de los US$ 200 como vaticina Hugo Chávez.
El gran temor (no confesado) de las autoridades del sistema es que la escalada del petróleo y de los alimentos se junte finalmente con el estallido de algunos de los frentes de conflicto geopolítico que acechan a zonas claves de la producción petrolera mundial.
Si las "turbulencias" en los mercados bursátiles se juntan finalmente con la escalada de los precios del petróleo, la inflación y un desenlace de los conflictos geopolíticos-militares latentes, pueden convertirse en dinamita recesiva para la economía mundial y el sistema capitalista liderado por el Imperio estadounidense.
¿Que pasaría con la inflación mundial y el precio de los alimentos si Israel y EEUU -como señalan constantes rumores- iniciaran operaciones militares a gran escala en Gaza, Líbano, Siria, con posible extensión a Irán?
Como primer impacto estallaría el Medio Oriente, con un conflicto árabe-islámico generalizado que abarcaría a Irán, Irak, y los países petroleros del Golfo (más del 70% de la actual producción mundial de crudo), y seguramente se reducirían (o paralizarían) mayoritariamente los niveles de exportación y comercialización a escala mundial.

El efecto inmediato en los mercados financieros no sería otro que el que anticipa Chávez: El barril de petróleo tal vez alcanzando y/o superando la barrera de los US$ 200.
EEUU, la Unión Europea, China, India, los tigres asiáticos y Japón, las primeras y más poderosas economías del sistema capitalista (a su vez, los grandes devoradores del petróleo mundial) reducirían y/o detendrían notablemente su flujo de importación y exportación.
La crisis financiera devendría en "crisis estructural" y el cóctel recesión + despidos en masa = estallidos sociales y conflictos sindicales a escala global, escaparía de las herramientas que utilizan la Reserva Federal y los bancos centrales para controlar la "volatilidad de los mercados financieros".
Hoy, como se verifica en la práctica, la crisis financiera y la especulación en el mercado de los energéticos, son, en cierta medida, relativamente controlables por medio de la intervención de la Reserva Federal y de los bancos centrales que inyectan liquidez en los mercados y corren al rescate de las empresas y bancos quebrados.
Pero si (y como está pronosticado oficialmente) la crisis financiera (por medio de la recesión) deviene finalmente en crisis estructural del modelo capitalista vigente, aparecerán en el escenario mundial dos actores, de naturaleza "incontrolable": Los conflictos sindicales y el estallido social de las clases más empobrecidas del planeta.

Y como primer emergente (ya se está viendo en países rebelados contra el hambre, como Haití) estallaría el orden de "gobernabilidad vigente" sostenido a escala mundial con la "democracia" y el "estado constitucional", dando paso nuevamente a un actor que hoy permanece en un segundo plano expectante: La represión militar y policial de los conflictos sociales y sindicales para restaurar el "orden".
Resumiendo la ecuación:
A) La combinación petróleo-alimentos produce suba de precios e inflación a escala mundial.
B) La inflación produce recesión, carencia de alimentos y despidos laborales a escala mundial.
C) Los despidos laborales y carencias de alimentos producen conflictos sindicales y estallidos sociales a escala mundial.
En resumen, se rompen el modelo económico y el esquema de "gobernabilidad constitucional" globalizado obligando a la represión militar y policial para "restaurar el orden".
Procesando la información mundial, se puede verificar que ya estamos en la antesala de ese proceso.
En definitiva, el descontrol social y sindical a escala global es el infierno tan temido por los expertos e instituciones del sistema cuando hablan de "crisis recesiva mundial" en puerta.
Y hay un agregado más temible aún: El tiempo que medie entre la represión de los conflictos sociales y la "reconstrucción" de un nuevo modelo capitalista, puede alimentar la aparición de nuevos líderes y movimientos de resistencia popular que reciclen un nuevo proceso revolucionario a escala mundial.
Hay algo que (probadamente) no puede derrotar el capitalismo: Sus contradicciones y el parto continuo de la historia.

McCain necesita una guerra para ser Presidente: ¿Se la dará Chávez? ¿O se la dará Israel?

(Por IAR Noticias)

Una guerra siempre empieza por una escalada militar. Exactamente lo que precisa MacCain. Escenarios posibles: Medio Oriente, el Caribe o el Cáucaso. EEUU enfrenta cinco escenarios en la crisis financiera: Inflación-recesión, contracción del crédito, desocupación y achicamiento del consumo, y pérdida de credibilidad como potencia imperial. Ese es el territorio de Obama. Si hay guerra gana McCain, y si hay crisis financiera gana Obama. Esa es la consigna que ya adoptaron como propia los dos estados mayores de la campaña presidencial. Fuera de esa dos instancias diferenciales (guerra o crisis financiera) , Obama y McCain son "lo mismo". Y de como se conjuguen estos factores, uno de los dos, Obama o McCain, será el próximo Presidente del Imperio estadounidense "en crisis". Para Obama define Wall Street, para McCain definen Chávez, Putin e Israel. Gane quien gane, la Casa Blanca y el capitalismo imperial se reciclan en noviembre. ¿Guerra o crisis financiera? ¿Cuál de los escenarios predominará en noviembre? Comience a apostar.


Como buen experto en acción psicológica, Chávez se "sale de la vaina" por una escalada militar en el Caribe con el poder nuclear de Rusia en el centro del tablero.
Chávez necesita un poco de "acción" (aunque sea solo "disuasiva") para recuperar su alicaída imagen "interna" y su liderazgo regional en América Latina.
Después de perder el referendo de reelección, Chávez ingresó en la debacle: Perdió consenso interno, perdió influencia regional, y Venezuela se debate en un proceso inflacionario figurando como uno de las posibles víctimas inmediatas de la crisis económica global en América Latina.
El presidente venezolano precisa de algún golpe de efecto mediático en alta escala para recuperar el terreno perdido. ¿Qué tal una escalada militar-nuclear en el Caribe con la flota rusa? La opción para nada es decartable, y es justo lo que necesita MacCain.
Chávez ya preparó el terreno: Con pocos días de diferencia, ya realizó dos visitas a Moscú para comprar armas y consolidar una "alianza estratégica comercial-militar" con Rusia.

Decididamente Chávez parece haber cambiado el escenario de "guerra asimétrica" contra el "Imperio invasor", por la amenaza potencial de "guerra nuclear" en el patio trasero con la flota rusa desplegada en el Mar Caribe.
Eso sí (una cosa es el discurso y otra la realidad), el presidente venezolano ya recalcó esta semana que no romperá relaciones comerciales ni detendrá el flujo del petróleo venezolano a EEUU. O sea que la economía venezolana no colapsará, ni Chávez será será sometido a un golpe de Estado bis.
Si le sale bien, antes del 3 de noviembre en el Caribe habrá escalada militar y "guerra disuasiva" en el plano mediático (tal como le gusta a Chávez) y McCain ganará las elecciones en EEUU.
Chávez, sin ninguna duda, es un jugador de MacCain en el tablero.
Putin, después de nockear a EEUU en Georgia, necesita lanzar (¿Y que mejor que el patio trasero de Washington? un nuevo desafío militar al Imperio "unipolar" para seguir posicionándose en la guerra energética y por áreas de influencia con el eje USA-UE.
Ya hay dos señales claras: Rusia, desde hace dos semanas, ha movilizado barcos, aviones y submarinos con poder nuclear hacia Venezuela y el Mar Caribe.
Después del golpe asestado con el control militar de Georgia, Moscú lanzó un nuevo desafío a Washington en el Caribe cuando anunció que un contingente de su flota naval, compuesto por barcos, aviones y submarinos con armamento nuclear, realizará ejercicios militares con la Armada de Venezuela en noviembre.
No obstante, la escalada ya empezó cuando dos bombarderos nucleares rusos, hace dos semanas, aterrizaron en un aeropuerto de Venezuela.

Pero el Kremlin no se quedó allí: En una nueva movida, el primer ministro, Wladimir Putin, el hombre fuerte de Rusia, señaló el jueves pasado que su país está dispuesto a estudiar la posibilidad de ayudar a Venezuela en el desarrollo de un programa nuclear.
¿Qué tal?: La cena está servida para que Washington "reaccione" con alguna "advertencia fuerte" de parte de la Cuarta Flota. Juegos militares disuasivos: Chisporroteos de artificio "nuclear" en el patio trasero para la pantalla de la CNN. La tensión militar crece, y crecen las chances de MacCain en las encuestas.
Putin, sin ninguna duda, es un buen operador electoral de McCain.
El otro escenario militar para McCain es Israel.

McCain, como se sabe, traza sintonía fina con los halcones de Tel Aviv. Es lo más parecido a Sharon pero en versión híbrida-estadounidense. Comparte a full la tesis del "ataque preventivo" contra Irán, y en su última visita a la capital israelí suscribió como propia la tesis de un ataque "antes de que Irán construya la bomba".
Israel, por su parte, tiene que apresurar un desenlace con el programa nuclear iraní antes de que Bush y Cheney terminen su mandato. Con Obama y su estilo "democrático-dialoguista" la cancha se puede embarrar, y Tel Aviv ya no tiene tiempo para perder con la diplomacia: Corre contra reloj para destruir (o inutilizar por un tiempo) la capacidad de las usinas iraníes para producir una bomba nuclear.
Israel (vale aclararlo) no juega a la "disuasión" sino a la guerra: Es una cuestión de "supervivencia", según dicen los halcones sionistas de Washington y Tel Aviv.
Y el frente de Medio Oriente, posiblemente sea el conflicto militar de más inminente desenlace en el tablero geopolítico de las guerras "en agenda", de acuerdo con las señales y movimientos militares que ya se verifican en toda la región, desde el Golfo Pérsico e Irak, hasta Israel y sus fronteras con Gaza y el Líbano.
Por estas horas, ya hay infinidad de versiones y rumores cruzados de que Israel puede "cortarse solo" (con o sin sin luz verde de Washington) en un ataque relámpago contra las usinas nucleares iraníes.



¿Imposible? También la toma militar de Georgia (el más sólido enclave estratégico de EEUU en el Cáucaso) por parte de Rusia parecía imposible.
Relación costo beneficio: dejar transcurrir el tiempo sin neutralizar la capacidad de Teherán para construir una bomba nuclear puede ser más perjudicial para Tel Aviv que un contraataque militar de Irán.
En resumen, Israel, las 24 horas, opera para el triunfo de McCain en noviembre.
En cuanto al territorio de Obama: El presente de EEUU -según los especialistas de Wall Street- se configura por medio de cinco escenarios como desenlace de la crisis financiera:
A) Contracción del crédito y crisis de liquidez.
B) Desempleo y achicamiento del consumo.
C) Inflación-recesión= Deflación (desaceleración pronunciada de la actividad económica).
C) Pérdida de credibilidad del dólar.
D) Pérdida de influencia internacional del Imperio USA.
En este contexto, dicen of the record en ambas trincheras, Obama es el próximo presidente de EEUU.
Si Chávez, Israel, Putin y McCain lo dejan, claro está.
Los "estilos" de conducción.

Desde Greenspan a Bernanke: la Reserva Federal y el reinado financiero del lobby judío

(Por IAR-Noticias)

El poder financiero del lobby judío se expresa principalmente por medio de la Reserva Federal, un organismo clave para la concentración y reproducción del capital especulativo a nivel planetario. La sustitución de Gresspan por Bernanke marcan diferentes "estilos" de conducción, reveladores a su vez de una guerra interna por el manejo de las decisiones del organismo imperial.

El corazón del lobby judío estadounidense es el poderoso sector financiero de Wall Street que tiene directa implicancia y participación en el nombramiento de funcionarios claves del gobierno de EEUU y de los órganos de control de política monetaria e instituciones crediticias (nacional e internacional) con sede en Washington y Nueva York.
Por medio de la utilización política de su poder financiero, de su estratégica posición en los centros de decisión, los grupos financieros del lobby judío ejercen influencia decisiva en la política interna y externa de EEUU, además de su papel dominante en la financiación de los partidos políticos, de los candidatos presidenciales y de los congresistas.


Las principales instituciones financieras del lobby (Goldman Sachs, Morgan Stanley , Lehman Brothers, etc) y los principales bancos (Citigroup, JP Morgan y Merrill Lynch, etc), influyen decisivamente para el nombramiento de los titulares de la Reserva Federal, el Tesoro, y la secretaría de Comercio, además de los directores del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional.
Un ejemplo de esta ligazón es el nombramiento, en el 2005, de Paul Wolfowitz, ex subsecretario de Defensa, considerado el "cerebro" del lobby judío de Washington, como titular del Banco Mundial. Otro ejemplo destacado, fue el reciente nombramiento de Henry Paulson, presidente ejecutivo de Goldan Sachs como titular del Tesoro estadounidense.
El ex presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, como su actual presidente, Ben Bernanke, fueron impuestos por el lobby neoyorquino de los grandes bancos, financieras y corporaciones trasnacionales que se aglutinan en el llamado Consenso de Washington, un foro de existencia casi invisible desde el cual se acuerdan normas económicas-financieras y políticas de regulación de mercados que trascienden las fronteras de EEUU.

Normalmente, el presidente de la Reserva formula las "recomendaciones" sobre medidas financieras y tasas de interés y los 18 miembros del organismo dicen si están de acuerdo, y normalmente lo están, ya que el titular siempre expresa las decisiones y los intereses de los bancos e instituciones financieras que controlan a la Fed.
Como primer fuente de ingresos los bancos y financieras del lobby consiguen su tasa de rendimiento operando la concentración y la centralización del capital por medio de las "fusiones y adquisiciones" empresariales de las corporaciones y bancos trasnacionales, proceso del cual ellos mismos forman parte.
Como segunda fuente de ingresos está la especulación financiera, entre otras, con la "negociación de la deuda" y las diferentes apuestas en los mercados mundiales de valores, dentro de los que últimamente sobresalen los de la energía y el petróleo, donde Goldman Sachs y el Morgan estuvieron haciendo multimillonarias ganancias.
Entre las petroleras, en el año 2005, la
Exxon registró ingresos netos de 36.130 millones de dólares (5.71 dólares por acción), un incremento de 10.800 millones en relación con el 2004, que supera a los PBI juntos de países como Bolivia, Paraguay, y Uruguay.
El consorcio petrolero Royal Dutch Shell, uno de los mayores del mundo, cerró el 2005 con beneficios netos de 22.940 millones de dólares, nuevo récord para ese indicador, según fuentes del sector. La compañía anglo-holandesa se benefició el pasado año de los elevados precios del crudo, pues los mayores ingresos corresponden a las actividades de prospección y explotación de yacimientos.

Como resultante de este proceso de concentración de capital con el sector energético, tres bancos (Citigroup, JP Morgan y Merrill Lynch)
y tres instituciones financieras del lobby (Goldman Sachs, Morgan Stanley y Lehman Brothers)
recibirán en el 2006 una tasa de beneficios superior a los 70.000 millones de dólares, equivalente a más de 60 presupuestos anuales de un país como Bolivia.
El organismo clave para la concreción de este proceso de acumulación financiera a gran escala es la Reserva Federal de EEUU (controlada por los grandes bancos y financieras que manejan las inversiones y los procesos especulativos a nivel planetario), fundamentalmente por medio de las subas o bajas de las tasas de interés estadounidenses.
"Guste o no, la institución tiene la capacidad de mover a los mercados", dice Michael Belongia, un ex asesor de la Reserva Federal citado por el diario The Wall Street Journal.
En este sentido, y como sostiene James Petras: "El capital financiero (del lobby) ejerce una enorme influencia sobre la política económica gubernamental mediante una representación directa en los órganos de control de la política monetaria estadounidense: el presidente y consejo ejecutivo de la Reserva Federal. Sus criterios clave para el nombramiento del presidente de la Reserva Federal son la "confianza" y los estrechos vínculos y sólidas relaciones que el candidato tenga con Wall Street".
Según The Wall Street Journal, "Durante el reinado de Alan Greenspan, las reuniones de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos solían transcurrir así: Greenspan daba sus recomendaciones sobre las tasas de interés y, a continuación, los 18 miembros del banco central decían si estaban de acuerdo. Normalmente lo estaban".
El más influyente diario financiero del Imperio da "pistas" del control del mercado especulativo con las tasas de interés diciendo que el ex presidente de la Reserva, Alan Greespan, considerado el máximo gurú financiero del lobby, se manejaba con "señales" en clave para indicar las oscilaciones de las tasas de interés, vitales para las utilidades de la especulación financiera en Wall Street y el resto de las bolsas.
"Durante años, los mercados estaban atentos a cada palabra de Greenspan. Era una muestra del dominio que él tenía sobre la Fed y de su costumbre de incluir pistas veladas sobre la dirección de las tasas de interés en discursos cuidadosamente redactados", señala The Wall Street Journal en su edición del viernes 8 de septiembre de 2006.

Durante los años de Greenspan al frente de la Reserva, solamente un conjunto de grandes bancos y financieras del lobby recibían las "pistas" de cuando tenían que invertir y cuando "levantar ganancias" con sus capitales especulativos, haciendo diferencias enormes con la subas y bajas de las tasas de interés y los movimientos del dólar.
"De hecho, antes de 1994 la Fed ni siquiera anunciaba cuando cambiaba las tasas de interés: los inversionistas tenían que deducirlo de la compra y venta de valores financieros que realizaba el banco central", apunta The Wall Street Journal.
No obstante, el Journal desliza algunos cambios de "estilo" con la llegada del sucesor de Greenspan en la Reserva, un ex subordinado suyo, Ben Bernanke, que daría "más juego" a los bancos y financieras que habían quedado algo "relegados" respecto del sector que hegemonizaba durante la gestión del veterano gurú de Wall Street al frente de la Fed.
Según el Journal, "Con la llegada de Ben Bernanke a la presidencia de la Fed en febrero se realizaron algunos cambios sutiles pero importantes. Cuando los representantes de la Fed debaten la decisión sobre tasas de interés, él es el último en hablar. Los miembros de la Fed dicen que se sienten más libres para decir lo que están pensando, en vez de responder a las opiniones del presidente".
Cuando los economistas de la Fed enviaban su reporte semestral sobre crecimiento e inflación al Congreso de EE.UU., Greenspan no enviaba sus propias proyecciones. Bernanke sí lo hace", puntualiza el Journal.

Para el influyente diario financiero la "apertura democrática" liderada por Bernanke (que en realidad refleja la lucha interna de los bancos y financieras del lobby por el control del poder) conlleva sus beneficios y riesgos.
Bernanke -según el Journal- opina que la Fed durante mucho tiempo dependió excesivamente de las "preferencias personales" de sus presidentes, dando la "pista" del grupo cerrado de bancos y financieras que rodeaban a su predecesor Greenspan.
Siempre dando "señales" de como la llegada de Bernanke promovió una "mayor apertura" en desmedro de los sectores que hegemonizaban el control de la Reserva Federal en tiempos de Greenspan, el Journal señala que su nuevo titular "quiere asociar la política monetaria menos con su presidente y más con la institución".
A diferencia de Greenspan, Bernanke se ha empeñado en desarrollar al equipo de economistas menores en la Fed. Mientras su antecesor prefería comunicarse mediante memos, Bernanke muchas veces se reúne con los funcionarios de menor rango, apunta el diario financiero.
Precisando diferencias con Greenspan que solo se reunía con los grandes directivos y charman, el Journal subrraya que Bernanke ha sido visto "comiendo en la cafetería con funcionarios de la Fed e incluso jugando baloncesto con ellos".

"En eso, Greenspan era muy distinto -señala-, el ex presidente de la Fed prefería jugar tenis en las canchas de la Fed. Y, normalmente, jugaba con pesos pesados del mundo político y económico de Washington.
En resumen, el artículo de The Wall Street Journal -decodificado en sus "señales"- revela la lucha intercapitalista de los grupos financieros del lobby que controlaron la Reserva Federal durante la gestión de Greenspan, y los que buscan controlar por medio del "nuevo estilo de gestión" de su actual presidente, Ben Bernanke.
Fuera de esta guerra por el control de las políticas claves de la especulación financiera, la Reserva Federal continuará expresando las decisiones y los intereses de los bancos e instituciones financieras que controlan el planeta por medio del dinero trasnacionalizado y "sin fronteras".
Capitales del lobby judío, que seguirán con su dinámica de concentración y reproducción mediante la conquista de mercados y apoderamiento de recursos estratégicos, sea por vía de la invasión militar o del control de gobiernos con los "procesos democráticos".

LAS DOS CARAS DEL LOBBY JUDIO: EL ANTES Y DESPUES DE BUSH


Las líneas rectoras y los camuflajes del sistema que gobierna al mundo. Lo que no se cuenta sobre el poder que controla la Casa Blanca.

(Por IAR-Noticias)

El lobby "por derecha",Cuando se refieren al lobby judío (al que llaman lobby pro-israelí) la mayoría de los expertos y analistas hablan de un grupo de funcionarios y tecnócratas de la derecha fundamentalista, en cuyas manos está el diseño y la ejecución de la política militar norteamericana.
A este lobby judío (de derecha conservadora) se le atribuye el objetivo estratégico permanente de imponer la agenda militar y los intereses políticos y geopolíticos del gobierno y el Estado de Israel en la política exterior de EEUU.
Como definición, el lobby es una gigantesca maquinaria de presión económica y política que opera simultáneamente en todos los estamentos del poder institucional estadounidense: Casa Blanca, Congreso, Pentágono, Departamento de Estado, CIA y agencias de la comunidad de inteligencia, entre los mas importantes.
Como objetivo estratégico permanente, el lobby judío orienta sus acciones a imponer la agenda militar y los intereses políticos y geopolíticos del gobierno y el Estado de Israel en la política exterior de EEUU, valiéndose de funcionarios y lobbystas que operan sobre las estructuras del Estado norteamericano.
A través del lobby judío ("por derecha") el Estado militarista de Israel consigue imponer sus propias estrategias en la agenda exterior norteamericana, principalmente en el Consejo de Seguridad de la ONU, donde se mimetiza con las posiciones oficiales de la representación de Washington en ese organismo clave de la política internacional.


Con esa misión el lobby tiene instalados funcionarios claves en los centros de decisión de la Casa Blanca, el Congreso, el Pentágono y el Departamento de Estado y las redes y agencias de la comunidad de inteligencia estadounidense.
Según Petras, el poder del lobby pro-Israel, que incluye al AIPAC, la Conferencia de Presidentes, los PAC y cientos de organizaciones locales formales e informales, se ve incrementado por su influencia y hegemonía sobre el Congreso, los medios de comunicación de masas, las instituciones financieras, los fondos de pensiones y las organizaciones fundamentalistas cristianas.
Los tecnócratas del lobby (neocons) provienen principalmente del lobby sionista de Israel, la derecha cristiana, los think-tanks, las fundaciones y los grandes consorcios mediáticos -diarios y cadenas televisivas y radiales- que integran la logia empresarial contratista del Complejo Militar Industrial.
El lobby judío en EEUU adquirió fuerza y gran capacidad de influencia en la política norteamericana hacia Oriente Medio tras la guerra árabe-israelí de 1967, cuando se creó el American-Israel Public Affairs Committee (AIPAC) y la doctrina Nixon convirtió a Israel en el gendarme regional del poder militar estadounidense en la región.
Entre los integrantes más sobresalientes del lobby (nucleados alrededor de las figuras políticas del vicepresidente Dick Cheney, y del secretario de Defensa Donald Rumsfeld) sobresale el ex secretario adjunto de defensa, Paul Wolfowitz (hoy presidente del Banco Mundial) para muchos el verdadero "cerebro".
Otros miembros destacados del grupo son Douglas Feith, el ex número tres en el Pentágono, Lewis "Scooter" Libby, ex jefe de gabinete del vicepresidente Dick Cheney, John R. Bolton, embajador de EEUU en la ONU, y Elliott Abrams, a cargo de la política de Medio Oriente en el Consejo Nacional de Seguridad.
También son integrantes destacados James Woolsey, ex director de la CIA, autor de la operación que intentó vincular a Saddam Hussein con el 11-S y con las cartas con ántrax en EE.UU; y Richard Perle, que renunció a su cargo de asesor del departamento de Defensa tras un escándalo empresarial.
Una vez que abandonan sus cargos en la administración estadounidense pasan a desempeñarse en los think-tanks (gabinetes estratégicos) como el American Enterprise Institute (AEI), y el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS, por sus siglas en inglés), desde los cuales siguen operando ideas y negocios para el lobby desde la función privada.

El dinero para la financiación de las estructuras operativas del lobby ("por derecha") proviene de las megacorporaciones, petroleras, armamentistas, tecnológicas, financieras, que hacen negocios tanto con el Complejo Militar Industrial como con Wall Street, y también de fundaciones conservadoras al estilo de Bradley y Olin que utilizan las fortunas legadas a tal fin por magnates que ya dejaron este mundo.
El mayor vínculo entre los think-tanks conservadores y el lobby de Israel es el Instituto Judío de Asuntos de Seguridad Nacional (JINSA, por sus siglas en inglés) de Washington, que apoya al Likud, y que involucra a muchos expertos no-judíos de Defensa, quienes hacen constantes viajes a Israel en carácter de consultivos de los halcones de los gobiernos sionistas de turno en el Estado de Israel.
El Instituto Judío para Asuntos de la Seguridad Nacional (Jinsa), que fue fundado en 1976, fue fusionado con otro grupo, el Centro para la Política de Seguridad (CSP), y posee una impresionante junta directiva que incluye al vicepresidente, Dick Cheney, y los neoconservadores Paul Wolfowitz, Richard Perle, el subsecretario de Estado, John Bolton, el subsecretario de Defensa, Douglas Feith, Michael Ledeen, la antigua embajadora en las Naciones Unidas Jeanne J. Kirkpatrick, Stephen Bryen, Joshua Muravchik, Eugene Rostow y el ex director de la CIA James Woolsey, además de varios generales y almirantes retirados.
El grupo de funcionarios y tecnócratas del lobby "por derecha" se apoderó de la administración Bush hijo por medio del vicepresidente Dick Cheney, una especie de tutor político de W., cuando éste estaba a cargo de la transición presidencial (el período entre la elección en noviembre y el acceso al poder en enero).
Cheney, asesorado en las sombras por su socio y amigo el ex presidente George Bush, padre de W., se valió de esa circunstancia para colocar en la primera línea de administración republicana a los más reputados intelectuales y tecnócratas del lobby judío "por derecha".
Desde ese espacio clave empezaron a construir las nuevas coordenadas de la política exterior del Imperio y diseñaron la nueva estrategia colonizadora del Estado norteamericano: las guerras preventivas contra el "eje del mal", plasmadas en el papel por la halcona negra Condoleezza Rice.

En esa orientación estratégica el lobby ("por derecha") empezó a construir las teorías conspirativas sobre Bin Laden y el "terrorismo amenazante" que sirvieron para justificar la invasión a Afganistán tras el 11-S, y luego la invasión a Irak.
Las teorías e hipótesis de conflicto justificatorias de esa invasiones fueron elaboradas por el lobby judío en la Oficina de Planes Especiales (una estructura paralela a la CIA y a los organismo de inteligencia) , en vinculación directa con el equipo conducido por la entonces asesora en Seguridad Nacional de Bush, Condoleezza Rice, que componían junto con Cheney y Powell (hoy retirado) la primera línea de influencia en la Casa Blanca.
Desde allí el lobby construyó las principales teorías legitimadoras de la nueva invasión a Irak en base a informes falsos como lo fue, por ejemplo, la información provista a Bush sobre las armas químicas de Saddam, y sus presuntas vinculaciones con la organización Al Qaeda de Bin Laden.
Experiencia que le valió el mote de "fabrica de mentiras" con que se conoce a esta oficina invisible del lobby en el Pentágono.
Actualmente el lobby neocon con sus jefes políticos, Dick Cheney y Donald Rumsfeld, incrementa su presión sobre la Casa Blanca para que ordene acciones militares puntuales contra Irán y Siria, básicamente bombardeos "selectivos" como los realizados en Irak antes de la invasión.
El lobby judío ("por derecha") impulsa abiertamente la intervención militar en todo el mapa de Medio Oriente para eliminar "la amenaza árabe a Israel", y sostiene que Israel y Turquía son los únicos verdaderos Estados-naciones de la región y han estado pronosticando la desintegración de algunos Estados árabes desde la primera Guerra del Golfo.
Su "biblia" funcional se condensa en un documento del año1996 titulado "Un cambio nítido: una nueva estrategia para asegurar el territorio nacional," escrito por el grupo JINSA para aconsejar al entonces primer ministro entrante israelí Benjamin Netanyahu.

Este documento abreva en las raíces de la "teoría de los bolos" del Oriente Medio, según la cual un golpe dirigido contra Irak podría derribar varios regímenes árabes del Medio Oriente.

La misma teoría la repiten ahora poniendo en el centro a Irán y Siria, y a las organizaciones radicalizadas árabes que combaten a la ocupación militar de EE.UU. en Irak.
Hasta aquí, hemos descripto resumidamente al lobby judío "de derecha" como un grupo estratégico de funcionarios y tecnócratas "ultraderechistas" que (infiltrado en la administración Bush, y desde el 11-S) orienta sus acciones a imponer la agenda militar y los intereses políticos y geopolíticos del gobierno y el Estado de Israel en la política exterior de EEUU.


Pero esta versión del lobby (recreada por los expertos) está incompleta, le falta un capítulo.
El lobby "por izquierda"
Curiosamente los expertos, tanto de izquierda como de derecha, (salvo James Petras) sólo se ocupan del lobby judío neoconservador de la administración Bush, sin ninguna mención de otras administraciones anteriores, como la del demócrata Clinton, por ejemplo.
¿Acaso el lobby judío es un invento exclusivo de la derecha fundamentalista que hoy controla la Casa Blanca?
¿Porqué cuando se habla del lobby judío en "versión conservadora" se omite, aunque sea como referencia complementaria, su "versión liberal" implementada durante las administraciones demócratas, principalmente de Carter y de Clinton?
¿Acaso con las administraciones demócratas se detiene la acción del lobby judío sobre la Casa Blanca y las estructuras institucionales del poder estadounidense?
¿Acaso con las administraciones demócratas se detienen las invasiones militares de EEUU por conquistas de mercados y apropiación de recursos naturales, como las realizadas por Bush y su administración en Irak y Afganistán?
Al liberalismo de los demócratas, en EEUU, se lo denomina "izquierda". Y al lobby judío que opera durante esas administraciones (complementarias de la derecha conservadora) habría que llamarlo, por lógica consecuencia, lobby judío "de izquierda".
O por lo menos hacer una referencia, cuando se habla del lobby judío "de derecha", que el mismo lobby que hoy opera con la derecha conservadora de Bush (con otros nombres) opera simultáneamente tanto en las estructuras del Partido Republicano como del Partido Demócrata, y de sus respectivas administraciones cuando llegan a la Casa Blanca.
Por ejemplo: ningún analista se preguntó que hacia Samuel Berger, el jefe político del lobby judío que se movía en la órbita de la administración Clinton, como principal asesor del candidato demócrata John Kerry en la última elección presidencial .
Berger, un sionista liberal "de izquierda", fue asesor de seguridad nacional durante la presidencia de Bill Clinton, pero hasta ser descubierto robando papeles secretos se desempeñaba como principal consejero en temas de seguridad del candidato demócrata John Kerry.

Samuel Berger, William Cohen y Madeleine Albright cumplieron, durante la administración de Bill Clinton, las mismas funciones para el lobby judío liberal "de izquierda" que hoy cumplen Dick Cheney, Donald Rumsfeld y Condoleezza Rice en la administración Bush.
Pero de eso los analistas no hablan, solo se ocupan de los funcionarios halcones de Bush que hoy representan al lobby "por derecha".
Desde sus puestos en la Casa Blanca los sionistas judíos "de izquierda" Berger, Albright y Cohen, tuvieron una participación clave en los bombardeos y posterior invasión de EEUU a Yugoslavia lanzada por la administración Clinton con la complicidad militar de la OTAN, en marzo de 1999.
El trío también fue el impulsor principal de las operaciones aéreas anglo estadounidenses sobre la llamada "zona de exclusión" de Irak, las que causaron miles de muertos por las bombas y por los efectos colaterales de la radiación con uranio empobrecido entre la población civil.
Esta hoja en su prontuario no les impide a los sionistas "por izquierda", Berger y a Albright, presentarse hoy (sin ningún cuestionamiento de los analistas y de la prensa del sistema ) como opositores "democráticos" acérrimos a las prácticas militaristas "unilaterales" de Bush en territorio iraquí.
Experto en contraterrorismo, Berger fue una pieza clave en la "aportación de pruebas" para las denuncias sobre "irregularidades" cometidas por la administración Bush durante los atentados terroristas del 11-S formuladas por Richard Clarke, las que fueron utilizadas mediáticamente para complicar electoralmente al actual presidente de EEUU.

La administración de Clinton invadió países y asesinó a tanta o más gente que Bush, y sin embargo la prensa imperialista lo presenta hoy como un inofensivo play boy, o como un moderno cruzado (algo cholulo) de la democracia americana ocupado en escribir libros para chicos o presentar sus memorias con un éxito editorial millonario.
Según James Petras, " Bajo el presidente Clinton, el imperio estadounidense se expandió mucho más allá de las fronteras de cualquier otro presidente desde Harry Truman. Desde los países bálticos a los Balcanes, siguiendo hacia la parte meridional de lo que antes era la URSS, EE.UU. ha establecido una cantidad de estados clientes, que son o nuevos miembros de la OTAN o "Asociados por la Paz" (clientes en espera)".
Para Petras, "El estilo de construcción del imperio de Clinton combinaba la penetración económica abierta y el reclutamiento de nuevos clientes políticos con la intervención militar y de inteligencia encubierta.
"Este último método fue utilizado sea para reforzar la influencia sobre regímenes en desintegración o para socavar a regímenes independientes, o para vencer en la competencia contra competidores europeos o japoneses, usando el espionaje económico de alto nivel, el llamado Proyecto Echelon", señala Petras.
A este caballero, Bill Clinton, la socialdemocracia "progresista" internacional, aliada de los demócratas y del lobby judío "por izquierda, presenta como un estereotipo "democrático" a Bush.

Los demócratas y el lobby judío "liberal" de la era Clinton fueron los inventores de los bombardeos "quirúrgicos", término con el que se definió el uso intensivo de misiles y bombas "inteligentes" dirigidos por sistema láser, con el que se inició la era de la supremacía de los ataques aéreos como método de conquista militar, cuyo módulo experimental fue Yugoslavia.
Durante la gestión de Clinton comenzaron las primeras operaciones encubiertas de la CIA para asesinar o derrocar a Saddam Hussein, utilizando a los mismos funcionarios títeres que hoy gobiernan para Bush en Irak, y que entonces se presentaban en Londres y en Washington como la "oposición a Saddam en el exilio".
Tras la aprobación en 1998 por el Congreso de EEUU de la denominada Acta de Liberación de Irak, la Administración Clinton se dedicó a "fabricar" pruebas de inteligencia falsas y una oposición al ex líder iraquí, con el propósito de destituirlo o de legitimar una invasión militar y un cambio de régimen interno en el país.
El lobby judío, a través de Samuel Berger junto con el secretario de Defensa, William Kohen, fueron firmes impulsores tanto del grupo terrorista de Iyav Allawi (ex primer ministro de Irak) como con el de Amhed Chalabi, quienes consiguieron cuantiosos recursos del Pentágono y de la CIA para asesinar a Saddam Hussein y preparar el terreno para la invasión militar.
El lobby judío de Clinton

El Washington Institute for Near East Policy (WINEP), creado en 1985 bajo la responsabilidad del que hasta entonces había sido el director del AIPAC, Martin Indyk, desempeñó, durante la administración Clinton el mismo rol de "think tank" del lobby neoconservador que hoy desempeña el Instituto Judío para Asuntos de la Seguridad Nacional (JINSA) en el gobierno de los halcones de Bush.
Ambas son una rama de AIPAC, la organización de presión sionista más poderosa de EEUU y de todo el planeta capitalista.
Y como dato relevante indicador de la función complementaria de ambos lobbys judíos (el de derecha con los republicanos, y el de izquierda con los demócratas) baste mencionar que el director fundador de WINEP, Martin Indyk, había sido antes director de investigación del Comité de Asuntos Públicos Estadounidense-Israelí (AIPAC).

Como ya habíamos dicho y como señalara Petras, el poder del lobby pro-Israel, que lidera el AIPAC, la Conferencia de Presidentes, los PAC y cientos de organizaciones locales formales e informales, incrementan su influencia y hegemonía sobre el Congreso, los medios de comunicación de masas, las instituciones financieras, los fondos de pensiones y las organizaciones fundamentalistas cristianas.
En 1993, tras adquirir la ciudadanía estadounidense, Indyk se convirtió en asesor especial del presidente Clinton y director para Oriente Medio del Consejo de Seguridad Nacional. Más tarde fue nombrado embajador en Israel y subsecretario de Estado para Oriente Medio y el Sudeste Asiático.
El WINEP hoy es dirigido por Dennis Ross, que actuó como coordinador del presidente Clinton en el proceso de paz de Oriente Medio. Entre los investigadores y el personal que comparte con otros institutos neoconservadores se encuentran Robert Satloff (director de política), Patrick Clawson (director de investigación), Michael Rubin y Martin Kramer.
Fue el WINEP quien impulsó la concepción estratégica norteamericana de Israel como gendarme del Medio Oriente y aliado imprescindible de EEUU contra la "expansión del islamismo" y de los Estados "terroristas" en el mundo árabe.
Los operativos del lobby judío de la administración Clinton fueron los adelantados de las teorías y estrategias para el Medio Oriente que luego pusieron en práctica los halcones sionistas de la era Bush hijo.

Los tecnócratas y funcionarios del WINEP estaban entre los consejeros más próximos al presidente Clinton en la cumbre que negociaba la paz entre palestinos e israelíes, en Camp David, en julio de 2000.
La delegación norteamericana seguía al pie de la letra las posiciones del primer ministro israelí Ehud Barak, sin ofrecer propuestas independientes para la resolución del conflicto, tal como hoy lo hacen los integrantes del lobby neocon que controla la política exterior de Bush en Medio Oriente.


Además, el lobby sionista de la era Clinton impulsó el caso de mayor abuso de poder en la historia estadounidense con el perdón presidencial otorgado para Mark Rich, un multimillonario fugitivo en la lista de los Más Buscados del FBI, que había renunciado a su ciudadanía estadounidense antes de pagar los impuestos que debía.
El gobierno de Clinton, influido por el lobby de presión sionista inició los bombardeos preventivos contra Irak desoyendo el llamado de quienes pedían que cesaran las sanciones económicas que mataban a seis mil niños cada mes.
Estas precisiones y evidencias históricas prueban, entre otras cosas, que el lobby judío no es propiedad ni creación "exclusiva" de los halcones de Bush, sino que responde a dos líneas convergentes del sionismo capitalista trasnacional que proyecta su influencia en la Casa Blanca, tanto con administraciones demócratas como republicanas.

La catedral del poder sionista


(O la madre de todos los lobbys)
A los analistas (escandalizados por el lobby judío derechista de Cheney y Rumsfeld) no les mereció ningún comentario el hecho de que la candidatura del demócrata Kerry fuera impulsada por el lobby judío liberal "de izquierda", encarnado por la crema de empresarios y financistas de Wall Street, entre los que se contaban, entre otros, George Soros, David Rockefeller y Warren Buffet, el segundo hombre más rico del planeta después de Bill Gates.
Todos ellos notables integrantes de la Comisión Trilateral, histórico bastión del lobby judío liberal "por izquierda".
La Comisión Trilateral, fundada por iniciativa de David Rockfeller en julio de 1973, consolida la alianza entre el poder de las trasnacionales, el de las finanzas y el de la política, gracias a una red de influencias cuyas ramificaciones se extienden a los principales sectores de la sociedad estadounidense y mundial.
Entre sus principales "cerebros" fundadores se encuentra Zbigniew Brzezinski, articulador estratégico de la política exterior de Carter, gurú "ideológico" del lobby sionista que acompañó a Clinton, y mentor doctrinario en las sombras de la campaña electoral de Kerry.

La Comisión Trilateral (CT) representaba la síntesis del proyecto que venía a terminar con los residuos ideológicos del capitalismo conservador tradicional, destinado a morir a plazo fijo junto con la Guerra Fría y la URSS.
El "nuevo orden" trilateralista (paradojalmente impulsado por los viejos consorcios del imperio norteamericano) estaba delineado por la nueva clase dirigente de la era nuclear y espacial.
Bill Clinton, como James Carter y el resto de los presidentes norteamericanos de las últimas cinco décadas, salieron de las entrañas del Council on Foreign Relations (CFR) , la Comisión Trilateral y el Bilderberg Group, columnas vertebrales del poder sionista capitalista trasnacional.
El Council on Foreign Relations (CFR) conforma una poderosa organización centralizadora del capitalismo trasnacional a nivel planetario, de muy bajo perfil público, y de alta efectividad, integrada por unos 3.600 miembros del más alto nivel, prestigio e influencia en sus respectivas disciplinas y ámbitos de poder, tanto en EEUU como en Europa.
Integra en su seno una red vertebradora del capitalismo sionista trasnacionalizado expresado en el dominio abrumador de un reducido número de empresas transnacionales de dimensiones gigantescas, mayores que Estados, sobre la producción, el comercio y las finanzas mundiales.

La concentración del capital mundial en estos mega-grupos o mega-compañías, en una proporción aplastante, que implica modificaciones de todo tipo, en la economía, en la sociedad, en la vida política, en la cultura, etc., es seguramente el aspecto más definitorio de la globalización impuesta por el poder mundial del capitalismo imperial sionista.
Este capitalismo transnacional "sin fronteras" asentado en dos pilares fundamentales: la especulación financiera informatizada (con asiento territorial en Wall Street ) y la tecnología militar-industrial de última generación (cuya expresión máxima de desarrollo se concentra en el Complejo Militar Industrial de EEUU) se expresa totalizadamente en la estructura funcional de Council on Foreign Relations (CFR.

El objetivo central expansivo de este capitalismo sionista trasnacionalizado es el control y el dominio de recursos naturales y sistemas económico - productivos, que sus defensores y teóricos llaman "políticas de mercado".
El capitalismo transnacional, a escala global, es el dueño de los estados y sus recursos y sistemas económico- productivos, no solamente del mundo dependiente, sino también de los países capitalistas centrales.
Por lo tanto los gobiernos dependientes y centrales son gerencias de enclave ( por izquierda o derecha) que con variantes discursivas ejecutan el mismo programa económico y las mismas líneas estratégicas de control político y social.
El lobby judío de Washington (por izquierda o por derecha) planifica todo el nivel de las operaciones del capitalismo trasnacional, pero el diseño de la estrategia está en la cabeza de los grandes charmans y ejecutivos que se sientan en el cónclave del Consenso de Washington, instancia ejecutiva del "poder real".
Bush y sus halcones militaristas, como lo fueron Clinton y su troupe bancaria , son operadores circunstanciales de las necesidades estratégicas de este capitalismo sionista trasnacionalizado que, más allá de sus falsas competencias internas entre "halcones" y "moderados", entre lobby de "derecha" y lobby de "izquierda", funciona en una interacción económica - científica - tecnológica - militar totalizada.

Clinton, Rubin, y el Consenso de Washington lanzaron (en la década de los 90) la "burbuja financiera" de libre mercado y capitalismo sin fronteras, con el "sistema democrático" estandarizado como estrategia de dominio en todo el planeta, principalmente en el patio trasero latinoamericano.
Pero también (utilizando la cara "militarista" del Imperio) la administración demócrata de Clinton lanzó la invasión militar a Yugoslavia con el objetivo de expandir el capitalismo hacia los ex países comunistas de Europa del Este.
El Council on Foreign Relations, como ya se dijo, conforma la red vertebradora central de este capitalismo trasnacionalizado y "sin fronteras".
Sus redes se expresan a través de una multiplicidad de organizaciones dedicadas a promover el actual modelo global, entre las que se cuentan principalmente:
The Hudson Institute, The RAND Corporation, The Brookings Institution, The Trilateral Commission, The World Economic Forum, Aspen Institute, American Enterprise Institute, Deutsche Gesellschaft für Auswärtigen Politik, Bilderberg Group, Cato Institute, Tavestock institute, y el Carnegie Endowment for International Peace, entre otros.

Todos estos think tanks o "bancos de cerebros", reúnen a los mejores tecnócratas, científicos y estudiosos en sus respectivos campos, egresados de los las universidades de EEUU, Europa y de todo el resto del mundo.
Su función táctica y estratégica consiste en identificar amenazas y oportunidades del entorno mundial, evaluar las fuerzas y debilidades de los intereses agrupados dentro del CFR, y realizar amplios planes estratégicos, tácticos y operativos en todos los ámbitos donde opera la estructura del capitalismo trasnacional.
El CFR nuclea a los más altos directivos de instituciones financieras, colosos industriales y medios de comunicación social, a investigadores y académicos, a oficiales militares de máxima jerarquía, y a políticos, funcionarios públicos y decanos de universidades, facultades y centros de estudios.
Los distintos niveles operativos del sionismo capitalista trasnacional, desde tecnócratas, ejecutivos y grandes "charman" del Consenso de Washington (expresión máxima del poder capitalista real) con asiento en Nueva York, están contenidos y expresadosen el Council on Foreign Relations.
Son miembros del CFR una parte mayoritaria de los presidentes, gerentes y accionistas de las empresas Fortune 500 que en su conjunto manejan casi el 80% de la economía estadounidense, emplean a más de 25 millones de personas, y tienen un valor de mercado que equivale a dos veces y media el PBI de los Estados Unidos.
Las “Fortune 500” son las 500 mayores empresas de los Estados Unidos de acuerdo al ranking que anualmente publica la revista “Fortune”.
Desde su fundación, en 1945, el CFR tuvo como vocero a la publicación internacional más prestigiosa e influyente en materia de análisis geopolítico: Foreign Affairs. Los expertos sostienen que "lo que hoy se publica en “Foreign Affairs” se transforma mañana en la política exterior oficial de los Estados Unidos".
En el CFR se concentra todo el poder mediático del lobby judío sionista (por derecha y por izquierda): CNN, CBS, NBC, The New York Times, The Daily Telegraph, Le Figaró, The Economist, The Wall Street Journal, Le Monde, The Washington Post, Time, Newsweek, US News & World Report, Business Week, RTVE, etc, todos en manos de redes empresariales que integran el CFR.
En términos operativos el CFR conforma un poderoso centro de análisis y planeamiento geopolítico y estratégico del capitalismo imperial sionista en sus fase trasnacionalizada y globalizada.

También son miembros integrantes del CFR las grandes universidades y facultades como Harvard, MIT Massachussets Institute of Technology, Columbia, Johns Hopkins, Princeton, Yale, Stanford, y Chicago, entre otras, desde donde egresan la mayoría de los profesionales que cubren los 150 puestos clave de la administración estadounidense, incluyendo los cargos más relevantes en sus fuerzas armadas.
Como ejemplo del poder "totalizador" del CFR, se puede citar algunos miembros destacados del mismo como David Rockefeller, Henry Kissinger, Bill Clinton, Zbigniew Brzezinski, George H.W. Bush, la ex-secretaria de estado Madeleine Albright, el especulador sionista George Soros, el juez de la corte suprema Stephen Breyer, Laurence A. Tisch (presidente de la cadena Lowes/CBS), el ex secretario de Estado Colin Powell, Jack Welsh (presidente de General Electric Company), W. Thomas Johnson (presidente de CNN y hoy director de Aol/Time-Warner), Katherine Graham (fallecida presidenta del grupo Washington Post / Newsweek / International Herald Tribune), Richard Cheney (vicepresidente de EE. UU., ex-secretario de defensa de George Bush (padre), y ex-presidente de la petrolera Halliburton), Samuel “Sandy” Berger (ex asesor del presidente Clinton en seguridad nacional), John M. Deutch (ex-director de la CIA del presidente Clinton), Alan Greenspan (ex presidente del Banco de la Reserva Federal), Stanley Fischer (ex-director gerente del Fondo Monetario Internacional y actual director del CitiGroup), Anne Krueger (ex vicedirectora del FMI), James D. Wolfensohn (ex presidente del Banco Mundial), Paul Volcker (presidente del CS First Boston Bank y ex-gobernador de la Reserva Federal), John Reed (director y ex-presidente de CitiGroup); los economistas Jeffrey Sachs, Lester Thurow, Martin Feldman y Richard N. Cooper, el ex-secretario del Tesoro, ex-presidente de Goldman Sachs y actual co-Chairman de CitiGroup, Robert E. Rubin, el presidente de IBM, Louis V. Gerstner, el diputado republicano, Newt Gingrich, y la asesora del presidente Bush en seguridad nacional, Condoleeza Rice, el representante comercial de Bush Robert Zoellick, Elliot Abrams, William Perry, Mark Falcoff, Paul Wolfowitz (cerebro del lobby judío "de derecha" y actual presidente del Banco Mundial) , Richard N. Perle, y Richard Armitage, entre muchos otros.
Los citados personajes conforman las "dos caras" del lobby judío que controla las estructuras operativas y estratégicas del capitalismo sionista trasnacional que hegemoniza los recursos naturales y los sistemas económicos-productivos a lo largo y a lo ancho del planeta.

Para quien quiera investigar su existencia real, puede visitar la sede del CFR en la residencial Park Avenue esquina calle 68 de la ciudad de Nueva York, donde podrá obtener un ejemplar de su Memoria y Balance en el que figuran descripciones oficiales de sus actividades y la nómina de sus más de 3.600 miembros.

En síntesis:

El llamado lobby judío (por "derecha" y por "izquierda) esta conformado por una estructura de estrategas y tecnócratas que operan las redes industriales, tecnológicas, militares, financieras y mediáticas del capitalismo trasnacional extendido por los cuatro puntos cardinales del planeta.
El lobby judío no responde solamente al Estado de Israel (como afirman los analistas de la "cara derechista" de los neocons) sino a un poder mundial sionista que es el dueño del Estado de Israel tanto como del Estado norteamericano, y del resto de los Estados con sus recursos naturales y sistemas económico-productivos.
El lobby no solamente está en la Casa Blanca sino que abarca todos los niveles de las operaciones del capitalismo trasnacional, cuyo diseño estratégico está en la cabeza de los grandes charmans y ejecutivos de bancos y consorcios multinacionales que se sientan en el Consenso de Washington y se reparten el planeta como si fuera un pastel.
Este diseño del poder mundial, interactivo y totalizado, se concreta mediante una red infinita de asociaciones y vasos comunicantes entre el capital financiero, industrial y de servicios que convierte a los países y gobiernos en gerencias de enclave.
Ni la izquierda ni la derecha hablan de este poder "totalizado" por la sencilla razón de que ambas están fusionadas (a modo de alternativas falsamente enfrentadas) a los programas y estrategias del capitalismo trasnacional que controla el planeta.
Mientras no se articule un nuevo sistema de comprensión estratégica (una "tercera posición" revolucionaria del saber y el conocimiento) el poder mundial que controla el planeta seguirá perpetuándose en las falsas opciones de "izquierda" y "derecha".
Y el lobby judío de "derecha" de Bush y los halcones republicanos será sustituido -como está previsto- por el lobby judío "de izquierda" de los demócratas liberales en una continuidad estratégica de las mismas líneas rectoras del Imperio sionista mundial.
Y el mundo (de no mediar un viraje estratégico del sistema de comprensión) seguirá como hasta ahora: alienado y con el cerebro dividido.



VIDEOS DE LA CRISIS FINANCIERA EN EEUU


http://www.youtube.com/watch?v=schPpzwKsKc


http://www.youtube.com/watch?v=JIncD3mXMDE


http://www.youtube.com/watch?v=z6kLQHmZ4Hw


http://www.youtube.com/watch?v=0ig8N5wKyrc


http://es.youtube.com/watch?v=hi7K77d5M-s


http://es.youtube.com/watch?v=MvuPtr9dc6Y


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http://www.youtube.com/watch?v=cytcFmJ3zGw


http://www.youtube.com/watch?v=XyqO7xhGOy4